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Jimin ya había llegado al departamento, había acostado a MinGuk en la cama para que descansara, Chae fue a la casa de su tía Lisa para jugar con ella por que la había extrañado.

Jihyun veía el lugar demasiado pequeño, no sabía dónde iba a dormir el próximo tiempo que estaría ahí pero sabia que no podía quejarse por que ella misma había inventado la idea de quedarse con Jimin.

-Saldré, ¿puedes cuidar a Gukie?–Preguntó Jimin a su cuñada.

-Claro que sí... ¿A donde vas?–Preguntó ella curiosa.

-Iré a la escuela de Chae y a la fundación, debo hablar por lo sucedido.

Jihyun asintió y se despidió de su cuñado, él fue y se despidió de MinGuk para salir del departamento, fue a donde Lisa y se despidió de ella y su hija... Sin más se fue a acomodar las cosas que se habían dañado por culpa de su suegro.

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Jimin había arreglado la situación de sus hijos en sus respectivas escuelas... Chae debía responder por los compromisos que le enviaron y pues MinGuk solo debía descansar para empezar su arduo proceso.

Así que como eso ya estaba listo Jimin iba a hablar con su jefe del restaurante... Debía explicar algunas cosas pero tenía claro que no podía decirle la verdad.

Sorpresa fue cuando abrió la puerta para irse... Se quedó estático al ver ese  imponente hombre con una fuerte aura.

-Hermano...

-Entonces no olvidaste quien soy...

Jimin pudo sentir el enojo en las palabras de su hermano... Park Hoseok estaba frente a él con una evidente molestia y eso lo ponía un poco nervioso.

Ninguno de los dos se había dado cuenta que MinGuk se había escapado de la habitación para comer algo pero al ver que su papá no se había ido fue a ver por qué... Ahora solo veía a un alto hombre frente a su padre.

-¿Que haces aquí?–Preguntó Jimin suave.

-Enserio Jimin?–Preguntó Hoseok sonriendo molesto. -¿Vas a preguntar eso?.

Jimin sonrió levemente e intentó acercarse a su hermano pero este se alejó.

-Hobi...

-Disculpate–Exigió Hoseok. -¡Disculpate por desaparecer!–Hoseok subió el tono de voz.

Antes que Jimin pudiera responderle MinGuk en acto de defensa corrió y le pegó una patada en la canilla de su tío y lo empujó.

-Papi Papi Papi–MinGuk abrazó a Jimin con fuerza.

Hoseok apretó los dientes con fuerza por el dolor y miró como Jimin se había arrodillado para abrazar a su hijo con fuerza.

-Cariño no debiste salir–Le dijo Jimin preocupado.

-Te van a dañar–Susurró MinGuk llorando.

-No hijo, el tío hobi jamás me haría daño... Solo estábamos hablando—Le explicó Jimin.

-Te gritó feo...

Jimin sonrió levemente y le dio un beso en el cabello para separarlo, lo tomó de las mejillas para verlo.

-El tío Hobi habla fuerte, vuelve a la cama que la tía Ji después te hará algo delicioso para comer..

MinGuk se giró y miró a Hoseok, viéndole el rostro recordó que ese sí era su tío Hobi. No tenía muchas fotos de él pero al verlo de manera recurrente en el TV se había aprendido su rostro.

Jimin lo envío hacia la habitación e invitó a pasar a su hermano, Hoseok iba a ir a la sala pero su hermano lo detuvo y lo hizo quitar los zapatos para que se colocara pantuflas... Estar tanto tiempo en el extranjero le hacía olvidar sus costumbres.

-Lo siento mucho Hobi–Jimin no esperó ni un reclamo más y lo abrazó por la cintura con fuerza. -Deja de estar enojado conmigo.

Hoseok suspiró y cerró los ojos, abrazó a su hermano con toda la fuerza posible y empezó a llorar... Estaba feliz por tenerlo nuevamente entre sus brazos pero la ausencia de este le había arrebatado miles de lágrimas y cientos de noches de insomnio, era su único hermano y haber perdido contacto con él era algo que le hacía corcomer el corazón.

-Te suplico que no vuelvas hacer esto Jimin, eres mi único hermano y si algo te hubiera pasado yo me hubiera vuelto loco–Susurró Hoseok con la voz llorosa.

-Lo siento, no quería dañarte pero...

-Sé que lo hiciste por los niños, me hubieras llamado y yo te hubiera ayudado de todas las maneras posibles... Tata lloró mucho, no tenemos muchos contactos aquí en Corea pero pudimos ubicarte–Hoseok se separó y le dio un beso en la frente, ahora sí sonreía felizmente. -No sabes lo mucho que me esforcé para llegar a Tiempo...

Jimin rio suave al ver como su hermano cambió rápidamente su estado del ánimo.

-Jamás has sido muy cariñoso pero si puedes abrazame otra vez te lo agradecería–Le pidió Jimin.

Hoseok lo abrazó por la cintura y lo elevó del suelo dándole vueltas para hacerlo sonreír... Había extrañado mucho su sonrisa.

-Tu eres mi vida Jimin... Y no me importa si alguna vez te casaste, si ya tuviste hijos y mucho menos si ya puedes cuidarte solo, prometí estar siempre a tu lado... Ahora así no quieras te cuidaré con mi vida–Le dijo Hoseok cuando lo bajó.

Jimin se recostó sobre su pecho y cerró los ojos mientras respiraba profundo grabando en su memoria el delicioso perfume de su hermano.

-¿No trajiste a Tata?–Preguntó Jimin sin separarse de él.

-Él no pudo venir hoy pero lo hará después, su prima pronto llegará para que cuide a los niños y él se pueda venir a verte... Estaba muy feliz cuando le dije que te habian encontrado...

Jimin se separó de él y lo miró a los ojos.

-¿Cómo me encontraste?–Jimin se había dado cuenta que últimamente esa era la pregunta que más hacía.

-Tenía vigilada a toda la familia Jeon... Me enteré de lo que hizo tu suegro así que como pude cancelé todo lo que tenia por hacer y tomé el primer vuelo hacia aquí, no sabía cuando subir por que tu ex cuñada esta aquí...

-Eres increíble–Comentó Jimin sonriendo.

-Lo sé hermanito hermoso, no me adules que me haces sonrojar....

Ambos rieron nuevamente y se abrazaron, tenían muchas cosas que contarse así que Jimin olvidó su salida y se sentó junto a su hermano para hablar de todo lo que había pasado estos seis años donde no se habían podido ver.

El costo del amor 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora