Verlo de nuevo fue como volver a nacer, por un momento creí que podría olvidar todo y comenzar con el a mi lado, pero una pequeña parte de mi me decía lo contrario, una parte aún se sentía traicionada, traicionada por haberme utilizado y haberme engañado de aquella manera.
- Amor – dice en cuanto bajo de la camioneta para mirarlo
- No te acerques – advierto cuando veo sus intenciones de caminar hacia mi
- No lo hagas – dice con lagrimas en sus ojos
- ¿Para que crees que tengo este maldito corazón Emir?– grito con rabia mientras señalo mi pecho donde esta la cicatriz del trasplante que me hice semanas después de la muerte de mi padre
- No – dice acercándose
- ¡Lo tengo para recordar que mi padre murió a manos del hombre que ame! – grito acercándome a él con rabia mientras las lagrimas caen por mis mejillas
- Jamás te traicioné, jamás lo hice – dice tomando mis manos entre las suyas
- ¡Tienes razón no lo hiciste, no mataste a mi padre por voluntad o conscientemente, pero lo hiciste desde que dejaste que esa mujer jamás se fuera de tú vida, lo hiciste desde aquel día en que decidiste que fuera tú mujer! – grito con enojo mientras me separo de él
- ¡Jamás lo quise así! - grita con desespero
- No eres culpable de su muerte, pero sabes de que si eres culpable – digo acercándome para mirarlo a los ojos – De matarme a mí, me enterraste el puñal lo mas hondo que pudiste – digo con rabia mientras las lagrimas salen de mis ojos al igual que las de él – Me quitaste la vida, junto a ese corazón se fueron mis ilusiones, mis esperanzas y mis sentimientos hacia ti dejando solo esto – digo sonriendo mientras me alejo y me señaló a mi misma – ¡Quedo una mujer sin límites, una asesina sin culpas, una mujer sin sentimientos a la que ya no le importa nada! – grito limpiando las lágrimas con enojo – Hare pagar a cada uno de los que me daño y tú Emir Rizzo ya comenzaste a pagar, si alguna jodida vez me quisiste por favor mantente alejado de mis asuntos y no los arruines – digo para alejarme de el y caminar hacia la camioneta donde Damien y mis hombres me esperan
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.- ¿Estás bien? – pregunta Seth sentándose a mi lado después de que me aleje en cuanto llegamos de la reunión con Emir
- No, no lo estoy – digo permitiéndome sentir y confesar por primera vez lo que en realidad siento- Lamento lo que dije hace unas horas, jamás desearía que murieras – dice sinceramente tomando mi mano entre las suyas y yo simplemente lo dejo
- Lo sé, se que me veo como una persona sin sentimientos, una mujer cruel, pero no lo soy Seth – digo mirándolo a los ojos mientras las lagrimas caen por mis mejillas
- Lo sé, sé que no lo eres – dice abrazándome
- Yo solo quería ser feliz desde que tenía ocho años – le confieso llorando en su pecho – Conozco a Emir desde que nací, fui comprometida desde mi nacimiento a ese hombre, crecimos juntos hasta mis ocho años, mataron a mis padres e Igor se hizo cargo de mí, me crío como a una hija, me mantuvo al margen de todo esto y yo era feliz, tenía una casa donde era feliz, éramos los dos contra el mundo, creamos una empresa en la cual conseguimos mucho con nuestro esfuerzo - le cuento- ¿En que momento Emir regreso a tu vida? - pregunta después de permanecer callados por unos segundos
- Volví a ver a Emir cuando fue a presentar el rechazo a dicho compromiso, me dolió y lo acepte, me metieron en esta vida y lo acepte, lo único que yo quería era ser feliz y pertenecer a algún lado, creí que estando con él lo lograría, me amaría y podríamos superar cualquier cosa juntos, pero no fue así, me equivoque, decepcioné a mis padres y lleve a la muerte a la única persona que me quedaba – digo desahogándome
- Tú solo querías hacer sentir orgullosos a tus padres y recuperar lo que era tuyo, no hay nada de malo en eso, hiciste lo que creíste correcto y puedo decir que así lo hiciste, hiciste un gran trabajo, nada de lo que paso fue tú culpa y se que ahora es difícil creer que puedes salir de todo esto, volver a ser feliz plenamente, pero también se que eres lo demasiado fuerte para lograrlo – dice acariciando mi mejilla con lentitud y cariño
- Me hubiera gustado mucho concerté hace algunos años atrás, tal vez tú hubieras sido al hombre que le entregaría mi corazón y con el cual hubiera podido vivir una vida tranquila y plena – digo mirándolo a los ojos
- Aún puedes hacerlo – dice dejandome sin palabras y aliento
- No puedo – digo bajando la mirada
- Claro que sí, sé que eres consiente de mis sentimientos hacia ti y ahora quiero que sepas que estaré dispuesto a hacer lo que sea para crear esa vida que tanto has luchado para conseguir, se que hay una salida y esa salida hoy te ofrece su mano para que la tomes y decidas ser feliz por primera vez sin contratos o ataduras – dice tendiéndome su mano
- Amaría tomarla y decirte que lo haremos, pero no puedo engañarte – digo negándome a tomarla
- Se que lo amas y es algo que no puedo recriminar ni tratar de dejar que lo sientas, pero esta salida te ofrece un respiro para ti y tal vez después una vida juntos – dice volviendo a tenderme su mano
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DOLOR Y SANGRE
RomanceCreció entre muerte, amor y dolor, pero el destino la llevo a creer que todo aquello había quedado en el pasado, que los abusos y los mandatos habían quedado como parte de su niñez, como simples recuerdos. Pero todo eso cambia cuando todo su pasado...