Escape to my side ✰ 2yeon [EDITANDO]

➹ O25 ; Hasta luego

¿Qué pasa cuando no ves a la persona que amas durante meses?

No lo sabía hasta que pasó el incidente en casa de Jeongyeon, aquel día que marcó el inició del desborde de nuestra relación. Hasta entonces, supe la respuesta a la pregunta inicial.

Mi mente se volvió una caja que albergaba pensamientos caóticos y angustiantes, y el miedo me consumía ante una fuerte posibilidad de no poder volver a ver a mi novia. Me preguntaba constantemente sobre cómo estaba mi rubia, en si pensaba que la había abandonado o si sabía que no me había alejado de ella por mi propia voluntad.

Porque fui obligada a alejarme de ella, bajo las órdenes de mi padre, tuve que dejar de asistir presencialmente a la universidad, comencé a recibir mis clases en casa, tener mi celular confiscado y no poder ver a mis amigas. Habian días en los que pensaba hasta el punto tan extremo al que llegó mi padre con tal de que no viera a mi novia.

Y eso que no era el límite hasta el que él podía llegar.

Entré en desesperación, pues estar encerrada en mi casa no era algo muy agradable que digamos. A mí me gustaba salir, y no estaba acostumbrada a pasar tanto tiempo en mi hogar, por lo que cada momento se sentía como un verdadero martirio, sumandole el hecho de que estaba desesperada por ver a mi novia.

¿Y qué pasa cuando una persona llega a un punto máximo de desesperación? Fácil, cómete acciones sin pensar.

Ese día decidí escaparme de mi casa para ir a ver a Jeongyeon. Fue algo complicado por el hecho de que estaba vigilada la mayor parte del tiempo, pero finalmente pude salir durante la madrugada.

Mi corazón se encogió al encontrar a mi novia llorando en su habitación, nunca la había visto tan triste y eso sin duda causó un gran impacto en mí, agregándole el hecho de que se veía un poco demacrada por mi ausencia. Noté que estaba más delgada al tomarla por la cintura y que debajo de sus ojos tristozos estaban marcadas unas notorias ojeras.

Pase un rato junto a ella, explicándole el por qué no me había podido comunicar con ella. Luego de eso ella logró dormirse, la note un poco más tranquila y eso de cierta manera me causó paz. Al menos por ese día había podido dormir bien.

Eran aproximadamente las cuatro y media de la madrugada, y yo estaba dirigiendome de regreso hacia mi casa. La idea de escaparme a otro lugar definitivamente era tentadora, sin embargo, pensaba con lógica que no tenía a dónde ir, ni siquiera llevaba dinero o ropa conmigo, así que por el momento era mejor regresar y luego ver qué hacer para seguir junto a Jeongyeon.

Cuando estuve frente a mi casa suspire, no tenía ganas de entrar, sólo quería estar con Jeongyeon y olvidarme de todo mi alrededor al fundirme en sus labios, aunque lamentablemente era una ilusión demasiado lejana a la realidad.

Apreté los labios y abrí la puerta de manera silenciosa, tratando de ser cautelosa para que mis padres no se dieran cuenta de que me escapé. Entré con sumo cuidado y de la misma manera cerre la puerta, para posteriormente darme la vuelta.