Capítulo 3

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Venía aferrado al brazo de su maestro, o así había aprendido que tenía que llamarlo. Caminaban entre muchas miradas, todas clavadas en él. Estaba asustado, nervioso hasta un poco ansioso.

Ya habían pasado algunos días desde que era... bueno "eso". Aún no podía decirlo, le era extraño. Y ahora sería presentado a los jefes del clan y a otros tantos que estaban reunidos en esa discoteca. Todos se detuvieron al verlos entrar, pero la música y las luces continuaron. Según pudo notar habían humanos, pero estos estaban como drogrados, seguramente estaban bajo el efecto de la Dominación que era la habilidad de hipnotizar que tenían ellos, ahora también él y seguramente estos humanos poseídos era en realidad el festín. El olor a sangre inundó su nariz, cerró los ojos y apretó fuerte el brazo de su maestro, este le palmeó la mano como gesto de que le ayudaría a controlarse.

Se dejó llevar hasta el segundo piso de la discoteque, así que en la pista el baile y la perversión se reanudaron.

⁃ Huelo tu miedo - le susurro su maestro al oído.

⁃ Tengo miedo - replicó Jinwoo también cerca del oído de su maestro, pero mirando a todos quienes le rodeaban.

⁃ Mientras estés conmigo, nadie se atreverá a tocarte - y lo besó en los labios como siempre lo hacía, pero esta vez más intenso de lo normal, al tiempo que mostraba su katana que llevaba bajo la gabardina. Varios alrededor entendieron el mensaje, nadie debía ni siquiera mirar a su creación, si no morirían decapitados.

Se acercaron a un sillón semicircular donde tres hombres y con trajes tipo años 20' estaban sentados. En ese lugar, la música bajaba su intensidad. A Jinwoo le fueron presentados como los jefes del clan. Hizo una venia algo torpe en forma de saludo, Eunwoo no se movió.

⁃ Es muy atractivo tu chiquillo, Eunwoo - sonrío lascivamente el viejo del medio.

⁃ Ahora que por fin lo conozco entiendo tu obsesión con él - habló el de la derecha pasándose la lengua por los labios, mirándolo de arriba a abajo. Jinwoo miró temeroso a su maestro, éste no movió ningún músculo de la cara. Permanecía inmutable ante los comentarios y gestos. Sabía que eran para provocarlo.

⁃ Tan serio mi querido Nunu - dijó el tercer hombre, el más joven de los tres, que se había levantado y acercado hasta Eunwoo. Apoyó una mano en el pecho del alto y lo apartó a un lado para posicionarse frente a Jinwoo - bienvenido hermoso, soy Jun, jefe de clan - y acto seguido tomó una mano de Jinwoo y le besó el dorso.

⁃ Soy... soy Jinwoo - respondió algo tartamudo.

⁃ Aaaayyy - gritó Jun enternecido - es adorable - y le apretó los cachetes a un descolocado Jinwoo.

De repente llegaron dos chicos altos arrastrando a un tercero que gritaba que no lo mataran y que era inocente, lo dejaron caer de rodillas a los pies de Jun. Eunwoo con un brazo apartó a Jinwoo y lo puso tras él.

⁃ Buen trabajo, Bin y Sanha - habló el viejo que estaba sentado al medio.

Jun tomó de los cabellos del hombre recién traído y echó su cabeza hacia atrás. Éste gritó de dolor por el gesto, la cara de Jun ahora era todo menos tierna que como lo fue hace un rato. Jinwoo sintió miedo.

⁃ Así que tú fuiste el soplón - sentenció Jun.

⁃ NO, NO SEÑOR, NUNCA LOS TRAICIONE - lloraba con desesperación el hombre.

⁃ Mírame a los ojos - le amenazó Jun.

⁃ NO, NO, SEÑOR, POR FAVOR, NO. CRÉAME YO NO LOS TRAICIONE.

Sangre - JINCHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora