Cerró sus ojos, cuestionandose sobre que hacer ahora. La situación era difícil ahora, tenía miedo, bastante miedo como para siquiera hablar.
No podía articular palabras, ni siquiera lo intentaría de todas formas. Él estaba aquí, y por su cabeza ya habían pasado las mil y un cosas que pasarán a continuación, si aún no estaba muerto solo era porque primero era el sufrimiento antes que la muerte.
En cuanto abrió sus ojos vió que estaba a poco de tocarlo, retrocedió aunque no fuera mucho, pegándose más a la pared. Preocupado por lo que "pasaría" ahora, se puso más nervioso aunque ya lo supiera.
En cambio, el animatronico había pensado las mil y un soluciones que podrían existir ante esto, no respondía preguntas, se alejaba cada vez que se acercaba para ayudarlo, y ni siquiera quería mirarlo. Quizás... ¿Un abrazo? ¡Eso siempre ayuda!
Pero claro, fue rechazado antes de poder alcanzarlo, ya se lo imaginaba. Pero no le importaba, no le molestaba en absoluto. Todo lo contrario, le preocupaba bastante.
Realmente había cosas mucho más oscuras y terribles a través de esto. Las cuáles le serán completamente difíciles de encontrar por lo menos ahora. Pero en cuanto llegue el momento, ni siquiera podrá creerlo, ¿A qué si?
Rendido, se levantó y se alejó dejando gran espacio entre los dos. Aún permanecía en la habitación.
Lo cual provocó que el chico se tomara su tiempo para calmarse, aún le preocupaba que no se haya ido, pero por lo menos podía aceptar que se había apartado. Eso era lo que más necesitaba sinceramente.
Por otro lado el animatronico no dejaba de pensar, ¿Qué más podría hacer por ayudarlo? Todo era tan difícil, sin saber que esa pequeña acción que había hecho sirvió bastante. Pero aún así trataba de encontrar algo útil.
Aunque tenía algunas preguntas por hacer, le intrigaba obtener alguna respuesta, aunque fuera muy minima. Pero sobre todo estaba curioso por saber.
—Oficial [N], por favor necesito que me informe sobre lo que está pasando. Cómo había dicho no es normal este tipo de comportamiento, he notado una inmensa incomodidad cuando trató de acercarme para ayudarlo.
Al principio fue suave. Tenía razón de todas formas.
Su mirada volvió a dirigirse contra el guardia, quien éste un poco más calmado, imitó. El temor aún se conservaba en aquellos pares de ojos.
—Sé que fue mi error en primer lugar haber invadido su espacio sin respetar los limites y haber ignorado anteriormente su comportamiento, lo lamento demasiado... Pero ahora me importa bastante lo que le ocurre, puede llegar a ser algo molesto de mi parte tanta insistencia, lo sé, pero no podría simplemente ignorar lo que sucede.
Aquellos azulados y brillosos ojos simplemente rogaban porque obtuviera lo que solicitaba.
Sin embargo al no ser así, continuó hablando. Tratando de convencerlo.
¿Desde cuándo era tan insistente?
—Mi deber es ayudar y en todo caso proteger ante cualquier peligro que pueda encontrarse. No soy capaz de causar daños ni de querer empeorar las cosas por cuenta propia.
Sus manos se juntaron, en realidad mencionar eso último no fue mucho de su agrado.
Más tomando en cuenta el pequeño defecto que había en cada revisión que tenían que hacerle. Eso último no fue muy bueno para convencer, que grande.
—Por lo menos espero que pueda comprender mi verdadero propósito, todo está bien. Hay algo que le preocupa y lo sé, pero puedo asegurarle que ahora todo está bien. Está a salvo.
Una pequeña sonrisa se asomó, un poco nervioso aún por recordar esa última y anterior frase.
—Asi que no necesita seguir escondiéndose ni seguir evitandome, puede confiar en mí, estoy aquí para protegerlo si hay algo que lo está persiguiendo o si algo lo pone en peligro. Lo cuidaré y protegeré todo lo que sea necesario, ¡Lo prometo!
Finalizó con un tono determinado, estaba asegurando lo que nunca dejaría de hacer, una vez más.
Por el contrario, el guardia permanecía en silencio, simplemente observando aquel animatronico y procesando aquellas palabras. ¿Esto era real?
Su mirada viajaba entre toda la habitación, aún se reflejaba un poco el temor que guardaba.
Solo podía cuestionarse un montón de cosas, pero a ninguna les encontraba respuesta.
Ahora era él quien no sabía que hacer, todo lo que había dicho sonaba tan decidido. Con tantas esperanzas de cumplirse cueste lo que cueste.
Quizás, solo quizás era verdad lo que decía. ¿Pero que pasaría si confiaba y terminaba siendo como siempre era? ¿Que pasaría si terminaba con su objetivo ahora que aceptaba y se distraía de la verdadera situación?
¿Esto era real?
Pero... Otra parte no opinaba lo mismo. Quizás solo estaba viendo mal las cosas hasta llegar al extremo, talvez lo ha juzgado mal desde el comienzo.
Desde que había "llegado" no había ocurrido nada con él, quiero decir; no había dado pruebas de que buscara algo que pueda ponerlo en peligro, no había seguido con el objetivo que supuestamente estaba destinado a seguir.
¿De verdad estaba bien?
¿Estaba bien finalmente confiar?
No lo sabe realmente, su mente no dejaba de preocuparse. Pero quizás era bueno confiar un poco, por lo menos un poco.
Tal vez pueda ayudarlo más de lo que él mismo podía hacer.
._._._.
No lo sé, a veces siento que exagero la situación.Cómo aquí por ejemplo, en realidad siento que estoy exagerando mucho la parte "del peligro" y la desconfianza.
Pero bueno, hice lo que pude por al menos minimizarlo, ya que personalmente no me agrada del todo llegar a extremos como este caso.
Aún así, ¿Qué tal? ¿Ustedes que opinan?
Nos vemos ;)
ESTÁS LEYENDO
• "¿Quién Eres?" FNAF SB y Tú
Fanfiction-[¡SUJETO A CAMBIOS!]- Has trabajado para Fazbear's durante algunos años, tu estancia había estado bien hasta este día. Todo parecía irreal, un mundo completamente falso. Pero ni siquiera estabas seguro de ello. ¿Qué se supone que hacías aquí? De to...