Capítulo 5: I Love You, Billie Eilish

612 39 9
                                    

La música que escuchaban estaba a un bajo volumen para llegar a escuchar si la otra hablaba, no se sentía un ambiente incómodo... Pero sí un tanto nostálgico.

Korra tenía pegados los ojos al camino, confiando ciegamente en manos y pies que ayudaban a dirigir el volante, la palanca de cambios y los pedales. La morena seguía pensando en lo que le diría al estar en esa playa y la posible manera en la que reaccionaría su pareja.

Asami tenía un poco de sueño pero no quería dormir, quería mantenerse despierta para lo que Korra quería mostrarle.

—Ven —le dijo Korra a Asami, bajándose del auto.

Asami ni siquiera vio o sintió en que momento llegaron al lugar destinado, se bajó con ayuda de la morena tratando de poner firmes los pies por el ligero dolor que le habían causado esos tacones. Levantó la vista y se quedó atónita cuando se percató de en dónde estaban.

—¿Por qué... Me trajiste aquí? —cuestionó Asami, llevando sus orbes verdes a los azules claros de Korra.

—Solo... Quiero que veas lo que sucedió poco después de que tu padre saliera —respondió Korra con una pequeña sonrisa, causándole nostalgia estar en ese lugar.

Llevó a la mujer de la mano por el amplio camino, recordando cada detalle que sucedió allí.

—Menos de cinco minutos duró el viaje de aquí... A éste lado —señaló donde finalizó el viaje, viéndose un camino alterno—... Uno de los autos de tu padre salió de aquél camino y nos chocó con mucha fuerza...

Siguió señalando, hasta caminar al acantilado y se quedó allí un momento, sintiendo su corazón latir con mucho más rapidez por el dolor que le causaban esos recuerdos, pero debía decirle todo a Asami.

Logró bajar con ella a la playa en el lugar en el que cayó el auto justo hace seis años, y se mantuvo de pie, mirando el suelo.

—Recuerdo... Que tú me empujaste hacia la puerta para tratar de cuidarme, el auto cayó desde esa altura... Y terminó justo aquí... Recuerdo haberme herido pero no tanto como para no poder moverme, tú no reaccionaste por lo que esa presión aumentó... Traté de sacarte con la ayuda de Kuvira... Pero los gorilas de tu padre ya estaban muy cerca y tu cuerpo se había quedado atrapado con el asiento del copiloto y eso nos impidió sacarte a tiempo...

Encontró una larga rama y la tomó, dibujó un camino entre la arena hasta llegar a las viejas cloacas, Asami seguía viendo el punto donde antes Korra se quedó simulando lo que pasó cuando cayeron, luego desvió su vista a la menor que nuevamente habló.

—Traté de halar tu brazo, Kuvira me lo impidió... Me arrastró hasta aquí y caímos en el interior de esto... Lo último que recuerdo fue que Kuvira me noqueó —dijo con cierto humor porque le causaba risa—... Y... Desperté en una habitación... Me preocupé demasiado cuando vi a Kuvira llena de heridas pero mi punto de quiebre fue el darme cuenta de lo que te hice por mi absurda idea —su voz se quebró en las últimas palabras que dijo, sus ojos se llenaron de lágrimas que desbordaron a los segundos con el dolor que le causaban esos recuerdos.

Asami se abrazó a sí misma, antes sentía un vacío total, ella pensaba que algo le faltaba y las palabras de Korra la ayudaron mucho, de sus ojos también caían lágrimas fluidamente.

—Di... Dime algo —susurró la castaña, con su labio tembloroso, tenía miedo de perder a Asami de nuevo. Pronto, vio a Asami caminar hacia ella pero lo hacía como si estuviera enojada, por lo que supuso que iba a golpearla por lo que le provocó.

Asami apretó sus manos en puño, Korra cerró los ojos con fuerza, esperando el impacto, pero no hubo nada de golpes... Sintió sus largos brazos abrazarla fuertemente, por lo que abrió los ojos para observarla, abrazándola de la misma manera, sus piernas fallaron y ambas cayeron a la arena, la alfa jadeo por lo sucedido, sin embargo, eso no la detuvo de seguirla abrazando.

  𝔻𝕖̀𝕛𝕒́ 𝕍𝕦 •𝕂𝕠𝕣𝕣𝕒𝕤𝕒𝕞𝕚•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora