-Advertencia: Pequeña mención de heridas y sangre.-
Por un momento esos dolores habían aumentado, se sentía horrible. Se sentía como si cada punzada que tenía quisieran acabar con él de una vez por todas, deseaban su muerte, maldita sea ¿Que estaba ocurriendo? ¡Esto no debería ser así!
Un ambiente terriblemente solitario golpeó, se sentía mucho peor de lo que ya estaba. El dolor seguía aumentando, los malestares empeoraban y parecía no haber forma de deshacerse de ellos, estaban pegados a él. Se apoyó en una pared, sentía como sus piernas se volvían como gelatina estando a punto de derrumbarse.
Esto no estaba bien, ¡Nada estaba bien! Maldita sea ¿¡Que estaba pasando!? Todo eso se sentía horrible, podía ser que un momento más y esto sería mucho peor que los ataques de pánico que llegaban de la nada. ¿¡Que debería de hacer!? Sus fuerzas se agotaban, por más que trataba nada parecía funcionar para quitárselo, sentía su cuerpo completamente desesperado.
Llevó sus manos a la cabeza, aplicaba algo de fuerza para tratar de quitárselo. Nada funcionaba, el dolor poco a poco se convertía en ardor, un horrible ardor que quemaba por dentro mientras trataba desesperadamente de quitárselo.
Pero unas risitas lo detuvieron, sonaban bastante raras, como si de alguna forma estuvieran dañadas. Abrió los ojos, de inmediato su vista se volvía entre roja y oscura. Trató de buscar esas risas, pero no había nadie alrededor. Estaba soñando o estaba perdiendo la cabeza, si, seguramente, se estaba volviendo loco.
— "Oh, ¡[N]!~ ¿Que ocurre pequeñín?"
Una presencia completamente extraña pero incomoda apareció, se sentía lejana. Un par de ojitos se hacían camino entre tanta oscuridad de esa distancia, eran color rojo.
— "¿No estás felíz de verme?, ¡Ha pasado tanto tiempo desde la última vez!"
Hablaba con inocencia, ¡Esto es una completa locura! ¿¡Quién es y por qué decía esas cosas!?
Poco a poco esos ojitos se acercaban, se sentían amenazantes, se balanceaban de un lado a otro como si estuviera jugando.Afortunadamente los dolores habían disminuido, no del todo, pero ahora ya no eran tan molestos. En ese momento trató de hacer todo lo posible por salvarse, pero ni si quiera podía moverse. Esa cosa se acercaba a saltitos, cada vez que lo hacía se lograban ver más caracteristicas que tenía, una de ellas eran un par de orejas largas y blancas.
— "Ya veo... ¿Quieres escapar? ¡Que lastima! Porque no lo harás hasta que pueda acabar contigo."
De repente pareció estar a mitad del camino, la amenaza estaba cerca, ¡Ni siquiera tenía sentido lo que decía! El miedo lo comía hasta las venas, las ganas de terminar huyendo eran bastante enormes, pero aún no podía hacer nada.
De repente algo apareció cerca del conejo, parecía llevarlo consigo, el brillo de la cosa demostraba lo filoso que era.— "¡Lo que hiciste la última vez no fue muy agradable de tu parte! Pero bueno, supongo que ya no importa."
De la nada se encontraba frente a él, la cosa filosa se alzó, su brillo plateado se iluminó entre tanta oscuridad, en esta se podía ver con claridad los ojos aterrorizados que el guardia tenía.
— "¡Te veré pronto!"
Una última sonrisa fue lo que se observó justo antes de que tuviera que dar un grito, el grito de su muerte, todo su cuerpo en ese momento ardía y era insoportable, la muerte había llegado.
La sangre caía, el arma había logrado perforar sin problemas su piel, llegando causar que la sangre corriera sobre el arma destrozando el hermoso brillo que tenía y después cayera al suelo. Dejando evidencia del asesinato que hubo.
Pero nadie se daría cuenta de ello, jamás sabran lo que alguna vez paso ahí. Su cuerpo desaparecería antes de que si quiera se dieran cuenta. Que lastima, esto solo quedaría como una victoria más para la coneja, su objetivo había terminado.
Hubiera sido una dulce victoria, ojalá y no hubiera tenido esa oportunidad de reaccionar tan rápido.
Ardía, ardía mucho más de lo que había sentido antes. Pero había salvado su vida, justo cuando más creía que moriría. El dolor de su brazo recorría todo su cuerpo, por querer ponerse a salvó había metido el brazo para lograrlo, lo consiguió de la manera más dolorosa posible.
La sangre corría, el arma seguía metido aún cortando la piel de esta. Había sorprendido a la coneja, nada de esto debía de suceder, mucho menos debía de haber fallado en algo tan fácil.
Pero no se rendiría, con rapidez sacó el arma de su brazo, provocando que mucha más sangre saliera y el ardor aumentara, le encantaba lo que provocaba.
Otro intento de querer acabar con él fue detenido. A pesar del ardor que tenía no dejaría vencerse tan fácil, esto era lo que tenía que hacer si realmente quería seguir viviendo. Era él contra esa coneja. En un movimiento arriesgado pero rápido logró golpearla por el estómago, provocando que tuviera que sujetarse esa zona para tratar de calmar el dolor.
Fue el momento donde aprovecho para correr, no se enfrentaría a esa coneja, mucho menos con el brazo herido. Esa coneja tenía mucha más ventaja y podría acabar muy fácilmente con él. El ardor disparaba en todo su cuerpo, los roces de aire provocaban más molestias, realmente no era algo que podía aguantar tan fácilmente, la falta de sangre estaba empeorando las cosas. El único objetivo que tenía ahora era escapar de esa maldita cosa.
Su salida eran las puertas de metal que estaban a lo lejos, ahora estaba casi cerca de una de ellas, la esperanza recorría todo su cuerpo a pesar de su estado físico. Cuando llegó abrió las puertas pulsando el botón que estaba al lado de estás, inmediatamente abrieron y entonces entró. El problema fue que no se movían cuando quería cerrarlas, no reaccionaban.
Con más rapidez apretaba el botón, finalmente las puertas lograron cerrarse justo antes de que la coneja lograra entrar. Lo único que se escuchó del otro lado fue como el cuchillo golpeaba el metal de las puertas, para después emprender su camino subiendo mientras dejaba una agradable música de fondo.
Lo único que procedió en ese momento fue a tratar de recuperarse lo más que pudiera, de momento se había salvado. Pero esa herida junto a la cantidad de sangre que aún estaba perdiendo provocaban que mantenerse despierto fuera algo casi imposible. Afortunadamente los malestares como la vista entre roja y oscura y el horrible mareo desaparecieron por completo, bueno, en realidad está última no tanto, aún permanecía por lo que ahora sufría.
._._._.
Quiero agradecer por el apoyo que le dan al libro, como los votos, vistas y demás, enserio muchísimas gracias eso se aprecia. ^^A si, sobre los diálogos los pondré cuando todos los personajes ya hayan aparecido o hablado, eso no se me olvida.
Nos vemos.
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• "¿Quién Eres?" FNAF SB y Tú
Fanfiction-[¡SUJETO A CAMBIOS!]- Has trabajado para Fazbear's durante algunos años, tu estancia había estado bien hasta este día. Todo parecía irreal, un mundo completamente falso. Pero ni siquiera estabas seguro de ello. ¿Qué se supone que hacías aquí? De to...