Donde Los Cielos Se Tocan

capitulo 12

POV Lorie

Pensé que la semana de la muerte de Loui seria mas estresante pero solo me confundió mas. Dejaron a Razie estar en la casa luego de que otro policía encontrara a Loui, luego de eso llamaron a declarar a todos con los que Loui hablo por última vez pero no nos incluyeron a Jay y a mi por mi padre. Solo llamaban a Razie para hacerle preguntas luego de encontrar en la habitación de Loui aquella bolsa de drogas y los mensajes en su teléfono.

La parte confusa era que aun con las pruebas en mano no había un día en que una patrulla no estuviera en la casa de Razie. Siempre había un policía a su lado y no era de los que estaba allí para protegerla si no que esté en su mirada mostraba desconfianza. Casi como si supiera que ella lo mato. Un psicólogo le fue asignado y ella acepto solo para no levantar sospecha pero luego de la primera sesión le prohibieron salir del pueblo. Ella no hablaba con nosotros, no trataba de explicarnos cual era el problema y no podíamos insistir tanto ya que aquel policía no dejaba de seguirnos.

Lo bueno era que habían podido integrarla a clases de nuevo y por fin luego de una semana la tendríamos para nosotros sin interrupciones y miradas raras de aquel policía asignado o a protegerla o a vigilarla.

Papá no me decía nada, solo me sonreía y me repetía que haría lo que sea para que ella saliera ilesa de esto. Le había confesado mis sentimientos por ella y su respuesta fue que yo jamás me enamoraría de un monstruo. Ya odiaba la palabra y que en mi cabeza dudas se comenzaron a crear respeto a la chica de la que poco a poco me estaba enamorando perdidamente.

Jay y yo nos encontrábamos caminando a casa de Razie, eran las 7:32 de la mañana y nos detuvimos a pocos metros de Mike, el policía que vigilaba la casa de Razie como si esta de repente se fuera a incendiar de la nada. Bebía un café y al vernos solo desvió su mirada con evidente molestia.

-creí que ya no la vigilaría- se cruzo de brazos Jay.

-buenos días a ustedes también- contesto secamente- es mi última guardia, pero eso a ustedes no les interesa.

-nos interesa y mucho- respondió Jay- es nuestra amiga.

-si, si- asintió y nos miro a ambos- aun no se sabe nada de los traficantes pero si supuestamente Loui le debía dinero realmente deben quererlo de vuelta.

-pues se llevaron su vida, no creo que quieran mas.

-¿Cómo podrías saberlo?- pregunto mirándolo directamente a los ojos. Ni siquiera podría golpear su hombro para que cerrara la boca, el estaba atento a cada movimiento.

-lo buscan ¿no?- respondí- no puede ser tan idiota para venir aquí.

-quien sabe- se encogió de hombros- solo digo que debió haber un error. Conozco a Loui hace 20 años y aunque siempre fue un tipo reservado no tendría porque vender drogas. Excelente policía, excelente padre, excelente esposo…

-si es una lástima, el era un ángel- alabo Jay- que dios lo lleve a un excelente lugar donde lo merezca.- se persigno y miro al cielo- dale lo que merece, Dios, amen.- paso a un lado de mi y fue a la puerta tocando más de 5 veces seguidas. Mire a Mike y este solo me miraba con el ceño fruncido.

-¿Qué?- pregunte curiosa.

-¿desde cuándo eres su amiga? Loui solo hablaba del afeminado de Jonathan.

-desde que mi padre, el jefe Leo Gallaguer, tomó el puesto- dije con molestia- fue el quien nos prohibió al afeminando y a mi venir aquí para no interrumpir su guardia con Razie. –se que estaba sorprendido pero no lo expreso, solo guardo silencio.

-que conveniente- lo escuche susurrar pero decidí ignorarlo o realmente podría arruinarlo.

Al ver a Razie salir le di una última mirada a aquel policía quien miro a Razie frunciendo el ceño aún mas. Este solo intentaba respirar por lo apretada que iba con Jay abrazándola.