Capítulo 16: Las mujeres son aterradoras.

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Luego de escapar como un loco Feng Yuan logró llegar a duras penas a la ciudad de Wang en donde fue a la clínica de los padres de Lin Ming para tratar sus heridas, lo último que recuerda fue pedir que lo atendieran a la vez que dejaban caer una gran cantidad de monedas de oro para luego perder la consciencia. Para cuando despertó estaba en acostado en una cama desconocida con todo su cuerpo vendado y oliendo a medicina,

Feng Yuan simplemente se quedó ahí acostado mirando el techo mientras reflexionaba sobre su pelea anterior que hizo mal y como mejorar, su primer pelea contra otro ser humano fue bastante enriquecedora para el actual Feng Yuan, el luchar contra bestias sin inteligencia y luchar contra otros humanos era tan diferente pero a la vez tan similar.

Aunque había diferencias obvias entre ambos como que uno es cuadrúpedo y el otro es bípedo pero también hay varias similitudes, como el hecho de que ambos pierden el control de sus emociones bastante rápido y son provocados fácilmente. Pero también cabe decir que Feng Yuan cometió muchos errores durante su lucha contra los tres matones, tuvo varias oportunidades y varios métodos disponibles para conseguir la ventaja pero simplemente no las aprovecho.

Mientras estaba pensando todo esto la puerta de la habitación se abrió, la persona que entró no era otra que Lin Ming acompañada de sus padres adoptivos, los tres miraron a Feng Yuan con extrañeza, claramente llegó con heridas mortales junto al hecho que tenía una espada clavada en su cuerpo no sería menos decir que pudo haber muerto, también cabe decir que sus heridas no están ni siquiera cerradas así que en estos momentos debería estar sintiendo una gran dolor en todo su cuerpo.

Pero no es así, Feng Yuan se veía bastante cómodo ahí acostado como si sus cientos de cortes, huesos rotos y heridas internas no significaran nada para él. Feng Yuan simplemente los miró por un momento solo para luego volver a mirar el techo sin mostrar voluntad de siquiera saludarlos o agradecerles. Lin Ming vio a Feng Yuan y se acercó rápidamente con preocupación.

"Pequeño Feng, ¿Te duele algo?".

La pregunta venía desde el fondo del corazón de Lin Ming con su sincera preocupación, desde que vio el estado en que Feng Yuan se encontraba ella se la pasaba preocupada.

"No, ¿Me puedo ir?".

"..." Todos quedaron sin palabras ante tal respuesta.

"¿Entonces eso es un 'si'?".

"No, no es un si". Explico el padre adoptivo de Lin Ming mientras negaba con la cabeza. "Aunque no sientas dolor o incomodidad alguna en este momento eso no significa que estas totalmente curado, te tomara unas semanas en volver a tu mejor estado, en ese tiempo procura no sobre esforzarte o podrás reabrir tus heridas, las heridas externas serían un problema menor pero si fuera las internas... bueno, digamos que no sería algo bonito".

Luego de escuchar la explicación Feng Yuan comprendió mejor todo. "Les agradezco por su atención y cuidado, me iré para no causarle más inconvenientes". Con eso dicho Feng Yuan lucho por levantarse pero su cuerpo estaba demasiado débil, así que termino fracasando y cayendo de la cama.

"¡Pequeño Feng!". Lin Ming se sobresalto al verlo caer y fue rápidamente a ayudarlo a levantarse, pero lastimosamente su cuerpo era demasiado pequeño para el pesado Feng Yuan, así que también su padre la ayudo a levantarse y juntos lo volvieron a acostar en la cama.

"Pequeño Feng, por favor quédate quieto hasta que ter recuperes, no quiero verte en este estado, me lo prometes, ¿si?".

Lin Ming dijo eso mientras sus ojos se ponían llorosos, no podía soportar ver el cuerpo de Feng Yuan en un estado tan deplorable, y aunque Feng Yuan ya no posea los recuerdos del tiempo que pasaron juntos, ella los tiene y definitivamente no dejara a Feng Yuan irse. Feng Yuan se sorprendió por las palabras de Lin Ming, nunca le había prometido nada y nadie (según que el recuerde) y definitivamente este día no será la primera vez.

"Según recuerdo el hay un lugar llamado 'Comercio del Cielo Azul' en donde vende objetos de todo tipo, y si no mal me equivoco también venden píldoras de curación, aunque no se que tan efectivas sean aún será mucho más productivo que simplemente descansar".

Esas palabras se sintieron como un golpe en el corazón de Lin Ming. Hace unos días se empezó a correr el rumor que Feng Yuan poseía una pequeña fortuna que siempre llevaba consigo, luego vino el desastre y Feng Yuan entró en la clínica de sus padres ensangrentado con múltiples heridas tanto internas como externas y una espada clavada en su abdomen. Lin Ming sintió que su corazón sangraba cuando vio a Feng Yuan en tal estado y luego descubrió que unos matones intentaron robarle y por eso terminó en estado.

Por eso Lin Ming insistió tanto en que Feng Yuan descansara, para evitar encuentros similares con otras personas que creyeron en ese rumor, simplemente quería evitar que Feng Yuan saliera nuevamente lastimado.

"No creo que sea lo correcto". Esta vez no fue ni el padre ni Lin Ming la persona que habló sino la madre. "Pequeño Feng no sería correcto marcharte así como así, acabas de despertar y mi pequeña Ming estuvo realmente preocupada todo este tiempo por ti, ahora que despertaste ella quería crear nuevos recuerdos juntos ya que escucho que no recuerdas nada. Es por eso que creo que sería bueno que te quedes aquí acompañando a mi pequeña Ming, no serías tan antipático y abandonarla no más despiertas, ¿no es así?. Pero si insistes tanto en irte tampoco podemos detenerte.

Mi pequeña Ming es muy hermosa, ¿sabes?, muchos hombres de su edad quieren ligarla pero ninguno le había llamado la atención y empecé a preocupar que nunca se casara, pero luego comenzó a hablar de ti todo el tiempo y desearía que al menos la trates con amabilidad, pero si tienes a alguien ya entendería que mi pequeña Ming no te llamaría la atención pero según tengo entendido eres soltero, ¿No?, entonces si mi pequeña Ming no te llama para nada atención, no significa que tiras por el otro lado, ¿o sí?, pero..."

"Entendido me quedare". Aunque Feng Yuan entendió que era de mala educación interrumpir a alguien mientras hablaba, simplemente ya no soportaba a la madre de Lin Ming hablar porque si continuara hablando definitivamente le daría dolor de cabeza, hoy por fin entendió porque los hombre decían que "las mujeres son verdaderamente aterradoras".

Pero mientras Feng Yuan suspiraba impotente, Lin Ming tenía la cara toda roja mientras miraba hacía al suelo con una gran sonrisa, ya que sabía que su madre había dicho eso para hacer que Feng Yuan se quedara y que ambos pasaran algún tiempo juntos.

Descenso a la locura.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora