Killing me softly

4.8K 611 299
                                    

⚠️ ABUSO S3XU5L Y FÍSICO ⚠️
Esta en tu consideración seguir leyendo este capítulo.

Estiró sus manos hacia el techo en un gesto aburrido, no vería a Luzu pues su próxima sesión era al día siguiente y eso lo tenía bastante desilusionado.
Abrazó la chaqueta azul que Luzu le había regalado e inhaló profundo, aún conservaba un poco de las feromonas del mayor y eso hizo su estómago revolotear.

Desde el primer día que lo vio entrar por aquella puerta algo se instaló en su pecho, no podía dejar de sonreír cada que estaba cerca y a comparación de sus parejas anteriores aquel sentimiento enfermo estaba sucediendo a la inversa, no quería comerlo, quería que el mayor lo comiera a él; sabía que Luzu escondía algo, por la manera en la que actúa o la forma en que se tensa al ver una mínima gota de sangre, solo eran suposiciones de él pero tan solo pensarlo hacía que se estremeciera de placer.
Se sentía fuertemente atraído de forma sexual y sentimental al mayor y no sabía cómo seducirlo, sus dotes de omega no servían pues eran incapaz de producir feromonas y su personalidad sumisa al estar con el mayor no le ayudaba en mucho; después de que se besaran el día de su cumpleaños ya no volvió a repetirse y Alex ya estaba poniéndose impaciente, solo esperaba que no estuviera jugando con él.

El ruido de los botones en la puerta lo sacaron de sus pensamientos y rápidamente escondió la chaqueta bajo su almohada, se sentó en su lugar curiosos de ver quién entraría y el alma cayó a sus pies cuando su peor pesadilla entró con una jeringa en la mano.

El ruido de los botones en la puerta lo sacaron de sus pensamientos y rápidamente escondió la chaqueta bajo su almohada, se sentó en su lugar curiosos de ver quién entraría y el alma cayó a sus pies cuando su peor pesadilla entró con una jeringa e...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El frío del lugar lo despertó. Su visión era borrosa, el aroma a alcohol y medicina lo marearon pero eso no impidió que analizara el lugar donde se encontraba; conocía aquella sala, el la llamaba la habitación blanca, donde uno de los médicos más sádicos y psicópatas del lugar experimentaba con él, algunas veces lo dejaba en paz por un par de meses e incluso un años entero, pero parecía que comenzaba a causarle celos que el menor tuviera visitas frecuentes de Luzu.

-Vaya vaya, miren quien despertó.- la voz ronca del mayor lo sobresaltó y miró a todos lados tratando de enfocar la vista.- que placer el volverte a ver, Quackity.

-No opino lo mismo.- una vez que localizó al peliblanco al fondo de la habitación dejó caer la cabeza resignado.

-Oh vamos, yo sé que me extrañaste.

-Dejate de mamadas Rubén.- escupió de forma brusca, estaba helando en la habitación y la bata delgada no hacía mucho por calentarlo, solo quería volver a su habitación/cárcel a ponerse su chaqueta y dormir.

Sintió la mano con el guante de látex en su pierna e instintivamente se tensó, esa no era una buena señal.

-¿Recuerdas que hicimos la última vez que estuviste aquí?.- dijo de forma suave el peliblanco, que seguía recorriendo la pierna del menor.

Alex asintió.- Me golpeaste, drogaste y laceraste para que contestara tus pinches preguntitas, las cuales ya te había respondido cientos de veces.

-Bien hecho.- palmeó el muslo del menor y se giró en busca de una jeringa y un trapo de tela que tenía sobre la mesa estéril.-Hoy haremos algo diferente.

TASTE OF ME | LUCKITY OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora