Capítulo 6

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Las mañanas de sábado son agradables cuando tienes 8 años y todo lo que deseas es disfrutar del primer día libre de la escuela después de cinco días de despertar para cumplir con las obligaciones escolares. El parque parece ser un complemento en el paisaje bucólico de dos niños corriendo por la hierba verde, salpicada de otros colores de las hojas que caen de los árboles y parterres de jardín.

Gemma es dos años mayor que yo, pero mi hermana parece conservar el mismo sentimiento que yo sobre las mañanas del fin de semana mientras jugamos a la pelota.

En algún momento ella sale disparada hacia delante y yo sólo tengo que concentrar la fuerza de mis piernas para correr aún más rápido que ella y alcanzarla en la única misión que tengo en este momento, capturarla y convertirla en atrapador.

Pero consigue correr bastante distancia antes de detenerse bruscamente, y con los ojos brillantes, mientras mira fijamente la lona azul y amarillo que se despliega ante nosotros.

- ¡Mira Harry! ¡Un circo! ¡Eso es muy divertido! ¡Entremos, rápido! - Dice sin darme tiempo a responder, corriendo hacia el, levantando un borde de la lona y pasando por debajo de ella.

- ¡Gemma! - Intento llamarla sin éxito, ya que al final de mi llamado ha desaparecido dentro de la carpa.

En ese mismo momento, el clima solar que predominaba cambia instantáneamente hacia un cielo nublado y un viento húmedo y frío abraza mi cuerpo como un mal presentimiento. Odio estos malos sentimientos, pero últimamente se dan con cierta recurrencia.

Miro a los lados y no veo a nadie más, siendo todo el entorno del circo un gran vacío y silencio. Busco con mis ojos a nuestros padres o a cualquier otro adulto, pero estoy completamente solo.

Un águila pasa en picado por delante de mi cabeza. No puedo verla exactamente, pero puedo sentir su figura pasando por encima de mi hombro y suelta un grito agudo, que resuena en el vacío del parque. Su sonido golpea la lona y vuelve a mis oídos en un eco que me produce un mal escalofrío. Siento miedo y creo que lo mejor es ir a por mi hermana y utilizar la cubierta del circo para refugiarme.

Levanto la tela plástica y paso por la misma abertura por donde entró mi hermana. Así que estoy adentro, miro alrededor y veo que todo también está completamente vacío, con una pequeña arena en el centro.

- ¿Ge-Gemma? - Trato de llamarla, pero mi voz no sale tan alta y fuerte como debería.

No la veo por ningún lado y extrañamente el circo no parece tener puerta de entrada y salida. Una canción de circo suena en un tono monótono, como en una caja de música, lo que resulta molesto por los compases repetitivos.

Camino lentamente hacia la arena, todavía mirando alrededor tratando de asimilar todo y buscando a mi hermana mientras la musiquita se repite y repite sin interrupción.

En cuanto entro en la arena, todas las luces del escenario se encienden en mi dirección y me iluminan. La música se detiene al instante.

Empiezo a oír una risa macabra por toda la tribuna, a veces en una esquina, a veces en otra. Y giro sobre mis talones a la misma velocidad que las risas cambian de lado a lado en las gradas.

Hasta que en una de las esquinas lo veo. Claro y nítido.

Se trata de W.

Está parado de pie, con un traje de payaso blanco con detalles en rojo. Un maquillaje fuerte de Arlequim que no me permite reconocer sus rasgos. En la mano izquierda, tiene un cigarrillo encendido, que solo lleva a la boca para darle una fuerte calada que consume casi un tercio del papel de tabaco a la vez.

- ¿Sorprendido de verme, Harry? - Pregunta sin mirarme, mirando sólo el cigarrillo - Bueno, no deberías estarlo. Este tipo de pesadilla es tan cliché...

W - larry (traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora