tutoría (en edición y mejora)

CAPITULO 17

- Alana
La directora continuó hablando y dándonos información, mientras yo creaba teorías de que le pudo decir Dylan a Lucas que hizo que se fuera así de disgustado.
- ¿Saben por qué están aquí? - habló la directora.
- ¡NOO! - respondió una gran parte de los alumnos.
- Bueno, es para informarles que oficialmente volverá la semana recreativa...
La directora no terminó de hablar cuando fue interrumpida por los gritos de festejo por parte de los alumnos.
- volverá para recaudar fondos en beneficios a diferentes fundaciones - continuó un poco después de que los gritos cesaron.
La semana recreativa es un evento que es patrocinado por mi escuela y otras dos escuelas de la ciudad, el cual consta en una semana entera sin clases donde cada escuela se turna unos días para hacer actividades e infinidades de cosas para ganar dinero (sacarnos dinero a nosotros) no me molesta porque en parte es divertido, una semana sin actividad académica, pero yendo a la escuela sin horario estipulado y viendo a mis amigas. El evento había sido cancelado los tres últimos años por falta de fondos y tiempo, pero al parecer todo se soluciono.
- será divertido - dice Samantha. - escuche que prestaran el campo de la IDC para poner una tarima y quien quiera puede subirse a tocar.
La IDC y la TGH son las siglas de las otras dos escuelas y así son conocidas por casi todos los jóvenes.
- y en la TGH hay piscina seguro dejarán que la usemos - comenta Adriana emocionada.
- Y podremos hablar con los chicos de las otras escuelas - habla London con una sonrisa pícara en su cara.
Yo solo las escuchaba, asentía y sonreía porque no es algo que me aburra del todo, pero como dije puede llegar a ser divertido.
- será a partir del lunes hasta el viernes desde las 8:00 A.M. Hasta las 10:00 P.M. como ya saben, luego se retomarán las clases con normalidad. - concluye la directora.
Nos da la salida a todos, para dirigirnos a continuar con la jornada.
Mientras salía del auditorio detrás de mis amigas Dylan me agarra por la cintura y me frena.
- ¿Por qué estás tan callada? - pregunta hablándome casi al oído.
Quería preguntarle qué había pasado con Lucas o que le había dicho, pero prefiero evitar problemas y preguntárselo al mismo Lucas más tarde.
- estoy un poco cansada, no dormí muy bien anoche - mentí y fingí una media sonrisa.
- ¿Estás contenta por la semana recreativa?
- Lo normal, sabes que no es que sea completamente de mi agrado.
- Que aguafiestas eres Alani
El hecho de que me llamara así me disgusto creo que el estrés de la mañana y ese diminutivo tan feo me hicieron enojar un poco, me solté de su agarre le di una sonrisa con nada de felicidad y empecé a caminar, dejándolo ahí plantado como un tonto. Llegué al salón y como aún faltan muchos alumnos por llegar decidí ir al baño, para mí gran suerte el baño más cercano a mi salón estaba cerrado así que me tocó caminar al otro. Pasando por una pequeña zona verde me detuve, habían plantados algunos tulipanes blancos. Me di el tiempo de analizarlos y observarlos.
- ¿Son lindos verdad? - habló Lucas a mi lado también mirando los tulipanes.
Admito que me asuste porque aprecio y habló de repente, pero ya se están volviendo común encontrarme a Lucas en todas partes. Aparente no haberme sorprendido por su presencia y respondí de lo más normal.
- Son mi flor favorita, en especial estos blancos.
- Pensé que eras más de rosas estilo la reina de corazones - habló con su vista aún fija en las flores.
-  también me gusta mucho la reina de corazones - dije con una sonrisa baja.
-  no estaba tan equivocado entonces.
Estábamos muy concentrados en las flores que no nos dimos cuenta que deberíamos estar en la clase.
- ¿Qué hacen ahí? - pregunta un profesor detrás de nosotros.
Lucas voltea de golpe con cara de niño que daña algo en su casa y sabe que está mal, pero aun así lo niega.
- Disculpe profesor, nos distrajimos con estas lindas flores - contestó con respeto.
- Regresen a sus salones.
- Si, profesor - acepta Lucas.
Seguido a eso agacha la cabeza, me agarra de la muñeca y sin dejarme decir nada me lleva hasta el salón a paso apresurado.
Si, llegamos un par de minutos tarde a la clase, los dos entramos con la cabeza agachada con las manos apoyadas en el regazo y haciendo el máximo silencio, afortunadamente la maestra estaba de buen humor y no decidió ponernos un parte por llegar tarde. Los dos tomamos asiento en las sillas vacías y atendimos la clase.
Yo la verdad no me entere de nada porque por lo general no entiendo ahora menos con el tema a la mitad.
- ¿Qué tenemos que hacer? - pregunté a Lucas en un susurro.
El sin cambiar su atención de la maestra arrastra su cuaderno y me lo pasa.
- gracias - digo en otro susurro.
Revisé su cuaderno y tenía escrito una clase con fecha de hoy y unas preguntas.
¿En qué momento la maestra había dicho esto? ¿Si estamos dando la misma clase?
Me limité a copiarlas sin más e intentar responder un poco mentalmente alguna de las preguntas.
- ok, chicos eso es todo como compromiso les quedan las preguntas para la próxima clase, nos vemos - indica la maestra saliendo rápido del salón.
Yo estaba copiando rápido todo lo del cuaderno de Lucas para poder ir al cambio de clase cuando Lucas suelta una risita y habla.
- ¿Sabes qué te puedes quedar con mi cuaderno verdad? - dijo con una gran sonrisa de burla en su rostro.
- ¡Y me viste copiar todo rápido y ahora me dices! - hable mientras movía mi mano que estaba un poco dolorida.
- Es que me divertía verte, sacas la lengua y aprietas los labios cuando te concentras - se apoyó en la silla de al frente mientras esperaba que guardara mis cosas.
- Claro, ríete de mí - dije sarcásticamente.
- Y también arrugas la nariz y frunces el ceño cuando algo te molesta - vuelve a soltar otra risita.
- Vaya, eres el más observador - me crucé de brazos. - ¿Algo más que hayas notado?
- Ya que lo preguntas, si, en la biblioteca a cada libro que abrías olías sus páginas cuando creías que no te veía - da dos pasos hacia delante acercándose.
Yo agacho la cabeza para esconder el obvio enrojecimiento de mis mejillas.
- Y todas las mañanas tienes un aspecto más relajado, te ves más... Más tú y te queda espectacular - toma con delicadeza mi mentón obligándome a verlo a los ojos. - cabello desordenado, ojeras leves, pero presentes, audífonos puestos para evitar que te hablen y esa chaqueta gris que tanto te gusta que te queda grande lo que hace que te veas más pequeña, no puedo negar que me gusta mucho cuando te ves así, me gusta como te ves siempre, pero "esa tu" es muy mi tipo y se me hace imposible no resaltarlo.
Me sentí así como cuando el personaje masculino de un libro por el que todas mueren habla y lo que dice es muy lindo que te causa cosquillas y tienes que marcarlo o ponerle un post it. Tenía ganas de marcar ese momento y ponerle un post it en la frente a Lucas que diga "dame tiempo para procesar lo que acabas de decir.
¿Diosito porque me pones en esta situaciones? y mucho más teniendo un compromiso con otra persona.
Lucas noto que no decía nada así que pasó su mano de mi barbilla a mi mejilla y la acarició.
- ¿nerviosa? ¿O te deje sin palabras? - me sonríe. - También te sonrojas con facilidad, chiquita.
Y bueno la verdad es que estuve viendo mariposas y corazones a su alrededor así que esto fue lo único que supe hacer. Agarré su mano y la dirigí a mi corazón el cual amenazaba con salirse de mi pecho.
- no tengo necesidad de hablar.
La sonrisa de Lucas se extendió y pasó a ser una de victoria.
- ya que estamos, si sigues sonriendo así harás que se me salga el corazón - dije en forma de expresar que me gusta mucho su sonrisa.
Lucas soltó una carcajada.
- ¿Te gusta? - da un paso más. - ¿te gusta mi sonrisa Alana?
Estaba a punto de responder cuando...
- Alana, te necesitamos urgente - entra Adriana algo alterada al salón.
¡A QUIEN SE LE OCURRE INTERRUMPIR ALGO TAN IMPORTANTE!
Yo miro a Lucas con cara de "quiero continuar esto, pero tengo que atender eso" él solo asiente. Iba saliendo cuando hablo.
- Alana, mi mamá te invito a la casa después de la escuela, para agradecer lo de anoche - dijo mientras se acariciaba el cabello.
- Espérame en la salida - le guiño un ojo en aceptación y salgo detrás de Adriana.
Caminamos hasta la sala de informática donde estaba Samantha y London lo que activó mis alarmas, ver a London llorando y Samantha abrazándola, me asusté así que corrí hacia ellas.
- ¿Qué pasa? ¿Por qué lloras?
- Mamá consiguió nuevo trabajo - responde London entre sollozos.
- ¿Y dónde está lo malo en eso?
- Nos iremos de la ciudad.
- ¿Qué? - preguntó sin creer lo que dice.
- Nos iremos hoy en la noche, empieza el lunes y quiere que nos tomemos los días para adaptarnos - aclara London.
- Pero y la semana de recreación - pregunta Adriana en shock igual que yo.
- Pues no la pasaremos juntas este año - London cabizbaja por la situación. - mamá me dejó pasar el resto del día con ustedes pero en la noche debo volver para ir al aeropuerto, tengo planes ¿nos vemos en mi casa después de la escuela?
- cuenta con nosotras.
Todas nos abrazamos pero seguíamos sin creer que London se irá así como así, de la nada, dejaremos de vernos, seremos solo tres, se sentirá un pequeño vacío y el espacio sobrara, pasar los descansos sin las ocurrencias de London, sin sus chistes, sin escucharla reír por cada bobada y sin escucharla hablar de los profesores que la enojan toda alterada.
- chicas tengo que ir a comunicación, nos vemos después de clases - dice Samantha para salir de la sala.
- Yo creo que también me iré, hoy ya llegué tarde a una clase.
Tome mi bolso que lo había dejado en el suelo del susto de ver a London llorando y salgo detrás de Samantha dejando a Adri con London.
Llegué al salón donde me tocaba la siguiente clase y no había nadie, por lo que supuse que tenía hora libre tal vez porque el profesor se ausentó. Deslicé mi espalda contra la pared al lado de la puerta para quedar sentada en el suelo con las piernas estiradas. Me di un tiempo para calcular que London se iría y está la posibilidad de que mis sentimientos por Lucas regresaran.
Tantas emociones acumuladas en una persona pequeñita.
Por ahora me limitaré a no aturdirme, iré a casa de Lucas un rato y luego me iré con las chicas. Sin agregarle más dilemas.
Mientras estaba ahí decidí escribirle a Nicole que hace unos días no hablamos porque ha estado muy ocupada con su remodelación dijo que la escuela no la aceptaría si no hasta después de la semana de recreación como alumna oficial por algunos temas, pero que le darán un pase especial para que pueda participar.
- hola, Nicky - envíe el mensaje.
Salí de la aplicación de mensajes y me quedé revisando mi instagram un rato mientras respondía. No sé cuánto tiempo estuve en eso pero sí fue bastante porque sonó la campana de salida y Nicole nunca respondío.
Me levanté de ahí, caminé en dirección a la salida donde supongo que está Lucas esperándome para ir a su casa.
- ¡Alana! - grita Dylan.
Venía corriendo desde no sé dónde, se le notaba en la respiración.
- ¿Qué pasa?
- ¿Te acompaño a tu casa?
-  hoy viene a recogerme mi hermano - mentí, obviamente me iría con Lucas.
- Ok, no hay problema, pero ¿puedes decirme que tienes? - su tono de voz se suavizó.
- Nada, está todo bien, solo que como siempre me dejabas sola, le pedí a Santiago que viniera.
- ¿Y no le puedes decir que ya no venga?
- Está allá afuera - volví a mentir descaradamente.
- te acompaño de paso lo saludó.
- Dylan no...
- Ali, tenemos que... - interrumpe Lucas antes de notar la presencia de Dylan. - disculpen, no quise interrumpir. - se da la vuelta pero Dylan habla antes de que se vaya.
- ¿Acaso no te quedó claro? - pregunta Dylan receloso.
- Disculpa, no vi que estaban hablando ya me voy - se excusa Lucas.
Me sorprendió la forma en la que Lucas estaba tan tranquilo y la forma en la que respondía tan respetuosa y amigable.
- primero ¿porque le dices Ali a mi novia? Ella para ti es Alana, segundo ¿para qué la necesitas?
- Primero ella puede decidir cómo quiere que la llame y como no, segundo vamos a ir a... - respondió Lucas en el mismo tono que Dylan pero yo lo interrumpí antes de que me dañara mi mentira.
- A estudiar a mi casa, Santiago nos va a llevar - dije.
Note la expresión de extrañeza en la cara de Lucas, pero no dijo más nada y solo asintió. -  ya nos tenemos que ir Lucas, ¿o prefieren quedarse aquí a pegarse como animales como la vez pasada?
Dylan dio dos pasos atrás y hace una seña con la mano para dar a entender que nos fuéramos y yo camine con Lucas, dejándolo por segunda vez plantado como un tonto ahí mientras veía como nos alejábamos.
- Le mientes a tu novio con que vas a hacer tareas y en realidad vas a salir con un chico - habla Lucas juzgándome de broma mientras doblamos la esquina de la escuela.
- ¿Vas a decir que no te sientes ahora superior a Dylan por esto? - preguntó cruzándome de brazos.
- Un poco, puede ser.
- Bueno entonces cállate y "disfruta".
Lucas me mira y sonríe, luego pasa su brazo por alrededor de mi cuello para seguir caminando así un rato.