.Ice Cream.

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Un semana después.

Derek estaba actuando muy extraño.

Muy, muy extraño.

Faltando exactamente dos semanas para el cumpleaños del menor este comenzó a actuar extremadamente cariñoso, especialmente al rededor de la manada, incluso llegando a apartar al menor del resto, especialmente de Scott.

El asunto era tan extremo que incluso tuvieron que volver a buscar ayuda por parte de Deaton. Pues según su comportamiento posesivo debía haber terminado para aquel punto, o por lo menos haberse reducido, pero simplemente parecía incrementar con el tiempo.

Después de un largo parloteo sobre los síntomas del lobo por parte del preocupado humano, -quien decidió omitir un par de detalles insignificantes sobre su vida sexual- Deaton finalmente unió los cabos sueltos y entregó otro diagnóstico.

— Celo? Pero los machos no tienen un celo...mucho menos una persona - replicó Stiles completamente incrédulo.

Definitivamente no podía creer la extraña conclusión del veterinario.

— Y los hombres lobo deberían ser un simple mito -contestó Deaton con simpleza.
— Touché -respondió Stiles.
— Aunque no será esa clase de celo, en el mundo sobrenatural hay diferentes tipos, pero si no me equivoco es un celo de clase B, su deseo sexual si incrementara significativamente pero no despertarás a las tres de la mañana con Derek tratando de tener coito contigo, es más bien como una obsesión continua que tendrá con tu persona, como si jamás pudiese tener suficiente de ti, es algo común en hombres lobo nacidos cuando encuentran y aceptan a la persona indicada -agregó con seriedad.

Scott por poco devuelve su desayuno.

— Definitivamente no necesitaba escuchar eso -murmuró Scott incómodamente.
— Pero...Cuál es la causa? - preguntó preocupado, golpeando la cabeza de su amigo sin dejar de observar al mayor.
— Posiblemente fue provocado por una combinación de diferentes factores, lo que pasó con ese chico, Sean, el que ustedes han comenzado a tener relaciones sexuales, el que aún no te ha marcado ni anudado, el que tu cumpleaños esté tan cerca, muchas cosas podrían ser los detonantes -explicó, observando la enorme cantidad de notas que Stiles había escrito previamente para él.

Más información que Scott no necesitaba escuchar. Por qué había ido?.

Oh si, porque su amigo estaba tan preocupado que por poco voltea su Jeep frente a su casa.

— Y sobre su nuevo síntoma? Tiene que ver con todo eso? -preguntó Scott, intentando olvidar lo anterior.
— Dormir como oso en invierno? -Deaton lo pensó por un segundo- — Posiblemente su lobo está exhausto, véanlo como un cachorro, completamente emocionado por jugar y recibir cariño, regularmente se esfuerzan tanto y al final del día están dormidos como un tronco, aunque bueno, sería mucho mejor que él mismo venga para revisarle con mejor detalle  -sugirió.
— Es un terco, ni siquiera sabe que estamos aquí, lo mande a comprar la despensa del mes, pero ya veré la forma de obligarle -respondió Stiles con determinación.

Y obviamente ninguno de los presentes pudo evitar preguntarse: Desde cuando aquellos dos parecían una vieja pareja de casados?.

Dos horas después Stiles finalmente regresó a casa, dónde fue recibido por el -ahora- inusual ceño fruncido de Derek, quien le esperaba a un par de metros de la puerta, con un bote de helado a medio comer en su mano izquierda y una cuchara en su mano derecha.

— Scott...-murmuró, llevándose helado a la boca con algo de brusquedad.
— Oh no...no tú, Derek Hale, dile a tu lobo que se controle inmediatamente o dormirás en el sofá o peor, en tu loft -le regaño colocándose frente a este, recibiendo un suave lloriqueo.
— Lo siento -murmuró ligeramente sonrojado.
— Por qué te haz comido mi helado? -esta vez él frunció el ceño.
— Tardaste mucho tiempo en llegar y tu congelador está demasiado lleno, pero aún queda suficiente -respondió, entregando el resto del helado.
— Mi congelador definitivamente no estaba lleno cuando me fui...-murmuró confundido, regresándole el helado para ir a su cocina con rapidez.

Y fue entonces que Stiles por primera vez en su vida se quedó sin palabras.

— En la lista de compras que me diste solo decía "helado" y no sabía de que tipo querías...así que traje de diferentes clases -explicó el mayor caminado atrás de este, para luego abrazarle por la espalda.
— Eres un idiota Derek -susurró con suavidad, dándose la vuelta para corresponderle mejor.
— Te extrañe -susurró, olisqueando ligeramente su cuello.
— Amigo, solo fueron dos horas, suenas como un acosador -se burló.
— No me digas amigo -susurró de nuevo, para después besarle y dirigirle lentamente hacia la barra.
— Dude -murmuró con gracia, sonriendo cuando su cuerpo finalmente topó con la barra, para después sentarse sobre esta con ayuda del contrario.
— Mieczyslaw...-soltó en un pequeño gruñido, colocándose entre sus piernas, para después volverse a apoderar de sus labios.

Y fue entonces que Derek se sumergió por completo, al punto de que olvidó que Stiles no era lo único que había sobre la barra.

Y así es como una increíblemente hermosa y cara escultura que Lydia le había regalado a Stiles terminó en el suelo completamente desarmada.

— Puedo repararlo -respondió apresuradamente, volviendo a besarle de inmediato para que se olvidara de ello.
— Más te vale Derek Hale -murmuró entre sus labios.

Sup! Cómo están? Qué opinan?.

Can you fix it? -SterekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora