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Luzu ahora mismo estaba sirviendo té, fingiendo una sonrisa desde que había entrado a su humilde hogar, soportando gritos y palabras con un terrible acento mexicano que no se parecía en nada al de su agradable novio.

—¡PINCHE VIEJA ABUSIVA!—

El verdadero mexicano se cubría su cabeza para evitar que Staxx o como el le decía "Má" le diera con la chancla por un motivo que no terminó de entender.

Estaba extrañando la tranquilidad que siempre habitaba en su casa, no sabía cuánto más iba a aguantarse las ganas de noquear a staxx por molestar a su patito, para su desgracia no tuvo otra opción más que acercarse a "Pá" o más bien a Willy.

—Oye tú— hablo casi en susurró para no llamar la atención de su pareja.

—¿¡Qué pasa vato!?— en cambio el de boina verde no dejaba su papel de padre llamativo.

—Shh— puso un dedo en sus labios para indicarle silencio y discreción —Mira ya me tenéis hasta su puta madre, secuestra lo que tú quieras pero vete de aquí junto con tu esposa falsa—

No se le tuvo que repetir dos veces y con rapidez tomo a uno de los hijos patos, luzu notó como después de segundos Staxx también salió del hogar.

Todo había sido tan rápido que pensó en que el menor se preguntaría por las acciones de sus supuestos padres, más no fue así, con risas volvió a ordenar cofres como si nada hubiera pasado, cómo si uno de sus hijos no acababa de ser robado con permiso.

Luzu no sentía remordimiento, la casa volvía a ser silenciosa y tranquila, lo único que sonaba era Quackity, que de vez en cuando tarareaba alguna canción que no reconocía.

Extrañaría a calamardo solo un poco.

[^^^]

El sonido de platos cayendo y cosas siendo movidas interrumpió su agradable sueño, tocó el lado de la cama donde solía estar Quackity, nada, no estaba.

Alertado se levantó pensando que alguien acababa de entrar a robar y Quackity en un intento de defender sus cosas había sido lastimado.
Saliendo del cuarto pudo visualizar el resto de la casa en completo caos, todo tirado y roto, muebles que no estaban en su sitio habitual y lo peor de todo, no había rastro de su novio.

—¿¡Quacks!? ¿Quacks dónde estás?— busco detrás de los estantes y de hornos pero no había nada.

Saco una espada de hierro, listo para salir a buscar al híbrido de pato, antes de abrir la puerta de la casa escucho pequeños sollozos que lo hicieron volver pasos atrás.

En una compuerta que iba directo a una mina estaba la persona que tanto buscaba, en posición fetal con calamardo y Anselmo sobre el.

Un momento... ¿Calamardo?

Volvió a ver de reojo el collar de el pato y en efecto, había visto bien, era Calamardo.

—¿Quacks?— utilizo un tono suave para que el menor no se espantara por su reciente aparición.

—L-lusuuu— hablo entre hipidos y temblores —no está— se escondió más en si mismo.

—¿Quién no está Quacks?— sabía perfectamente quien había "desaparecido" pero tampoco se iba a delatar.

—Tenta Culos no está— volvió a sollozar, está vez un poco más fuertes, tanto como para hacer sentir mal al de sudadera negra —Revise de arriba abajo, moví todo, salí al patio y alrededor de la casa y ya no esta—

Luzu sintió cómo el sentimiento de culpa y el remordimiento se apoderaron de el lentamente.
Se acercó a quackity y sintiéndose un hipócrita lo abrazó y consoló hasta que el pelinegro quedó dormido por llorar.

Lo cargo al estilo princesa y sin problema lo llevo hasta la cama que compartían, tenía hasta que despertara para volver a tener al pato de tan singular nombre de vuelta en casa.

Esperaba que Willy estuviera de buenas.


















Hola panzones
Primero q nada una disculpa pq acabo de entrar a clases otra vez JAKDKS
Segundo nada los tqm, muchas gracias por votar y sobre todo por leer, se aprecia mucho <3

¡BOOM!         ~Luckity~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora