Capítulo 23

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Varios invitados llegaban, en lujosos carruajes, todos vestian elegantes pero majestuosos atuendos, el palacio imperial relucía y todos los invitados ya se encontraban reunidos platicando y bebiendo del más suculento y fino vino.

Charlie, se encontraba con Alastor, los dos se encontraban ya en la pista de baile, todos los contemplaban, las damas con suspiros y encantadas al ver el amor y la pasión que desprenden ellos, además de la gran química que tienen, los caballeros los miraban con envidia, una duquesa hermosa, joven y de buena familia, el premio que todos ellos esperaban, eran los pensamientos de algunos de ellos.

- No puede creer, tan hermosa dama estando con ese sucio mestizo- dijo uno de los jóvenes, heredero de unos marqueces, culla familia ha estado durante generaciones, siempren tenían, honor, dinero e inteligencia, el mejor partido para cualquier dama y esa duquesa prefiere a un sucio mestizo, antes que a él.

- No deberías elevar la voz, si la duquesa te oyera, dudo mucho que se quede con los brazos cruzadas- dijo su amigo, pues a pesar de que la duquesa, sea gentil y tenga esa imagen de Ángel, todos sabían lo ocurrido con un conde, que se atrevió a insultar a su prometido, por su linaje.

Flashblack

Todos se encontraban reunidos, en los jardines de la mansión de la duquesa Magne, celebrando el éxito del negocio de la duquesa.

- Me alegra que estén todos aquí, gracias a ustedes mi negocio a logrado el éxito- dijo Charlie, todos empezaron a aplaudir, Charlie pidió silencio- En serio se los agradezco mucho y espero que ustedes disfruten al igual que yo, ¡Salud a todos!- dijo ella, los demás la imitaron, levantando su copa de Champagne, la reunión era un éxito, todo el mundo hablaba, comía o bailaba, ella como siempre bailaba con Alastor, terminaba el baile y los dos se dirigieron a una mesa, miraban como Husk, bailaba con Ángel, esta vez Ángel portaba un hermoso vestido, largo, con escote barco, manga larga y de un color rosa, con detalles en negros y vino, se miraba hermosa si no lo conocieran, nadie diría que es un hombre, ver a Husk todo sonrojado, intentando no pisarle los pies, ero todo un espectáculo, todo era diversión hasta que:

- Disculpe duquesa, pero ¿Porque tiene a un mestizo a su lado?- pregunto uno de sus invitados, más en concreto un conde, quién no podía ocultar su repudio. Charlie lo miro tranquilamente y con una sonrisa le dijo:

- Por qué me agrada, ¿No tiene serca a las personas que le agreden conde?- pregunta Charlie, a pesar de mirarse calmada y en perfecto orden, por dentro estaba que eschaba fuego.

- Si, si las tengo duquesa, pero para eso existen clases duquesa y el "señor" no es de nuestra clase- dijo mirando con desprecio a Alastor, Charlie aún calmada dijo:

- Me alegra que piense eso conde, y ya que hablamos de clases, también tiene que ver con el prestigio y el dinero de la familia, ¿Sabe eso conde?- pregunta Charlie, el conde la mira sin comprender y asiente con la cabeza- entonces, ¿Cuando pagará el conde la alisadoras y onduladora, que ordenó para sus hijas?- pregunta Charlie, el conde se pone pálido y empieza a sudar, no creia que la duquesa lo espondria ante todos.

- N-no se de que habla, duquesa- dijo nervioso, Charlie cascheo los dedos y apareció Vaggie, con unos papeles en la mano.

- Estos son los documentos, que demuestran que usted pidió nuestros productos, pero no los pago en su totalidad, firmando un acuerdo en el que los pagaría más adelante- dijo mostrando los documentos, todos empezaron a murmurar sobre el conde, este apretó sus manos.

- NO TIENE, NINGUN DERECHO A ESPONERME DE ESTA FORMA DUQUESA- grito el conde, levantandose intentando intimidar a Charlie, ella solo se elvanto se acercó hacia el y a pesar, que Charlie sea más baja que el, todos se sintieron intimidados por el aura de Charlie.

- Lo Hiba a hacer en privado, sin embargo usted insulto a mi prometido Alastor y no me iba a quedar solo viendo como lo insultaba... - Charlie se cruzó de brazos- además, no sé si se fijó, pero el documento dice que cada vez que no entregue lo acordado, se le cobrará un impuesto y su fecha límite pasó, así que se le cobrarán 2000 monedas de oro más el valor acordado- dijo Charlie con una sonrisa, una sonrisa el cual el conde podría verla, como una sonrisa de muerte, todos los invitados quedaron asustados, la duquesa siempre se mostraba amable y risueña con los demás, el conocer esta faceta los sorprendió, no pensaban que podía ser tan intimidante- pero por esta vez, le perdonaré esas 2000 monedas de oro, solo si le ofrece una disculpa a Alastor- culminó Charlie.

-...- el conde, solo apretaba los manos, su rostro estaba rojo de la ira y de la vergüenza que sentía.

- Entonces o la disculpa o el pago, ¿Cual decide conde?- dijo Charlie de ultimátum.

El conde hizo una reverencia a Alastor y dijo:

- Me disculpo con usted joven, espero me perdone- Alastor lo miro y cuando vio que su sudor se intensificaba,sonrió y le dijo:

- No se preocupe caballero- el dejo la reverencia y se fue a una mesa, Charlie pidió a los músicas volver a tocar y la fiesta rápido se reanudó, pero nadie olvidaría lo intimidante que puede ser la duquesa.

Fin flashblack

- Callate idiota, a mi ninguna mujer me va a hacer quedar en ridículo, ese conde no era nada y en cambio yo soy más fuerte que el y ella no podrá tocarme- seguía diciendo el joven, cada vez hablaba más y más alto, tal parece que ya estaba borracho, pero a su amigo se le hizo extraño, pues solo había bebido 2 copas de vino, pero sin duda, el no actuaría de esa forma tan vergonzosa si no estuviera ebrio- además sabes que nuestra familia es inmune a los monstruos, eso se debe a que siempre hemos estado con ellos, nuestro antepasado hizo un pacto y gracias a eso, poseemos tanto inteligencia como fuerza, además que también tenemos muchos monstruos a nuestra disposición- sin duda esta información no pasó desapercibida, todos la escuchamos, a pesar de que el padre del joven, intento callarlo no pude y todo fue revelado, el rey los miro enojado y ordenó:

- Guardias ensieren tanto al Márquez como a su hijo, luego investigaremos el marquesado- los guardianas obedecieron de inmediato, nadie se fijó en una sombra que se deslizaba por el suelo, desde el joven hasta donde estaban Alastor y Charlie.

- Muchas gracias Al, la verdad ya no lo soportaba- dijo Charlie, ella estaba molesta por las idioteces que salían de la boca del marqués.

- No hay de que my dear- dijo Alastor besando su mano.

- Ahora que tengo su atención me gustaría decir algo- dijo el rey, todos le prestaron atención- el día de hoy, es para anunciarles a todos, que los dioses bendijeron a la familia imperial, una de mis hijas, logra despertar como una santa- dijo mientras señalaba a la puerta y ella ingreso un joven hermosa de cabello castaño, quién camino hasta estar a un lado del rey- ella es mi hija Irene, la nueva santa del imperio- dijo, la princesa junto sus manos como si estuviera rezando y de ella salió una luz blanca y pura que lleno de calidez a todo el salón, los demás noble vitoriaron.

- Larga vida a al rey.
- Larga vida a la princesa.
- Larga vida a la santa.

Mi Demonio Charlastor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora