Cuando seas mía. Tomar una decisión.

Catastrofe inminente.

Cuando llegamos con Turnner, Ryan y yo hablamos a la par.

-¡Eh!

Turnner se giró y una enorme sonrisa se formó en sus labios al vernos.

-¡Pero miren nada más! ¡Los gemelos G regresaron! -extendió los brazos a los costados -¡Tan increíbles como siempre! -nos felicitó. -Había olvidado lo bueno que eres para esto de las peleas. -me señaló.

Arrugué el gesto al oler el tabaco en su círculo de amigos. Detestaba eso. La humedad en el ambiente no ayudaba mucho que digamos.

<<¿Qué esperabas? Es un lugar de peleas y apuestas ilegales.>>

-Danos el collar. -dije extendiendo la mano.

-¿Collar? -se hizo el desentendido. -¿Cual collar?

-El que la puta de tu novia trae. -dijo Ryan señalándola con la cabeza y metiendo las manos a las bolsas de sus pantalones.

En otras circunstancias, habría golpeado a mi hermano por referirse así a una persona, y más mujer, pero en este lugar era normal que hablaran así.

Turnner nos miró molesto por unos microsegundos antes de volver a sonreír y llamar a su novia. La tomó de la cintura y la besuqueó frente a nosotros.

Desvié la mirada sintiéndome incómodo por ello.

-¿Hablan de su nueva adquisición de mi puta? -dijo sujetando el collar de plata de T/n.

La última cosa que le había dado Soledad en vida.

-Dámelo. -ordené.

Al no hacerme caso, Ryan empujó a Turnner extendiendo la mano para arrancarle la pieza a la chica, sin embargo le dieron un puñetazo en la mandíbula y uno de los amigos de Turnner desenfundó un arma apuntando a mi hermano.

Empujé a Ryan tomando su lugar.

-¡Vasta, vasta, vasta! -mis ojos se abrieron de más al ver que T/n le quitaba el cañón al arma con facilidad, tomó impulso y lo lanzó unos metros atrás.

<<¿Desde cuando sabe desarmar armas?>>

-Inteligente. -dijo Turnner acercándose a ella. -A mi no se me habría ocurrido.

Me puse en medio de ambos y lo empujé haciéndolo retroceder cuando quiso intimidarla. Aunque seamos honestos, nada intimidaba a T/n.

-Ya fue suficiente. Vámonos. -susurró tomando mi mano.

-No. -dijo Ryan.

-Es sólo un pedazo de metal. No vale sus vidas... -suplicó.

-De aquí no nos vamos sin el collar. -la miré.

-Ya era de esperarse. -miré a Turner con una sonrisa divertida.

Metió las manos a las bolsas de sus pantalones y caminó a nosotros de manera relajada.

-Los hermanos G compartiendo mujer como en los viejos tiempos. ¿Verdad?

Quise arrancarle la garganta al ver el impacto que aquellas palabras tuvieron en T/n. Su cuerpo se tensó y pude notar como tragaba con dificultad.

-Quédatelo... -intervino -Nosotros nos vamos...

Supe que estábamos en más problemas cuando nos remodelaron sus amigos.

<<Carajo...>>

Eso.

-Mira, Muñeca, el problema es que no pueden irse. No cuando han tratado de tocar a mi chica. -tiró de nuevo de su cintura pegándola a sus cuerpo. -No se pueden ir sin pagar.