Mi Demonio Charlastor

Capítulo 15

Ajax, se encontraba hipnotizado por la belleza de Charlie, su pelo brillante cual rayos de sol, su piel blanquecina, sus grandes ojos y sus labios. reaccionó de inmediato y mejor bebió un poco de Champagne, no podía pensar de esa manera, ella era una dama, sonrió tristemente, siempre que piensa en un noble, solo se le viene a la mente, la imagen de su padre.

El, es un hijo ilegítimo de un noble, su madre, era una sirvienta pero tenía una gran belleza, su padre como buen mujeriego no perdía el tiempo, tiempo después su madre se embaraza y el solo la corrió como si nada a pesar de eso, su madre lo amo mucho y siempre le dio todo lo que pudo, cuando tenía 13 años, el volvió con sus hombres, parece que su esposa no le dio un hijo varón y fue cuando se acordó de mí, mi madre no quiso que me llevará y uno de sus hombres la mato, en mi interior sentí irá y no recuerdo nada después de eso cuando volví en si, el estaba llorando y rogando por su vida le había cortado las piernas, para finalmente cortarle la cabeza, al ver que todos están muertos, corre a la casa y toma el cuerpo de su madre, para finalmente dar un grito de dolor, uno que bien se podía confundir con el de una bestia, al desahogarse, entierra a su madre y prende en fuego su casa, pasado un tiempo se inscribe para ser un caballero, destacando por sobre todos por su fuerza y agilidad con la espada y finalmente es reconocido como un héroe, para finalmente conocerle el título de barón, algo que no le agradaba, aunque sea le hubiera gustado, tener a su madre a su lado.

- hermano te encuentras bien- dijo una joven, de cabello albino, hermoso ojos azules y facciones delicadas.

- Si, me encuentro bien, no te preocupes Claudia- dijo acariciando la cabeza  de su hermana, ella la única hija del hombre que ayudó en su concepción, a pesar de saber su origen y que el haya sido quién acabará con la vida de su progenitor, ella lo acepto y nunca lo ha mirado de menos.

- Veo,  que te ha gustado la duquesa Magne no partas la mirada de ella- dijo, con un brillo en los ojos, que resalta alegría pero también es señal de alguna travesura.

- La miraba bailar, creo que lo hace bien- dijo Ajax, mientras se tomaba el champagne  e intentaba ocultar su sonrojo, cosa que no lo logro y Claudia solo reía.

- Tal vez deberíamos conocerlos, acompañame hermano- dice Claudia, tomando el brazo de su hermano, mientras lo llevaba directo con Charlie, la cual había terminado de bailar con Alastor y se encontraban actualmente comiendo unos bocadillos.

- Mucho gusto en conocerla duquesa Magne , mi nombre es Claudia Dufour, encantada de conocerla- dijo realizando una reverencia.

- Igualmente encantada de conocerla, Duquesa Charlotte Magne, aunque creo que ya lo sabía- dijo Charlie, para luego reírse, Claudia también se ríe entiendo su broma- y el es mi pupilo Alastor- dijo, mientras apuntaba hacia Alastor.

- Encantado en conocerla señorita- dijo dando una reverencia, mientras que Claudia, también respondía con una reverencia.

- Encantada igualmente y el es mi hermano en Barón Ajax Chamberlain- dijo apuntando a su hermano, el cual hizo una reverencia.

- Encanto- dijo con simpleza, su hermana le dio un codazo disimulado- en conocerla Duquesa y joven- volvió a decir, esta vez su hermano sonrió.

- Encantada, me alegro conocer en persona al héroe del que todos hablan- dijo Charlie.

-Me halagan demasiado solo cumplo con mi deber- dijo Ajax serio.

- No muchos se atreven, es normal los halagos- dijo Charlie, Alastor no apartaba su mirada de ella y nuevamente su paciencia estaba por llegar a su límite.

- Si, eso sí, pero aún así el mérito es de todos no solo mío- dijo Ajax, quién se encontraba incómodo con la conversación, con la mirada pidió ayuda a su hermana, la cual no dudo ni un instante.

- Bueno, fue un placer hablar con usted, pero mi hermano me prometió un baile y aún no lo ha cumplido- dijo Claudia, la cual ya sostenía el brozo de su hermano.

- Si, lo siento por eso hermana, espero me disculpé Duquesa, joven- dijo haciendo una reverencia y caminando hacia la pista de baile.

- Ya puedes tranquilizarte Alastor ya se fueron- dijo Charlie, una vez estando sola con Alastor.

- Veo que lo notaste- dijo Alastor, mientras se relajaba.

- Creo que deberíamos salir, aquí hay mucha gente- dijo Charlie, Alastor le ofreció el brazo, el cual fue bien aceptado y ambos se dirigieron al jardín.

- Un poco de aire fresco- dijo Charlie mientras se sentaba en una banca, con su mano indico a Alastor que se sentará, junto a ella, el lo hizo en seguida- Alastor, se que te molesto que hablara con Baxter, pero solo era por un secreto que esconde el conde y bueno creo que es algo que podíamos utilizar- dijo Charlie, sacando su lado demoniaco, Alastor sonrió, ya sabía de a cual secreto se refería, pero en realidad lo que le molesta es que cualquier hombre se acerque a Charlie.

- ¿En qué nos puede ayudar?- pregunta Alastor.

- Tal vez, para nuestra próxima diversión- dijo Charlie, Alastor sonrió diabólicamente, Charlie nunca se equivoca en su diversión.

- Ya lo creo mu dear, pero que hay de nuestro amigo el héroe- dijo Alastor, también quería saber, si ese héroe, podría llegar a interesarle a Charlie.

- Mmmm, si tiene secretos, pero no son de los que me interese, también cuando combatía con los monstruos, lo hacía para salvar personas, pero no había nada de ambición o intereses además de eso y ahorita pude notar que no estaba feliz con su título, me parece muy Ángel no tendría diversión con el- dijo Charlie, esa palabras alegraron el corazón de Alastor, uno solo era una herramienta para su diversión y el otro no era nada para ella.

- Me alegra entonces de no ser un ángel, my dear- dijo mientras acercaba su cara hacia la de Charlie, haciendo a Charlie ruborizarse.

- Así, que no te pongas celoso, tu siempre eres el primero lo sabes- dijo Charlie mientras le acariciaba la cabeza como cuando era pequeño, Alastor tomo su mano y la sostuvo contra sus labios, no era la primera vez que lo hacía, pero esta vez, Charlie noto algo diferente en su mirada, por primera vez, Charlie pudo ver al hombre y no al niño.

- Ya no soy un niño muy dear- dijo Alastor, lo que él no sabía es que Charlie se acaba de dar cuenta de eso.