CAPITULO 1

2 0 0
                                        

Ayona

A mis padres les encanta la idea de que estudie en una academia de mucho prestigio y de alta alcurnia, pero a mí solo me interesa que sea la mejor en arte.

Ha pasado un año desde que llegue, acá tengo dos mejores amigas Eleonor y Cass son muy diferentes, pero me hacen sentir como en casa con todas las peleas que tienen y sus inigualables reconciliaciones.

Hoy por la noche saldremos a celebrar nuestro primer año en la academia. He estado un poco triste por no poder ver a mi familia, pero al aceptar venir debía olvidarme de mi origen, de ellos.

Las chicas han tratado de animarme poniéndome vestido tras vestido para ver cual se me ve mejor, yo los veo todos iguales, aunque eso no se los he dicho porque no quiero que se sientan mal. También porque verlas explicándome la importancia del diseño y color de cada vestido me divierte, siempre se esfuerzan en alegrarme, así que ¿Por qué yo no podría hacer lo mismo por ellas escuchándolas y fingiendo que entiendo de lo que hablan?

Una hora después de habernos vestido, maquillado y estar más que listas, decidimos salir al campus a la fiesta de los de primero.

Dos horas bailando y bebiendo, con mi mente enfocada en aquel desconocido de ojos gris azulados que no ha dejado de verme durante todo este rato. Con un atisbo de valentía por el alcohol decido mantenerle la mirada, atrayente e inquietante, esas palabras me vienen a la mente al ver directo a sus hermosos ojos. Aun rodeado de personas que parece se mueren por llamar su atención, a él solo parece interesarle no perder nuestra batalla de miradas. Cuando rompe el contacto visual y se encamina hacia mí, solo puedo sentir como entro en pánico.

-Creo que nos conocemos- dijo, y utilizando las pocas neuronas sobrias que quedaban pensé ¿es enserio? utilizó la típica frase de "te conozco?". Solo por ese patético intento de conquista y porque siento que si sigo aquí terminare diciendo una ridiculez me dan ganas de decirle "NO" y cortar cualquier conversación. Pero eso no ocurre porque mi yo impulsivo decide aparecer (esa que nunca piensa antes de hablar) y sin querer ya le estaba respondiendo.

-No lo creo sino ya me hubiera acordado – fue la respuesta más estúpida que pude dar.

¿en serio querida mente? De todas las respuestas que existen escogiste esa para decirle.

-Aceptarías bailar conmigo? - dijo el misterioso chico esbozando una sonrisa.

-Acepto- dije sin pensarlo

Segura querida mente que aún estamos conectadas, porque hace un momento parecía que le gritaríamos que se largara y ahora aceptamos un baile.

Durante el baile solo podía culpar al alcohol por hacerme sentir tan bien junto a él y por querer que la música no parara nunca. Y entre tantas ideas locas que pasaban por mi mente en ese momento, apareció una que me bajo de la nube en la que estaba.

NO NECESITAMOS MAS DISTRACCIONES me recordé a mí misma. Rápidamente al terminar la música les avise a mis amigas que tenía que irme no podía estar un minuto más ahí, ya no toleraba su mirada.

Pasaron varias semanas desde la fiesta y rezo por no volver a verlo, no quiero herirlo, pero no puedo estar con alguien durante mi estadía en la academia. Me lo prometí, NO MAS DISTRACCIONES.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Aug 01, 2022 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

SERENDIPIAWhere stories live. Discover now