Yunho mantenía una discusión consigo mismo, había ya pasado un mes y aún no se tomaba el valor suficiente para poder entrar a la habitación del menor en donde descansaba, sabía que el menor entro en un estado de coma y las posibilidades de que fuese a despertar eran nulas. Nadie se había movido del lugar, solo para poder ir a comer o a realizar su aseo personal. Pero ni Yunho había hecho eso, no quería salir del hospital, pero tampoco tenía el valor de entrar a donde estaba el pequeño Jongho. Estaba harto de su tonta actitud.
Abandonó el lugar que ocupaba en la sala de espera, camino por los tranquilos pasillos del hospital siendo guiado por sus propios pies, su mente temía con lo que se fuese a encontrar en aquel cuarto, pero su cuerpo seguía avanzando de manera involuntaria hasta que estuvo enfrente de la puerta blanca que le separaba. A un solo paso. Sin titubeos ingreso.
No fue como se lo imaginaba, sí, era una imagen que fácilmente hacía que el corazón pudiera doler. Suspiró un tanto aliviado al poder estar dentro, San estaba ahí durmiendo solo recargando su cabeza en la camilla en donde estaba el cuerpo del Choi menor, sostenía su mano y ambos parecían estar tranquilos, se vería normal si Jongho no estuviese en coma. Se acercó lo suficiente y se permitió el acariciar suavemente los cabellos de San quien se dejo mimar como si fuese un gatito, sonrió por la ternura que desbordaban los hermanos, no podía imaginar que tanto habían sufrido en manos de sus propios padres.
Siguió su recorrido por la habitación encontrándose con el historial clínico del menor, estaba detallado todo lo que le habían administrado desde que llegó al lugar. No estaba tan mal como su mente lo estuvo creyendo todo ese mes, solo era cuestión de que despertará, se quedó observando el rostro del menor y nuevamente se escapó de sus labios un largo suspiro, en ese momento alguien más entró a la habitación, era Wooyoung. Ahora es novio de San ya que decidieron ir paso a paso y hace unos cuantos días el menor le dio el sí.
—Me alegro que estés aquí...— susurró apenas vio a Yunho, teniendo cuidado de no hacer ruido para no llegar a despertar al menor —San temía a que no lo fueras hacer.
—¿Por qué?
—Ambos hermanos soy muy inocentes, tanto pueden confiar rápidamente en ti como llegar a desconfiar, San no pudo llegar a desconfiar de ti porque le demostraste que eras alguien digno de eso— hizo una breve pausa para dejar un suave beso en la mejilla del mencionado —. El es muy creyente de que los amores que no pudieron amarse vuelven a buscarse, dice que ustedes ya se han encontrado, Felix igual me lo dijo.
Yunho se mantuvo mirando al menor en todo momento, sus ojos ardían indicando que quería llorar, pero se detuvo. Sentía feo que su corazón siguiera doliendo por la partida de su primer amor, quería creer que Jongho era aquella persona que perdió hace tiempo atrás y muy en el fondo así lo creía. Tal vez lo era, tal vez no. El simple hecho de pensarlo así provocaba que su corazón se agitará, había soñado en alguna ocasión volver a encontrarse, en una situación ficticia, a Jeongin y tener una segunda oportunidad de amarlo como se merecía.
De la nada estaba solo, Wooyoung había salido de la habitación junto a San en lo que el alto se había perdido en sus pensamientos admirando al pequeño que dormía plácidamente. Suspiro y decidió colocarse justo a su lado ahí fue donde pudo admirar bien al contrario que tenía un pequeño corte en la frente y unos cuantos moretones en su rostro, pero se veía muy tranquilo, bastante a ser verdad.
¿Y si despertaba?
Yunho estaba llorando y eso le provocó reír, recordaba todos esos momentos que pasó con Jeongin y el como los había vivido a su lado. Recordaba el como lo había conocido hasta aquel día en que lo perdió así como recordaba su primer día de trabajo y su primer paciente. Lo recordaba todo. Su corazón había vuelto a picar. Sí, sin conocer a aquel chico se había enamorado, Jongho le hacía latir su corazón sin parar. Y sin siquiera saberlo, tenía una segunda oportunidad.
Su vista se fijó en la mano del pequeño cual empezaba a mostrar signos, sus pequeños dedos se movían demostrando que quería despertar, rápido limpió sus lagrimas y se mantuvo atento a cualquier otra acción del más bajito que al parecer luchaba consigo mismo para seguir en vida. Un frio escalofrío recorrió su espalda provocando que su piel se erizara algo que le hizo tener frio de repente y buscara abrigarse el mismo. Y cuando menos lo esperaba. Jongho despertó.
Su corazón seguía latiendo emocionado, al fin había despertado aquel chico que había encantado su corazón y que solamente quería amar, Jongho, ese chico que quería amar por toda su vida. Salió rápido del cuarto para notificar a los doctores que atendían al pequeño debido a que el tenía prohibido hacer algo al respecto, tenían que ver que después de que el Choi menor estuviera en coma por mucho tiempo estuviera bien.
Todo debía estar bien ¿verdad?
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Sobredosis [2ho] •Editando•
Fanfic⠀ ⠀ ㅤ ≠ "A menudo, encontramos nuestro destino por los caminos que tomamos para evitarlos". ⠀ ⠀ ㅤ⠀ ㅤㅤ Yunho no quería perder a nadie más. Mucho menos a Jongho.