CAPÍTULO VIII (MENTIR)

834 97 400
                                    


Holaa, yo se que dije que lo subiría ayer, pero les juro que me ha costado escribir este capítulo, la mente de Eddie está hecha un desastre y me tomo tiempo poder redactarlo, este capítulo es algo largo así que tómense su tiempo 😔


Kate está mirándome emocionada y eso me hace sentir como en casa.

He vuelto a Australia, pero no pienso quedarme mucho, mañana mismo estare  de regreso a Londres.

—Te has cortado el cabello — fue lo primero que Kate dijo.

—Lo hice.

—Vámonos — dice mientras toma mi brazo —Te voy a preparar algo calentito de tomar.

Kate conduce su pequeño carro, mientras yo voy observando todo por la ventana, el invierno sí que pego este año, el cielo estaba nublado y los pájaros ya no hacían tanto ruido.

Vamos pasando por la vieja tienda, la tienda en donde empezaron mis conversaciones con Auden, por un momento nos veo a los dos, a mi recargado en la camioneta mientras fumaba y Auden observándome, así fue la segunda vez que nos volvimos a ver, recuerdo que ella llevaba un jugo de sandía en las manos, el cabello algo desordenado, un short de mezclilla y una blusa negra de tirantes. Fueron buenos tiempos.

Entramos a casa y entonces me doy cuenta de lo mucho que extrañaba estar aquí. Dejo mi mochila sobre el sofá y camino tras Kate hasta la cocina.

—¿Y cómo te está llenado en Londres cariño? — pregunta Kate mientras toma dos tazas de la alacena.

—Bien — me limité a responder.

—¿Has visitado a tu padre? — pregunta y niego lentamente con la cabeza.

—No me gustan esos lugares.

—Bueno, igualmente Ed saldrá de ese lugar en dos meses — informa mientras vacía el chocolate caliente a la taza.

—Grabé una canción con la disquera de Louis Novacek — dije y su boca se abrió en sorpresa.

—¡¿Es en serio?! — inquirió emocionada y asentí —Estoy muy orgullosa de ti Eddie — Kate se acerca para darme un fuerte y confortable abrazo.

—Gracias tía.

—¿Cuándo sale? — pregunta y toma una de las tazas para enseguida entregármela.

—En una semana.

—Me alegro por ti cariño — Kate le da un sorbo a su chocolate sin quitarme la mirada.

—¿Cómo está Noah? — me atrevo a preguntar y sus labios forman una fina línea.

—No hay mucho avance — responde y deja la taza sobre la mesa. Le doy un sorbo a mi taza y siento como el chocolate baja calentando cada parte de mí.

—Kate, no voy a quedarme mucho.

—¿Cuándo te vas? — pregunta decepcionada.

—Mañana — respondí.

—¿Por qué no te quedas toda la semana? — propone y niego lentamente con mi cabeza.

—Ya he comprado el boleto de regreso — respondí y soltó un leve suspiro.

—Solo prométeme que vendrás más seguido — pide y me mira directamente con esos brillantes e imponentes ojos azules.

—Lo haré — dije y esbozó una amplia sonrisa. —Kate, tengo que salir a hacer algo — Dejo la taza sobre la mesa.

—¿Vas con Auden? — preguntó.

—Quizá — respondí.

—Te veo más tarde — dice y me deja un beso en la mejilla.

Lejos de Australia #2 [PROXIMAMENTE EN FÍSICO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora