Dream is... [DreamNotFound]

3

Dream daba vueltas sobre su cama sin poder conciliar el sueño. No había parado de recibir llamadas y mensajes de Fundy y no fue el único en saturarse, sino que su teléfono también lo hizo, por lo que tuvo que apagarlo.

Aún podía escuchar a su padre y a su madrastra conversando en la sala sobre cosas como la renta, impuestos y cosas de las que no eran su preocupación por el momento.

La relación con su madrastra puede que no sea la mejor, pero no la odiaba, solo nunca se dio la oportunidad de conocerla. El extrañaba a su madre.

Sin darse cuenta sus lágrimas mojan la funda de su almohada. Odia estar en casa porque le recuerda a ella. Su lugar de confort era Fundy y siempre que se sentía solo iba a su casa, pero ahora no tenía a dónde ir o tal vez sí.

Enciende su teléfono y con el nudo en su garganta lee los mensajes que le había enviado Fundy. En los primeros mensajes no deja de insultarle, pero entre más baja los mensajes se vuelven en disculpas y mensajes donde decía lo mucho que lo amaba. ¿Por qué tenía que ser tan confuso? ¿Lo odiaba o lo amaba?

Su mente y sus sentimientos se sienten confusos sin saber cómo sentirse. ¿Todo era una mentira? Podría estar diciendo la verdad. ¿Y si no? Fundy no le mentiría.  Lo ha hecho varias veces. ¿Puede que esta vez haya decidido cambiar? No podía descartar las posibilidades.

Fundy

¿Aún me amas?

Nunca te he dejado de amar.

No me estoy sintiendo bien últimamente.

¿Quieres hablarlo?

Solo quiero un abrazo.

Ven.

Dream se escabulle por la ventana de su habitación como las miles de veces que ha hecho en los últimos años. Ya ni siquiera siente la adrenalina de las primeras veces que se escapó. No es como si su padre se fuera a dar cuenta.

Cuando llega a la casa de Fundy, este no tarda en recibirlo con un abrazo.

—¿Quieres pasar?

—¿Crees que pueda quedarme aunque sea por esta noche?

—Solo si me prometes algo.

—¿Qué?

Fundy se separa del abrazo tomando las manos de Dream con las suyas.

—Termina con el chico ese y sé mi novio otra vez.

En ese momento Dream recuerda que no debería estar allí, aunque por alguna razón se siente tan bien la forma en la que sus manos encajan perfectamente con las de Fundy, la forma en que su corazón late enamorado, la forma en que no puede dejar de mirar sus ojos como si fueran los más hermosos del universo, que no puede decir que no.

—Claro.

Despierta con los brazos de Fundy rodeando su cintura de tal forma que están tan cerca del otro que puede sentir su respiración sobre su hombro.

—Fundy —lo llama con la voz un poco grave por recién haberse levantado—, tengo clases.

—Un ratito más —le dice apegando su cuerpo más al suyo.

—Fundy...

—¿Sí?

—Mis clases.

Fundh se levanta de mala gana y Dream empieza a vestirse rápidamente con la ropa del mayor. Ha hecho eso varias veces que ni siquiera debe pedirle permiso.

Mira la hora y ya es tarde. No le da el tiempo de desayunar y sale rápidamente de la casa encontrándose con Fundy en el auto.

—No pensabas ir en autobús ¿o sí?

—Te amo.

Dream se sube rápidamente y para su suerte llega justo cuando suena la campana de la segunda hora de clase.

—¿Vengo por ti más tarde?

—Te lo agradecería.

—No quiero verte con otro chico, ya sabes.

Dream asiente y va a su próxima clase sintiendo que le falta algo.

—¿Y tu mochila? —escucha la voz de George detrás de él.

Había olvidado su mochila en casa.

Dream recuerda las palabras de Fundy y lo ignora.

—Hola, Dream. Te estoy hablando.

George empieza a tocar su hombro varias veces y nada. Dream sigue sin decir nada.

—¿No te dieron por detrás anoche? —George trató de que se riera, pero nada—. Te juro que trato de ser amable contigo, pero no cooperas. Y era un chiste, por si eres de los que se ofenden por cualquier cosa.

Dream entró a su clase y en ese momento se dio cuenta que no tenía más opción que hablar con George. Fundy no debía de enterarse.

—George, ¿me prestas un papel y un bolígrafo, por favor?

—¿Por qué debería hacerlo?

—Lo siento por ignorarte, pero mi novio no quiere que hable con otros chicos.

George lo miró sorprendido y supo que no mentía al ver el nerviosismo de Dream.

—¿Tu novio es el mismo chico de la otra vez?

Dream asintió con la cabeza.

—¿No habías terminado con él?

Dream desvía la mirada.

—¿Puedes solo darme el papel y el...

—Eres idiota ¿verdad? Te está manipulando. No sé qué te haya dicho, pero miente. Si terminaste con él es por algo. No cometas los mismos errores dos veces.

—Joven Davidson, ¿podría guardar silencio? Estamos por empezar la clase.

George se levanta de su asiento y arrastra con él a Dream hasta fuera del salón para poder seguir hablando en paz.

—No te vuelvas a acercar a ese idiota. ¿Acaso no recuerdas todos los insultos que te gritó?

—Él está cambiando. Fue muy dulce conmigo anoche.

—¿En serio? ¿Qué hizo? ¿Te dijo que aún te amaba, que lo perdones, que será mejor persona?

—¿Cómo lo sabes?

—Yo... Conocí a alguien que pasaba por lo mismo. Todos los idiotas son iguales, es como si usaran el mismo guión.

—Fundy no es así. Puede que se haya equivocado ¿pero acaso errar no es humanos? Él es muy lindo por dentro y por fuera también. Ayer me consoló y me dejó ir a su casa.

—¿Y luego te cogió tan fuerte que ya no sabes diferenciar lo que está bien y lo que está mal?

—Pues... ni lo hizo tan fuerte.

—Oh, Dios. Solo estaba bromeando. No quería detalles, gracias.

—¡Fundy es buena persona!

—Eres el único que diría eso.

George regresó a la clase cansado de no hacer que Dream entrará en razón y se encontró con todos mirándolo, incluso el profesor.

—¿Qué me miran? ¿Tan lindo soy?

—Estaba hablando sobre un proyecto que debían hacer en parejas. Todos ya tienen su pareja menos ustedes dos. Tendrán que trabajar juntos.

El corazón de Dream se detuvo por un momento. ¿Cómo iba a hacer el proyecto con George sin que Fundy se enterara?