Capítulo 9

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Nota: Advertencia el siguiente capítulo contiene escenas de violencia se recomienda discreción.

Mientras tanto, Charlie se encontraba con las demás, damas nobles, a su lado se sentó la condesa Bethesa y al otro su hija Helsa, quedando ella en medio, todas se encontraban elegantemente vestidas, con bellos diseños, pero el suyo resaltaba más, gracias a Rosie, ella es única, cuando hablamos de moda, todas ellas, se encontraban hablando de varios chismes, de sus esposos, de los apuesto que eran los caballeros, Charlie se tuvo que tomar de su taza de té, sin duda, esto era demasiado aburrido para ella, aunque si había algo que le divertía, el volver a ver a aquella mujer, que sin duda quería despojarla de su casa, al ver que la miraba, ella intentaba mantenerse serena, pero el temblor en sus manos era muy evidente, parece que aún recordaba, todo lo que pasó en su casa, su hija Claire, se sentó a la par de Helsa y empezaron a hablar, a pesar de solo hablar para ellas, gracias al buen oído de Charlie, escuchaba todo la conversación.

- Oye, Helsa, ¿ya eres muy cercana a la duquesa?- dijo Claire, después de saludarla.

-Mi madre se presentó ante ella, ya sabes, como mi hermano es soltero y ya sabes, querrá juntarlos- dijo Helsa, mientras sonreía con inocencia, una inocencia que escondía la ambición al poder y dinero.

- Si, eso veo, tu madre no pierde el tiempo, pero parece que la duquesa no está interesada en el tema- dijo Claire, mientras tomaba un poco de te, mirando a la duquesa, la cual le devolvió la miraba y le sonrio, pero esto puso a temblar a Claire, pero intento parecer firme.

- Si así es ella, espero que este plan, le salga bien, si no, es un martirio soportarla- dijo soltando un suspiro.

- Por cierto, ¿Has visto los nuevos modelos de joyas? hace poco, descubrieron una mina de diamantes rosas y bueno, esto se han convertido en un éxito- dijo Claire, toda animada, pronto la conversación giró, a las nuevas tendencias y a la moda, de nuevo Charlie, estaba aburrida, por fortuna solo faltaba poco para iniciar el verdadero espectáculo.

- Duquesa, su vestido es sin duda hermoso, ¿Donde lo consiguió?- dijo una de las damas, Charlie la miro, Era la primera princesa, desde un rato, sentía su miraba sobre ella, una fría, llena de envidia y dispuesta a todo por humillarla, una delicia en cuanto a pecados se refiere, a pesar de ocultarlo tras esa máscara de bondad, Charlie noto el olor a sangre que bañaba sus manos al igual, que los gritos de las víctimas, sonrió:

- Me alegra que le guste, su alteza, es un diseño personalizado, la Señorita Rosie fue la que lo diseño, dijo que cuando me vio, pensó en este estilo y que sólo sería exclusivo para mí, porque está inspirado en mi- dijo Charlie, manteniendo siempre el protocolo real, la princesa sonrió, pero por la forma que apretaba su abanico, no se encontraba feliz, ¿Por que ella, está llamando la atención?,¿Debería ser yo, quien la llamé?, ¿No hay nadie más hermosa que yo?, Pensaba la princesa, al ser una extranjera, pensaba que Charlie no tenía idea del protocolo real, pero lo hizo a la perfección.

- Oh, es una lastima, me hubiera gustado uno igual para mi- dijo la princesa, intentando aligerar el ambiente.

- Bueno, estoy segura, de que si manda una doncella, Rosie la atenderá enseguida y le hará un vestido hermoso, sus diseños son únicos, ¿Como puede ver?- dijo Charlie, la princesa mantuvo su sonrisa, sin embargo el ambiente se sentía pesado, la princesa lo noto y para no perder su imagen, decidió cambiar de tema:

- Ese joven, que usted apadrinó, se mira que tiene buen porte y modales, ¿Le ha enseñado bien?- dijo la princesa.

- Si, el es muy inteligente y aprende rápido, hoy es su primera cacería, me preguntó ¿Que me traerá?- dijo Charlie, mientras sonreía cálidamente, el ambiente por ese lado se calmó, pero de la princesa, aún seguía turbio.

- Si, me imagino, si fuera solo un pobre niño, sin inteligencia, no lo traería aquí, es decir, ¿Quién traería a un ignorante aquí?- dijo la princesa, sin embargo lo que dijo, hice que el ambiente se vuelva pesado, quería ver a la duquesa, perder los estribos, pero Charlie mirándola con confusión dijo:

- Si, pero ese no sería entendimiento, por que no estamos en un baile real, por lo tanto, mientras el joven sepa usar una espada y una flecha, no hay problema, ya que en la cacería, solo importa el cazar, pero ¡que estoy diciendo!,estoy segura de que la princesa lo sabe- dijo Charlie, sonriendo dulcemente y con algo de inocencia, la princesa solo pude rechinar los dientes, ella quería humillarla y al final ella fue la humillada, estaba a punto de decir algo más, cuando empieza a temblar, todas se empezaron a sujetar a algo, mientras la princesa y sus damas, llamaban a los caballeros, después del temblor, todas estaban asustadas y salieron de la tienda, afuera los guardias, estaban luchando con monstruos, todas, se asustaron y empezaron a correr, ya no había risas, ya no había etiqueta, solo había desorden y descontrol, la princesa junto con sus damas y algunos guardia, corrían con desesperación al carruaje, pero antes de llegar, un monstruo atravesó el pecho a una de sus damas y el mismo, con una garra partió a la mitad, a su otra dama, los guardias lucharon, pero al final, terminaron muriendo, la princesa se encontraba inmóvil, sus ojos estaban llenos de lágrimas y pavor, sus rostro y ropa, se encontraban llenos de sangre y frente a ella tenía a ese monstruo, el cual se hizo a un lado, para darle el paso, a Charlie, pero ella se encontraba en su forma demoníaca,quién miraba a la princesa, como si fuera un gusano a quien aplastar.

- Si, hubieras estado callada, no tendrías que morir, pero bueno, uno muero por su boca¿No crees?- dijo Charlie, mientras con sus manos, aplastaba el cráneo que la princesa, el cuerpo de ella callo al suelo, Charlie giró donde estaban los demás monstruos- hay más comida, para ustedes, pero hay una persona, que no la maten, pero quiero que desee haber muerto, ¿Quieren saber su nombre?, Es Bethesa Von Eldritc-dijo Mientras sonría maligna mente y sus ojos rojos, brillaban, gracias al color de la sangre, Vaggie, miraba esperando sus órdenes- Vaggie, tú también diviértete, que nadie olvide, lo que pasó hoy- dijo mientras caminaba y los gritos de las personas, se convertían en su música de entrada.

Mi Demonio Charlastor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora