002

228 49 12
                                    

Fue...extraño, simplemente te limitaste a verlo limpiando, caminando de un lado a otro, claro que le dijiste que no tenía porque limpiar, solo nego y siguió dando vueltas...aunque si te preguntaban tampoco estaba tan sucio.

Aún así viste como se llevó la escoba a supones su lugar, lo esperaste unos segundos y cuando se asomo camino a ti. 

Cuando viste que tenía una toallita en sus manos y te miro ladeaste la cabeza confundida.

— es que...tienes rimel corrido, ¿Te molesta si te lo limpió?

Se te había olvidado completamente que no te habías desmaquillado desde ayer.

Cuando te diste cuenta de que en realidad debías verte como un desastre, suspirase.

Ibas a negarte, decir que podías hacerlo porque podías pero cuando viste lo tenso que se veía solo asentiste.

— si, si puedes.

Relajo su postura, se veía menos tenso, relajado. Es increíble lo humano que se ve, actúa y tiene un lenguaje corporal terriblemente fácil de entender. Debiste prestar más atención a esos anuncios en la televisión, nisiqueura te diste cuenta de cuánto habían avanzado, si, no te quedaste tan atrás pero era demasiado...humano.

Viste como dió los últimos pasos para quedar frente tuyo. y luego puso su mano en tu mejilla, alzo levemente tu rostro, miraste su rostro unos segundos, no te estaba mirando, toda su atención estaba fija en limpiarte. 

Sentiste el cuidado con el que empezó a limpiar bajo tus ojos subiendo leventamente hasta donde estaba el delineado, cerraste los ojos por reflejo y sentiste como limpiaba tu párpado.

Se sentía bien ser tratada como si fueras la cosa más delicada y importante, después del día de ayer esto era agradable.

Así estuvo unos minutos antes de pasar al otro ojo, lo limpio con el mismo cuidado, la misma delicadeza y paciencia, jamás hubo un movimiento brusco.

Cuando dejaste de sentir su mano en tu mejilla, abriste los ojos para verlo, parecía examinar lo que hizo, asintio para si mismo antes de sonreír te.

— listo.

Le devolviste la sonrisa un poco más débil que la que el tenía. Te sentías culpable, adquiriste un robot por accidente, uno que aparentemente no tenía devolución y no solo, con lo humano que se veía no era como que tirarlo a la basura fuera una opción.

Sabes que hay personas que los desechan, no quieres hablar de las incontables veces que has escuchado a alguien decir que su "robot" dejo de servir, es viejo o alguna excusa para tirarlo y llevarlo a desmantelar, te preguntas si esos robots se veían así de humanos, ¿Cómo es que tienen la facilidad de tirarlos así si se ven tan humanos?

— ...¿Puedo saber por qué tiene rimel corrido?

Su tono educado hizo que tu mirada se posará otra vez en el, dejando de un lado tus pensamientos.

No tenía la toalla en sus manos así que supones que el tiempo que estuviste metida en tus pensamientos se fue a tirarla.

— una mala noche.

Murmurraste, bajaste unos segundos la mirada pero cuando volviste a verlo, te tomaste con sus ojos azules mirándote. Te sonrió levemente haciendo que desviaras la vista levemente otra vez.

— lamento mucho eso.

Cerro los ojos deteniendo sus movimientos unos segundos antes de volver a abrirlos y seguir limpiando.

— pero ahora que estoy aquí intentaré que sus noches sean maravillosas igual que sus días, si me lo permite.

Viste como su confianza y sonrisa se fueron apenas pareció notar que dijo. No sabías que un robot podía tener secuelas o algo así por probables quejas que se le dió con anterioridad, tampoco si solo recibió quejas y malas palabras, no sabes con qué perosnas a tenido que lidear realmente.

— es agradable saber eso, matt.

Hablaste con una pequeña sonrisa, lo que dijo realmente fue lindo, se veía lo agradable que era, entre más convives con el no entiendes por qué de esas reseñas tan malas.

Aún que decir que eras mejor no sería tan cierto, si bien no tienes ni idea de que hacer con el o incluso si deberías de decirle que es un accidente que esté aquí contigo.

— deberías cambiarte para tener algo más cómodo, te vez bonita con esa ropa pero realmente no creo que sea la más cómoda.

Bajaste tu mirada a lo que tenías puesto. Apenas te había quitado los zapatos cuando llegaste.

— si, creo que debería darme un baño.

Matt se alejo de ti cuando vio que te ibas a parar.

— ...¿Y que hago mientras?

Ladio levemente la cabeza y lo miraste unos segundos para luego ver tras el.

— puedes buscar que ver en la televisión, tengo palomitas para hacer así que podríamos ver...¿Una película?

Este pareció animarse por la idea y asíntio con entusiasmo. Bien, no le dirás qué es un accidente que esté aquí, no crees soportar ver a este "chico" triste.

— ¿Tienes una preferencia en películas?

Negaste ante eso, antes de desaparecer por el pasillo con una sonrisa hablaste.

— ninguna, sorprendeme.

Oh. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora