CAPÍTULO I

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—Me iré un tiempo.

Aún no estaba seguro de querer irme sin decir nada, por eso estaba aquí fumando un porro con Jack, estamos en su patio trasero sentados en una banca de picnic. Jack deja salir una gran nube de humo y voltea a verme.

—¿De qué hablas? — pregunta desconcertado.

—Me voy a Londres — respondí. El moreno desvió su mirada a otro lado y comenzó a reír sin ganas.

—¿Por qué? — cuestiona y le da otra calada al cigarro de marihuana.

—No puedo estar aquí — musité — Auden me odia, deje a Noah en coma, mi vida es una mierda, necesito comenzar de nuevo.

—¿Y qué hay de mi? — Jack voltea a verme directamente y no se que responder a eso.

—Entraré en la escuela de Música — dije y Jack esbozó una sonrisa.

—Me parece bien — responde después de unos largos segundos de silencio.

—¿De verdad? — Aún que no quería aceptarlo, tenía la esperanza de que Jack me hiciera ver lo que dejaría aquí si me iba, pero el solo me había dicho que le parecía bien.

—Hazlo Eddie, no te estanques — dice y me pasa el porro.

—Gracias — agradezco un poco desanimado por su consejo. Pero quizá Jack tenía razón, no podía estancarme.

—¿Le dirás a Auden? — inquiere y niego repetidas veces con la cabeza.

—Aún no lo sé — respondí. Era la verdad, no sabía si decirle a Auden que me iba, que me iba sin ella. Además estoy seguro de que ella ni siquiera quiere verme.





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Han pasado poco más de tres meses desde la noche en que partí de Australia. Había huido del problema. Aún resuenan sus palabras en mi mente, aún duelen como una estaca directo al corazón.

"Ojalá nunca te hubiera conocido"

Sabía que Auden estaba molesta, estaba nerviosa y tenía miedo, pero yo también lo estaba, yo también necesitaba que me dijeran que todo iba a estar bien, que todo había sido un accidente, necesitaba que Auden me dijera eso, pero en cambio solo me hizo sentir culpable, esa noche ella había roto mi corazón.

Al principio pensé en llamarla y decirle que me iba, tenía la esperanza de que ella me pidiera que me quedara, pero al final no lo hice, no le dije nada y simplemente me marché.

Ahora estoy aquí, estoy en Londres, sentado frente a la ventana de el viejo departamento que he rentado, prendiendo un porro, veo a través de las persianas mientras pienso en que estará pasando con Auden, no sabía nada de ella, había perdido mi teléfono en el aeropuerto de Darwin y tuve que comprar uno nuevo, no recordaba su número así que jamás pude llamarla.

Desde hace mes y medio note como Auden seguía escabulléndose en mi rutina diaria, escuchaba deftones todo el tiempo, especialmente "Rosemary" pues sabía que era su canción favorita. También "You're beautiful" de James Blunt se había convertido en la canción que más escuchaba, me hacía viajar a él día que tuvimos sexo en mi camioneta y después sonó esta canción, Auden se burló de mi gusto culposo, daría todo por revivir ese momento.

Muchas cosas en mi habían cambiado, no solo mentalmente, también físicamente hablando, había cortado mi cabello, iba al gimnasio para distraerme y había comenzado unas clases de box para desquitar la ira acumulada.

Comencé a estudiar en la escuela de música más aclamada de Londres (en parte fue la razón de que cambiara mi forma de vestir y el como llevaba mi cabello, las personas aquí te miran raro cuando tienes un estilo diferente y además eres el más callado de la clase), estaba orgulloso de haberlo logrado, después de todo había comenzando a estudiar algo que me apasionaba.

Durante este tiempo también había creado una rutina, una rutina que se ha vuelto monótona y aburrida.

Me despierto a eso de las diez de la mañana, me baño y me voy a la escuela, tomo mis clases y después regreso a casa, me siento en el banco frente a mi ventana y me fumo un porro mientras pienso en ella, cuando la noche llega voy al bar que está a unas cuadras y bebo algunos tragos mientras platico con Mark, Mark es un viejo de algunos cincuenta años, es el barman del lugar, ese hombre me soporta todas las noches y escucha mi historia con Auden una y otra vez, no entiendo como no a renunciado.

Mark es mi único amigo, soy el hombre más antisocial del mundo, siempre estoy solo, las conversaciones que tengo con mis compañeros de clases son realmente cortas, ninguna pasa de preguntar apuntes o solo dar las buenas tardes.

Extrañaba lo que era de mi vida, extrañaba hablar con Jack o simplemente pasar el rato fumando, extrañaba los desayunos que Kate me preparaba, incluso extrañaba lo grosero que Noah podía llegar a ser conmigo, Noah, todos los días pensaba en él y en lo que le hice, jamás me lo perdonaría, y estoy seguro que cuando él despierte, por que yo se que él lo hará, tampoco va a perdonarme, pero me conformaría con que él siguiera su vida.

Sin embargo lo que más extraño de mi vieja vida es a esa chica de cabello negro, mi mejor amiga de la infancia y la mujer de la que estaba enamorado, no podía sacarla de mi cabeza, ella era como esas canciones de cuna que una vez que las escuchas permanecen en tu mente.

La extrañaba tanto, pero sabía que debía continuar con mi vida, debía seguir adelante, debía soltar a Auden, dejar de pensar en ella y comenzar a vivir mi nueva vida.

Supongo que ella y yo no estábamos destinados a durar.



Heeey, por fin lunes, este capítulo ha estado corto, es por eso qué hay doble actualización, así que desliza y sigue leyendo ✌🏻

(La canción que les deje de Post Malone describe perfectamente lo qué pasa por la cabeza de Eddie)

Lejos de Australia #2 [PROXIMAMENTE EN FÍSICO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora