Capítulo 5

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Advertencia: este capítulo contiene violencia Psicológica, se recomienda discreción.

Charlie se encontraba con los condes, mirando cada una de los salones, los ojos de la condesa se encontraban fascinados por lo que veia, aún así supo disimularlo, pues era algo que nunca antes había visto, pero aún así, no dejaba de maquinar su plan, cuando miraba a Charlie, miraba a una niña con suerte, pero de seguro sin las herramientas adecuadas para sobrevivir en la sociedad, en esta sociedad, si no estás a la moda, eres humillado, si no posees buenos modales, serás marginada si no tienes conocimiento, serás tratada como una ignorante, es una lucha constante, siempre a la moda, siempre elegante y siempre estar al tanto de las noticias, cuando llegaron a un cuarto repleto de pinturas, la condesa decidió actuar:

- Valla, está mansión es hermosa, sin embargo señorita, si no es muy descarado de mi parte, le recomiendo, un estilo Victoriano, ya sabe cómo el palacio de Versalles, en Francia, oh, cuando lo vimos, nos maravillo, ¿No lo crees querido?- dijo la condesa, esperaba que su esposo entendiera lo que le quería decir, a pesar de nunca haber ido a Francia, estaba segura de que la duquesa no comprendía nada de la arquitectura, por lo tanto es fácil engañarla.

- Si querida, fue muy hermosa, sin duda alguna a la duquesa le encantará, es un estilo muy hermoso, sus bellos arcos ojival y elevadas bodegas de crucería, si simplemente hermoso- dijo el conde, siguiéndole el juego a su esposa y recordando los pocos conceptos que recordaba de haber leído en libros, sin duda laguna, ellos pensaban de Charlie no tenía ninguna idea de lo hablan.

- ¡Oh Dios mío!, Me disculpo duquesa seguramente usted no sabe, de lo que estamos hablando- dijo la condesa, mientras se cubría su sonrisa con su abanico, Charlie con una sonrisa dijo:

- No se preocupen, solo que tengo que decirles algo y espero que no les moleste- dijo, mientras los condes la miraban con interrogación, Charlie sonrió- Condesa, creo que se ha equivocado, el palacio de Versalles, posee un estilo arquitectónico Barroco francés o también conocida como Clasismo francés, el estilo que usted dice se comenzó a utilizar a mediados del siglo XIX y el estilo Barroco Francés, fue utilizado en el siglo XVII  y floreció gracias a los reinados de Luis XIII, Luis XIV y Luis XV- dijo mirando a la condesa, ella se encontraba apretando su abanico, se dirigío al conde- y Conde, el estilo que usted decía, tampoco era victoriano, es estilo gótico y estaba describiendo la Catedral de nuestra señora de París, la cual es muy famoso por su estilo gótico y si también se encuentra en Francia- dijo con una sonrisa, los condes se encuentran enojados, como es posible que ninguno de sus planes, les funcionará hoy, pero aún así no se dan por vencidos.

- Y ¿Como es que usted lo sabe, duquesa?- dijo el conde, Charlie les sonrió y con una señal les pidió que la siguieran.

- Es fácil, el cuarto en el que estamos tiene varios retratos y bueno, aquí se encuentra el palacio de Versalles, como pueden ver en la descripción está su tipo de arquitectura y varios detalles más y como pueden ver los demás retratos, también incluyen el estilo de arquitectura y varios otros detalles más, así es que aprendí de arquitectura, por favor mirenlos- dijo Charlie, los condes miraron y su enojo y vergüenza creció, como pudieron equivocarse, decidieron no intentar nada más y seguir mirando los cuadros, había, desde paisajes con datos históricos, a simples retratos de personas, se concentraron mas en esos retratos, hasta que uno de ellos, se empezaron a ver manchas rojas y estás crecían más y más, los condes acercaron su mano, intentando tocar, pero este explotó en la mano del, conde, el conde se enojó, quiso quitar la mancha con su pañuelo, ollo el grito de su esposa, asuntandolo, se dirigió a ella y le pregunto que le pasaba, pero la condesa solo pudo señalar al frente, el conde lo hizo y se dio cuenta, que del cuadro, salía un líquido rojo, que al principio pensó que era pintura, pero al ver de cerca en realidad, era sangre, voltearon a los demás cuadros y todos, de ellos salia un montón de sangre, ambos miraban por las direcciones, pero no encontraron la salida ni a la duquesa, parece que solo el color rojo, era el que reinaba, pronto el cuarto se empezó a llenar y los condes se encontraban cada vez más desesperados.

- Es tu culpa, tú eras el que quiera venir aquí, tú y tu maldita codicia ahora nos condena- grita la condesa, era lo único que podía hacer.

- Callate, que bien me seguiste el juego ¿No?, Tú también querías dinero, para dejar en ridícula a esa amiga tuya- dijo el conde, ambos se encontraban echándose la culpa de todo, mientras el cuarto seguía llenándose de sangre poco a poco, hasta que finalmente, los cubrió completamente, ambos se encontraban sumergidos en sangre, esperando que la respiración se agotará, perdiendo así ambos la vida.

- Condes, condes, condes- dijo una voz, los condes despertaron miraron, todo el lugar el cual se encontraba normal, para luego dirigirse a donde escuchaban la voz, la cual era de la duquesa, que los miraba preocupados- se encuentran bien, les llevo un rato habladoles y ustedes estaban como idos- dijo Charlie, los condes aún se encontraban confundidos, que era eso que miraron, era solo su imaginación o algo más, aún así, conservando la poca dignidad que tenían, dijeron:

- No se preocupe, tanto mi esposa como yo estamos bien- dijo el conde, recobrando la cordura y sujetando el brazo de su esposa, la cual aún se encontraba temblando, al igual que el.

- Si duquesa, no se preocupe, es que creo que nos concentramos mucho, en esta pintura y no la escuchamos, espero que nos disculpe- dijo la condesa, recuperandose a medias del susto que pasaron, Charlie los miro y sonrió:

- Me alegra que estén, bien, entonces ¿podemos seguir con el recorrido?- pregunto Charlie, los condes se miraron y asistieron- perfecto, síganme por favor.

Los condes, siguieron a Charlie, inmediatamente, agradecidos de poder salir de ese cuarto, ninguno de los 2 se dio cuenta de la sonrisa maligna de Charlie ni de sus ojos rojos.

- ¿Como le irá a Alastor con los niños?- fue el pensamiento de Charlie, mientras le seguía enseñando la casa a los condes.

Nota: Wow, estás historias, hasta estudiar arquitectura lo ponen a uno, no es broma, pero bueno la información de arquitectura en este capítulo cortesía de san Google, espero que les guste.

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