¿𝘕𝘶𝘦𝘴𝘵𝘳𝘢 𝘷𝘪𝘥𝘢 𝘴𝘪𝘯 𝘴𝘢𝘭𝘶𝘥 𝘮𝘦𝘯𝘵𝘢𝘭? |𝐅𝐇.

Capítulo cuatro

-Adaliah Mckenzie-

-Es sobre nosotros -dijo él con el ceño fruncido- ¿Donde está la confianza de mellizos que nos teníamos?

-Vuelves con el mismo tema de mierda, ¿no entiendes? No hay nada que decir -hable rodando los ojos-

-Se que mientes -lo mire enojada, estaba cansada de esto-

El no tener a nuestros padres con nosotros creí que sería de lo mejor, no responsabilidades y hacer lo que quisiera, pero Spencer lo hacía ver como si ellos aún siguieran aquí

-¿Sabes que?, si, si miento, aunque no en todo. Cinco es mi mejor amigo, ¡solo eso! Pero, si consumo, ya no soy virgen, y si tienes la duda, si, deje de serlo con él -me levante- ¿contento? -subí las escaleras hacia mi habitación-

Estaba ebria

-¡Mckenzie, no hemos terminado! -me tomo del brazo nuevamente- escucha, estoy molesto -lo interrumpí-

-¿Oh enserio? ¡No me importa! -me ignoró y continuó-

-Pero mi molestia no es problema ahora, lo que si lo es, -suspiró- es que nuestros padres vendrán -término y me soltó-

Bendita suerte

-¿De que carajos estás hablando, Spencer? -pregunté viéndolo, se abaniqueo un poco-

-Apestas a alcohol -me tomo nuevamente del brazo y caminamos al baño- escucha, mamá llamó -tomo mi cepillo de dientes y le puso pasta-

-¿Para qué? -cuestioné. Spencer hizo que abriera la boca y comenzó a cepillarme-

-Lo mismo de cada mes, para saber cómo estábamos, tuve que decirle que dormías porque ella insistía en hablar contigo

-¿Desde cuando le importamos? -hable con dificultad por el cepillado-

-No lo sé, pero me dijo que tenían una sorpresa para nosotros, la sorpresa es que vendrán, mañana por la tarde estarán aquí -saco el cepillo y me enjuague- escucha Adaliah lo único que te quiero pedir, es que estés conmigo, todo el día, ellos estarán aquí y queremos que piensen que estamos bien, ¿de acuerdo?

-limpié mi cara y él lavo el cepillo- de acuerdo -me sonrió-

Era la peor noticia que me habían dado en la vida

-Vamos a dormir, y ni creas que la conversación termino así, tienes que aclararme toda esa mierda que te atreviste a hacer con ese maldito drogadicto -habló enojado y se fue a su habitación-

Camine a mi habitación, y cerré la puerta con llave. Me quite la camisa y el pantalón para colocarme una playera que cubriera hasta mis muslos

Me aventé a la cama viendo el techo, el cual tenía rayado con frases y palabras que Cinco y yo habíamos escrito por aburrimiento. Pensaba en mañana, sería el peor día de mi vida, era obvio

Me acosté de lado para conciliar el sueño mientras abrazaba una almohada, imaginando que era el amor de mi vida, que aún no llegaba

Según decía

(......)

Spencer me despertó para ir a la preparatoria. De mala manera me levante y me di un baño para despertar. Al salir de este, me puse una camisa blanca con 2 botones al aire y coloqué una corbata negra algo floja, un short negro de vestir hasta las rodillas y unos zapatos negros.

Comencé a buscar con la mirada.

-¿Donde carajos está mi teléfono? -me pregunté y empecé a buscar por toda la habitación-