CAPÍTULO VI (EL TATUAJE)

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Estamos frente al pequeño local, lo único que ilumina la calle son las luces azul neón del anuncio que dice Tattoo.

—Aún puedes arrepentirte — dice la castaña.

—Ya estamos aquí.

Entramos en el lugar, en la pared cuelgan un montón de cuadros viejos, el lugar está vacío y solo se encuentra un chico acomodando algunas cosas en un estante.

—Hola — saluda una vez que nos ve a mí y a Emmyly.

—¿Estás libre? — pregunté y el tipo asintió.

—Si ya tienes en mente que quieres, si — respondió y siguió acomodando las cosas.

Nicholas es el nombre del chico que va a tatuarme. Es un tipo agradable y tiene la piel cubierta de tatuajes, la mayoría de colores.

Estoy dibujando lo que tenía en mente, siempre he sido bueno dibujando, y no es por alardear. Iba a tatuarme ese violonchelo, pero tenía que agregarle algo mío, y por eso había dibujado a un esqueleto tocando el violonchelo. Se lo muestro a Emmyly y su rostro se ilumina al verlo.

—Me encanta — dice sonriente.

—Nunca conocí a alguien que dibujara tan bien estando ebrio — dice Nicholas al ver mi dibujo.

Me quito la camisa para seguido tumbarme en la cómoda silla de cuero. Mientras tanto Emmyly es la encargada de buscar música para relajarme. Nicholas ha comenzado con el tatuaje, no siento más que una leve raspadura en la piel, supongo que no siento más que un mínimo dolor debido a lo tomado que estoy.

Problems — pronuncia Emmyly el nombre de la canción y después le da play. Comienza a caminar hasta mí mientras baila lentamente, me apunta y se pone a cantar:

"You and me we're not the same
I am a sinner, you are a saint"

Comienzo a reírme de su tonto baile, pero ella parece disfrutarlo mucho, Nicholas sigue tatuando mi torso y yo apreciando a una ebria Emmyly bailarina, de pronto es como si todo estuviera en cámara lenta, ella dando vueltas al ritmo de la canción y riendo, su hermosa sonrisa da alegría el lugar, y yo aquí solo observándola, poco a poco el dolor disminuye.

Me miro el tatuaje en el espejo y sonrió satisfecho, Nicholas era asombroso. Emmyly se para junto a mí y sonríe al ver el resultado.

—No puedo creer que si lo hayas hecho — dice y comienza a reír.

—Después tendrás que hacerte uno — dije y negó rápidamente con la cabeza.

—Yo me corto con papel y lloro, jamás soportaré un tatuaje.

Es plena madrugada, las calles ya están solitarias y solo estamos Emmyly y yo caminando mientras cantamos la misma canción que ella había puesto mientras me tatuaban, tomo a Emmyly del brazo y le doy una vuelta, la castaña se ríe divertida y después me da un leve empujón. Me vuelvo a pegar a ella y pasó mi brazo por sus hombros mientras seguimos el camino a su departamento.

Después de caminar algunas calles más por fin llegamos a su departamento, Emmyly está intentando abrir la puerta, pero no logra hacer que la llave encaje, comenzamos a reírnos por su torpeza y después de unos segundos por fin lo logró.

Entramos en su vacío departamento, aunque en esta semana la había convencido para que me dejara comprarle un sofá, después de tanto insistirle acepto y ahora ese sofá de cuero blanco se unía a la lámpara y el librero. Me tumbo en el sofá y Emmyly comienza a sacarse los zapatos.

—Me duelen mis pies — se quejó. Emmyly se tumbó al piso y comenzó a masajear la planta de sus pies.

—Te hizo falta bailar un poco más — me burlé y ella me lanzó su calceta. —¿Por qué tus calcetas son diferentes? — pregunto cuando veo que la calceta que me lanzó era completamente roja mientras que la que aún tenía puesta era gris con dibujos de gatos negros.

—Nunca encuentro los pares de mis calcetas — dice apenada.

—Eres muy rara — dije y se cruzó de brazos fingiendo indignación.

—Tú eres muy raro y por eso me gustas — dice y se levanta del piso para seguido tumbarse en el sofá junto a mí. —Siento que guardas muchas cosas y espero que algún día puedas contarme algo.

"Guardas muchas cosas", eso me hizo recordar de nuevo todo lo que había sucedido, los músculos de mi mandíbula se tensaron y entonces Emmyly tomó mi mano. Volteo a verla y sus ojos brillan más de lo normal. Ahora mismo el único café que me mantenía despierto era el de esos grandes y brillantes ojos. Pero aun así no podía sacar de mi mente aquellos ojos verdes que me recordaban a las calurosas tardes de verano en Australia.

—Deje a mi primo en coma — confesé. Quería contarle todo a Emmyly, de verdad quería hacerlo, pero hablar sobre Auden no era fácil, siempre terminaba llorando y Mark es testigo de eso.

Aun así esa madrugada decidí contarle todo a Emmyly, le hablé solo lo necesario de Auden, no entre mucho en detalles, solo lo básico. Me enamoré de Auden, ella estaba con alguien más, pero me quería a mí, mantuvimos una relación en secreto y salió mal, nos descubrieron, ese "alguien más" con el que ella estaba era mi primo, y no termino bien.

Emmyly se mantuvo atenta mientras yo hablaba y jamás me interrumpió, cuando termine de explicar lo culpable que me sentía por haber empujado a Noah, ella tomó mis manos e hizo que la mirara directamente a los ojos solo pare decirme

—Eddie, fue un accidente.

Eso era todo lo que siempre necesité, que alguien me dijera que no fue mi culpa. Y esa noche Emmyly Spencer lo había hecho.

Holiii

Decidí cambiar el tatuaje de Eddie, ya que me gusto la idea de agregarle algo de su esencia.

¿Cómo sobrellevan esto?
Cuéntenme en los comentarios 💔

Lejos de Australia #2 [PROXIMAMENTE EN FÍSICO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora