La lluvia envolvía con furor por toda la ciudad costera de Portorosso; nadie se atrevía a atravesar aquellas calles de estilo clásico. Solo él era el único loco que corría con prisas, pisando los charcos y escabulléndose por los callejones más secretos de ese lado de la cuidad. Nadie podía verlos reunirse bajo la tormenta de otoño. Sin paraguas ni cualquier ropaje que lo protegiese de una posible gripe, nada lo detendría en verlo. No le importaba ya, por su descuido llegaba tarde.
Ambos sabían que estaba mal reunirse, que no podían ni siquiera relacionarse. Él pertenecía a los Ovest mientras que él a los Nord. Dos universidades que se odiaban a muerte, que si los vieran juntos les harían la vida imposible y más para su mejor amigo, quien ya sufría acoso.
Si ellos supieran que él es la "mujer" que muchos buscan y alaban por su belleza. Que Luca era la famosa "Dama de las hortensias" cuyo fino y puro cuerpo casi desnudo estaba colgado en la más prestigiosa galería de la ciudad.
No se habían visto desde que lo pinto después de que ellos se acostaron, donde después de proclamar su cuerpo lo adorno de una tela fina y delgada mientras su cuerpo brillante y hermoso fue adornado por pétalos de hortensias; lilas, moradas hasta azules y florecitas verdes. Su cuerpo relució al punto de enamorar a varios que se perdían en sus curvas similares a una mujer delicada.
Su mensaje citándolo en su lugar preferido, lo desconcertó a tal punto que dejo en media comida a sus amigos y salió corriendo sin explicación alguna.
Nadie debe enterarse de su amistad...aunque hace tiempo dejo de serlo.
Ellos dos ya no eran niños, dejaron de ser mejores amigos al momento en que se acostaron por primera vez. No eran novios y jamás lo serian, ese era su acuerdo mutuo. La familia y toda su universidad lo odiaba, tampoco Luca se salvaba todos los amigos de Alberto odiaban a cualquiera que estudiara en el Ovest. Solo eran amigos con derecho mientras todos creían que ellos eran enemigos a muerte.
¿Cómo podía odiar la más bella musa que tenía? Cuyo cuerpo desnudo solo ha sido visto y tocado por él.
Exhausto y sin aire llego al lugar citado; un pequeño callejón en medio de los callejones. Era el lugar de ellos, donde había un jardín escondido donde flores de hortensias iluminaban hacían más vivo aquel lugar olvidado por el tiempo. Sonrió agotado al verlo, sin paraguas ni algo que lo protegiera de aquella horrible tormenta que los tenían completamente empapados. Solo ellos dos eran un par de locos que no les importaba mojarse. Lentamente se acercó a él, percatándose como aquel bello chico de piel blanca y cuerpo delgado. No tenía sus clásicos anteojos de forma de botella, cosa que hacia resaltar su fino rostro y su nariz redonda. Estaba sentado en el borde de la fuente de Eros y Psique. Aún no ha notado su presencia con la mirada fija en los pétalos de hortensias que flotaban en el agua de la fuente y eran golpeados por las gotas de la lluvia.
El artista se acercó a paso lento, sonriendo al ver al científico tan calmado.
–Buon pomeriggio, signor Paguro.
El menor se sobresaltó, pero no pudo evitar voltear con una sonrisa dulce y cálida; cuales solo se las dedicaba a él.
–Buon pomeriggio, signor Scorfano.
Alberto con una sonrisa se acercó a él para sentarse a su lado y tomar su mano. La levanto para dejar un delicado beso en sus nudillos. Su amante blanqueo su mirada ante sus comportamientos de la vieja escuela.
–Llegas tarde –le insinuó con una sonrisa burlona.
–Que puedo decir tu mensaje me tomo de sorpresa mientras estaba en el otro lado de la ciudad –explicó alzando sus hombros despreocupadamente.
–¿Nadie te vio?
–Estaría loco si dejara que alguien nos viera –exclamó sonriente mientras arrancaba una de las hortensias azules con un toque verde y se las colocaba en la oreja de su amante para después con coquetería mover sus cabellos mojados de su frente.
Luca rio y se acercó más a él.
–¿En tu departamento o mi casa?
Fingió pensarlo un poco para después sonreírle pícaramente.
–¿Están tus papás?
Negó sonriente. Alberto no espero más y se levantó para estirar su mano hacia él. Con una sonrisa el menor la tomo, siendo rápidamente jalado por quien solía llamar "mejor amigo". Quedando a pocos centímetros sus rostros. Ellos no se besaban, al menos que era mediante el sexo.
Nadie debe saber que el nerd de la clase tenía un amante...
Nadie debe enterarse que el más solicitado de la universidad tenía un preferido...
Nadie debe saber sus secretos que ellos eran el famoso pintor de "La dama de hortensias" y el otro la famosa modelo que todo el mundo quiere conocer...
Sus carreras se destrozarían si supieran que ellos dos eran amantes. No podían exponerse, Luca no era para él y viceversa. No había amor en su relación. Y más ahora que el menor estaba comprometido con otra persona que no era aquel pintor que le hacía gritar de placer cada vez que reunían.
Simplemente aquel chico de las hortensias no pertenecía de su jardín.
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Aquel chico de las hortensias || Luberto ||PAUSADA
FanfictionEran finales de 2018; donde las lluvias envolvían toda la ciudad costera de Portorosso. Por toda la ciudad los hombres buscan aquella mujer de cuerpo escultural y pureza. Todos buscaban a la modelo que poso para el famoso pintor anónimo Mostro mari...