🌿2:🌿 Libro prohibido

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No sabía que hacer Billy estaba en un estado de shock, que aunque quisiera sacarlo no podía.

—Billy tranquilo, por favor— le rogue sin saber muy bien por qué yo estaba tan tranquila.

¿No te afecta por qué lo deseabas Mad?

Fruncí el ceño ante esa voz en mi cabeza.

¿Qué?

No lo niegues Maddyson, Abby no te agradaba, más bien, te hacía la vida imposible.

Negué con la cabeza horrorizada, esa voz no sonaba como la mía, sonaba como...

....la voz de la mujer del lago...

<<Las cabezas ruedan mientras las copas se alzan>>

Billy me miró con el semblante más sorprendido que he visto en mi vida, y su pregunta me dejó desconcertada totalmente.

—¿Maddyson?— Billy me miró a los ojos y sonrió de forma siniestra mientras negaba, divertido—... ¿Quien era la mujer del lago?— lo mire sorprendida, extrañada y muy confundida ¿Cómo el sabía eso?— ¿Quien es Mad?— su voz se torno gruesa y escalofriante, no era su voz.

—Tomare a los tuyos hasta que me devuelvas lo que es mío— susurró la mujer de cabello negro, lo susurró tan cerca de mi que pensé que estaba a mi lado, deje a Billy en el piso muy asustada y me levanté temblando, mire a mi alrededor asustada, me pase la mano por la frente, ya estaba comenzando a sudar frío, y sabía exactamente lo que eso significaba.

Mire a mi alrededor otra vez y sentí un jalón en mis jeans y me arrodille confundida cuando Abby apareció en mi campo de visión, con la soga todavía en su cuello y las manos amarradas con unas esposas.

<<Que mierda está pasando>>

—¡Maddyson!— grito una voz masculina que me alivio de una madera increíble, voltee la cabeza y pude distinguir entre lo borroso de mi mirada a Ariel.

<<Ariel>>

¿Por qué mi vista se tornó borrosa?

<<Estás llorando tonta>>

ª

—¿Estas bien Maddy?— Ariel me miró preocupado

Lo mire asustada y limpie mis lágrimas, mire a mi alrededor y varios adultos, entre ellos, la directora, la recepcionista, el conserje, la enfermera, la señora de la cafetería y varios maestros me miraron preocupados.

Los mire aterrada, perfecto, ahora me pasaran por loca.

—¿Esta bien señorita Hard?— pregunto amablemente el conserje.

Para mí buena suerte me llevo mejor con los adultos de la escuela que con los estudiantes.

Ariel me tomo por el brazo alejándola de ellos suavemente, miró a los adultos y sonrió un poco preocupado.

—Solo está en shock por el fallecimiento de Abby— aclaró suavemente — la llevaré a su casa.

Me tomo por el otro brazo, abrazándome de lado, apretó mi hombro con cariño.

—Vamos a salir de esto— susurró preocupado

—¿Por qué nos dejaron salir así?— pregunté confusa

—Suspendieron las clases por el suicidio de Abby.

Con Ariel abrazándome de lado pasamos por los pasillos de la escuela, los estudiantes de la preparatoria nos quedaron viendo, hasta que un chico de un año mayor se nos acercó.

Cambiando el pasado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora