El Shinobi del hidrógeno: Izuku Midoriya

Extinguiendo pájaros y un trato con el diablo

Acciones/estados
Diálogos (personajes): Buenas
**Pensamientos (personajes)**
================================
Mientras los héroes salían escopetados de su reunión y hacían las llamadas pertinentes, yendo hacía la localización del peliverde.

Este último descendía del edificio en el que estaba de un salto, aterrizando frente a las puertas del recinto de los Yakuza y agrietando el suelo frente a estas.

Tras eso, empezó a caminar de nuevo hacia las puertas y con una patada, reforzada con su quirk, abrió la puerta y la arrancó del marco, creando un estruendo y activando las alarmas de seguridad de la guarida.

En una cuarto ubicado en algún rincón de la base subterránea de lo Shie Hassaikai.

Kai: Espero entiendas que hago esto por el bien de la Yakuza y me perdones jefe (hablándole a un hombre dormido en una cama de hospital)

De repente, las alarmas saltan y uno de los altos mandos de Chisaki entra a la habitación.

Kai: (molesto) ¿Qué ocurre Nemoto?

Nemoto: Verá, señor, alguien está atacando la base (nervioso)

Kai: (más cabreado) ¿Y quienes son los imbéciles que ..?

Nemoto: Sólo es una persona, señor.

Kai: (con llamas en los ojos) ¿Quién?

Nemoto: (asustado) Punisher.

Ante esto, Kai se tranquilizó de manera inmediata y parecía haberse perdido en su mundo, cosa que preocupó a su subordinado.

Nemoto: Eem ¿Señor?

Kai: (entrando en razón) Nemoto, ve a por Eri y reúnete conmigo en la salida de emergencia, yo iré por las balas acabadas.

Nemoto: ¿Que hay del resto señor?

Kai: Serán la carnada y, Nemoto, ordena la destrucción de toda la información.

Tras eso, salió de la sala bajo la vista de su subordinado, quién siguió su ejemplo poco después.

Mientras esto ocurría, Izuku caminaba por los pasillos de la base como si de su casa se tratara, pero detrás de él se podían ver los cuerpos desmayados de los Yakuza lo suficientemente estúpidos, o leales, como para tratar de frenarlo.

Cuando se aseguró de haber acabado con todos los que había en esa planta, bajó las escaleras y dos enormes puños aparecieron frente a él con la intención de matarlo de un golpe.

Pero con su quirk, Izuku desapareció y reapareció tras sus dos atacantes mientras envainaba su Wakizashi.

Rappa y Rikiya: ¿Cómo...?

Click.

Fue lo último que escucharon ambas balas antes de que sus cuerpos calleran al suelo y sus cabezas rodarán por este.

Sin embargo, Izuku siguió de frente, sin prestarles atención, hasta que el pasillo se cerró en frente de él, al igual que a sus espaldas, y unos pilares salieron de las paredes con la intención de aplastarlo.

Pero Izuku esquivó todos los ataques y se quedó en una esquina, mirando fijamente un punto de la pared.

Mimic: Vaya, vaya, sin dudas eres muy ágil Punisher. (Empezando a modificar de manera drástica el pasillo con su quirk mejorado) Pero este es tu fin.