Capitulo 23

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Después de unos segundos, a todos los presentes (excepto al guardia) los alertó una pequeña notificación.

Debian de irse a una pequeña revisión que siempre había después de cada concierto, lo que provocó ciertos disgustos para algunos.

La verdad les daban mucha, pero mucha atención y mantenimiento con cada cosa que hacían, debian de estar "perfectos" en cada momento por ante cualquier situación de un día común.

Era estresante para algunos, aunque para otros ya era la clásica y misma rutina.

Cada uno de ellos se fue alejando sin haber pasado tanto tiempo después del ruidito, también les eran de exigencia que atendieran pronto al llamado lo más antes posible.

No tardaron en vaciar la habitación, el, por decir; último en abandonarla fue chica, ella quería seguir junto a ese nuevo guardia, pero lamentablemente debía de irse.

Solo le dedicó una última sonrisa antes de levantarse e irse, dejándolo atrás al igual que su gran amigo y líder anaranjado.

Quien éste ahora se acercó con poca cautela al guardia, ambas miradas se encontraron en medio de esa casi corta cercanía. Una reflejaba miedo, el otro preocupación. La figura alta se bajó al nivel de la otra, quedando casi a la par de su altura.

Por favor, quiero que te quedes aquí y no intentes salir, no es por prohibirle su libertad, solo quiero asegurarme de que te encuentres a salvo. Normalmente nunca revisan está área, pero si pasa algo aún puedes salir por la puerta del fondo.

Casi por inercia o miedo el guardia asintió levemente, aún temiendo de que algo pueda pasar en medio de esa habla.

No sabía que podría pasar si desobedecia, era la primera vez que escuchaba, creo.

La figura se levantó y al ir hacia la puerta principal de la habitación se detuvo, volteando a ver al guardia dedicó una última mirada preocupada.

Por favor, cuídate.

Y después se fue, cruzando por la puerta la cual se cerró justo después de que saliera.

La habitación quedó en silencio, con el único hombre ahí, solo.

Pero después de todo eso, no pudo procesarlo o entenderlo muy bien. Su cabeza no estaba tan bien en ese momento, solo podía sentir y escuchar. Su cuerpo estaba ahí, pero no su espíritu. (Por así decirlo)

Sintió como el miedo volvía a si mismo, picandole un poco las manos y las piernas, estaba seguro que casi ni había respirado, pero aún seguía vivo de alguna manera.

Su cuerpo se deslizó usando como apoyo la pared en la cuál aún seguía pegado, llegando hasta el suelo solo pudo abrazarse a si mismo y tratar de hacerme menos con tal de liberarse del picor que aún permanecía en ambas extremidades, cerrando los ojos en el proceso.

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Y duró así por un tiempo, por varios minutos.

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Hasta que de pronto un ruido escuchó, sus ojos se abrieron de golpe, mirando rápido hacia la fuente del ruido. Solo sabía que venía detrás de la puerta principal.

Con el mismo miedo se levantó, evitando hacer algún mínimo ruido por si acaso, de hecho la habitación había quedado nuevamente silenciosa después de eso.

El cual lo volvía inquietante.

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Otra vez, ese mismo ruido.

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Rápido, busco la puerta del fondo que había escuchado, pero no había nada.

Solo sintió el miedo crecer dentro de él.

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¡Otra vez!
Ese ruido, otra vez.
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Trató de correr hacia algún escondite o algo, no había otra manera de salir y no quería enfrentarse ante esa cosa extraña.

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Pero entonces el ruido termino en un fuerte golpe al metal de la puerta, logrando derribarla provocando mucho más ruido fuerte.

Logrando asustarlo, alterarlo y sobre todo exponerlo.

Ahora estaba expuesto, expuesto ante la cosa que osaba por ir a por él.

Cosa extraña que ni él mismo podía saber que cosa era.

Pero solo vió algo ahí, en la puerta. Era oscura, grande, y un poco diferente a lo que había visto.

Era... ¿un animal? ¿un animatrónico? No había idea alguna, pero era una sombra, borrosa, alta, y parecía como si ahora si tuviera característica animalistica.

La cosa extraña corrió, directo hacia él. Pero su velocidad fue tan rápida y extraña, solo sintió como su cuerpo se sentía mucho más extraño. La oscuridad se lo llevó.

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Y hasta entonces, despertó.

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Miro a su alrededor desde donde se encontraba aún, seguía en la habitación. Se levantó con cuidado, temiendo de hacer algún ruido o algo. Al hacerlo volvió a mirar alrededor, no había nada.

Todo seguía igual.

Hasta que de pronto la puerta principal se abrió, solo para revelar al mismo líder de la banda.

Quien esté solo miró al guardia confundido, quizás no esperaba que siguiera en el mismo sitio donde la última vez lo había dejado.

De hecho ni se había movido de ahí, solo que ahora parecía algo inquieto.

Se acercó, preguntando sobre que pasaba.

Pero no hubo respuesta, solo su mirada asustada como si hubiera vivido algo terrorífico hace solo unos segundos.

Preocupado, asustado, angustiado.

Lo veía de tantas formas negativas, consiguiendo que siguiera preguntando sobre lo que ocurría.

Solo hasta que llegó junto a él, hizo algo el cual sabia perfectamente que se arrepentiría después.

Se agachó hasta casi estar a su altura, solo para evitar causar más intimidación como sabía que daba. Enseguida, en un movimiento medianamente rápido, solo por evitar que su objetivo termine en fracaso; elevó sus brazos hasta los hombros del guardia, y trayendolo hacia él, terminó por darle un firme y protector abrazo.

Lamentando internamente el mal que estaba provocando.

Pero solo con el inocente deseo de ayudarlo a sentirse mejor.

._._._.
No c, muy largo no?

Cómo lo que ella dijo- NoEsCiertoperd0n

Perdonen la espera :c

Bueno, nos vemos

• "¿Quién Eres?" FNAF SB y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora