Tú, eres mía (Scorpion x tu)

(P.1)

~P.O.V (t/n)~

Suspiré, mirando el paisaje al rededor. Todo el lugar había sido arruinado. No había nada más aquí para que echáramos un vistazo. Solo quería volver a casa.

-"Bueno, ¿no es esto acogedor?" preguntó Johnny cruzando los brazos. Miró el suelo en el que estábamos parados.

El suelo de Netherrealm estaba tibio, pero no demasiado. Preferiría la Tierra antes que Netherrealm sobre cualquier momento. Creo que todos lo haríamos.

-"¿Cuándo nos recogerán?" cuestioné, poniendo presión extra en el corte en mi brazo. No me sorprende que me hayan apuntado hoy... pero todavía me pregunto por qué. No es como si nada aquí tuviera reservas ni nada en mi contra.

-"Primero debemos activar los generadores. Sin ellos, no hay energía alrededor, lo que significa que la base no podrá recogernos. Deberíamos dividirnos. Si atrapan a alguien, nos rescataremos entre todos. Vamos a ponernos en marcha. Cuanto más rápido se haga esto, más rápido Raiden podrá llegar aquí, y los retornados volverán a la normalidad", explicó Sonya, cruzando los brazos.

-"¿Estás seguro de que me vas a rescatar?" preguntó Johnny, cruzando los brazos. Parecía no importarle la situación actual. Lo cual no me sorprendió.

-"Deberíamos preguntarte eso" murmuré, rodando los ojos.

-"¿Por qué?"

-"Porque no eres bueno manteniendo tus palabras", le respondí, mirando a Sonya. Ella simplemente asintió, sabiendo hacia dónde se dirigía esta conversación.

-"No fue mi culpa que el 'poderoso' Hanzo Hasashi no pudiera quedarse agrupado. Tenía un trabajo, (t/n), un maldito trabajo", espetó Johnny, sacudiendo la cabeza.

-"Idiota. Eras tú quien se suponía que tenías que vigilar a todos. ¡Eres un mal líder!"

Kenshi asintió, dándole la espalda al grupo.

-"Detente, ahora. Iré al norte. Johnny, ve al sur. Sonya, irás al este mientras (t/n) va al oeste. Tendremos que ser rápidos. Ya no estamos solos". Kenshi rápidamente comenzó a alejarse de nosotros, dirigiéndose a donde quisiera ir.

-"¿Cómo sabe las direcciones en este lugar?" preguntó Johnny, cruzando los brazos. Me encogí de hombros, caminando hacia el oeste de Kenshi.

-"Esta es una fuente de energía realmente rara..."

El sonido de la voz de Sonya desapareció mientras seguía en la dirección en la que iba. Miré a mi alrededor, tratando de encontrar algún generador. El área a mi alrededor estaba sorprendentemente tranquila. No podía oír ningún movimiento en la hierba, nada. Casi como si todo estuviera muerto. Incluso el viento. Lo cual no me sorprendería.

Dejé escapar un gemido de frustración cuando comencé a pensar en Johnny de nuevo. Era él quien tenía un trabajo. Para asegurarse de que todos estuvieran agrupados, de modo que ninguno tuviera que luchar solo. Sé que Hanzo hizo lo que hizo para asegurarse de que los demás escaparan de este lugar infernal con vida. Por supuesto que se sacrificaría para salvar a un montón de gente, pero ¿Alguna vez pensó en Kael y en mí?

Ese día, hace tres años, ¿Cómo esperaba que un niño de cinco años y yo nos ocupáramos del Shirai Ryu sin él? Ha sido increíblemente difícil después de su fallecimiento. Todavía puedo recordarlo. La única posesión que quedó fue una de sus lanzas, nada más.

Maldije por lo bajo cuando llegué a un callejón sin salida. Era casi como si las rocas no quisieran que las pasara. Y tampoco parecía que pertenecieran aquí. Suspiré, subiendo mis mangas. Caminé hasta la gran roca que cubría mi camino. ¿No habría otra forma de superarlo? No, la montaña sigue así durante horas. Es un camino estrecho a través de la montaña y de la grieta. No parecía haber más de dos metros como máximo entre las dos laderas de las montañas.