Love Grows °Rasmus Andersen°

♪♪⁸

EMPECÉ a mover a Rasmus con fuerza ignorando los gritos de su hermana tras la puerta mientras que algunas lágrimas salían de mis ojos ya que no se movía
¿Lydia? -murmuró a lo que yo suspiré aliviada para luego abrazarle con fuerza-
Lydia, acompaña a Rasmus a la sala -nos dijo Simone haciendo que agarre su brazo con delicadeza para ayudarlo a sentarse y salir de allí- escúchame, ha sido un accidente, ¿vale?
Rasmus, sigue caminando. Tranquilo -murmuré tirando de su mano para que dejase de mirar los cuerpos en el suelo-
¿Están muertos? -dijo Rasmus cuando llegamos al otro lugar- ¿He sido yo? ¿Ha sido culpa tuya? Decídmelo
Escucha, se han infectado con una muestra -dijo Simone a lo que yo me mordí la lengua para no decir la verdad-
Eso es mentira. ¿Qué ha pasado, Lyd? -me dijo Rasmus-
Se han infectado con una muestra -repitió Simone. Yo solo entrelacé mi mano con la de él y apoyé mi cabeza en su pecho tratando de calmarlo-
No lo entiendo. No me acuerdo. No me acuerdo -dijo él a lo que yo solo besé su pecho tratando de calmarlo- mientras Simone seguía tratando de decirle que no fue su culpa-
Tranquilo. Sigo estando aquí. Estaremos bien -le dije acariciando sus brazos- todo mejorará. Estamos juntos en esto...
Estamos juntos. Estamos juntos. Estamos juntos... -repitió llevando sus manos a mi espalda para luego acariciar esta-

ME desperté viéndole frente al espejo masajeando su cuello.
Salí de la cama con cuidado para luego ponerme tras él y besar su espalda desnuda para luego pasar mis brazos por su cintura
¿Cómo estás? -susurré aún media dormida con mi mejilla en su espalda pero me separé de esta al ver a una chica rubia y con una máscara de oxígeno mirándonos. Rasmus agachó la mirada hacia mí para luego volver a mirarla-
Hola. ¿Quién eres? -le preguntó cuando me vio asentir. Presioné el botón para que nos pudiera escuchar mejor- ¿Quién eres?
Has matado a mi hermano -dijo ella- has sido tú
No he sido yo. Ha sido un accidente. Se le ha caído una muestra -dijo Rasmus pasando su brazo hacia atrás rodeando mi cintura para ponerme delante de él-
Sí, has sido tú. Tu hermana es una mentirosa. Y tu novia también. ¡Has sido tú! -siguió la rubia para luego irse justo cuando llegó Fie-
Os traigo agua -dijo ella haciendo que vaya hacia el pequeño cajón y agarre las botellas de agua- luego vendré a verlos
Vale -dijo Rasmus-
Gracias -le dije a lo que ella asintió y se fue. Me giré hacia Rasmus y suspiré- solo quería protegerte. Estabas asustado, y con razón, no quería que tuvieras miedo. Yo también estaba asustada, no sabía que hacer... Solo fui hacia ti y todo se paró y...
Lydia -dijo Rasmus para luego sonreír levemente y estirar sus brazos hacia mi- está bien. Lo entiendo
¿De verdad? -pregunté dando pequeños pasos hacia él-
De verdad -asintió haciendo que me avance hacia él y le besé-
¿Estamos bien? -le pregunté-
Muy bien -asintió para volver a besarme y tirarme a su lado en la cama haciéndome reír-
Oye, no estaría mal que me dejases un poco de agua -me burlé al ver las botellas vacías. Él agarró una botella y tiró un poco menos de la mitad en mi cara. Cerré los ojos escuchando su risa para luego empezar a mover mi cabeza como un perro para salpicarle con el agua- eso ha sido traición, Rasmus. Se supone que deberías de haberme dado una botella con toda tu amabilidad
¿Sí? -dijo con diversión mientras yo terminaba de secar mi cara con mi camisa para luego ir más a su lado-
No. Si no seríamos como los demás aburridos -me encogí de hombros. Rasmus sujetó mis mejillas para luego plantar sus labios encima de los míos-

VOY a ver si encuentro algún arma chula o algo con que defendernos -me dijo Patrick al otro lado de la puerta mientras Rasmus estaba acostado en la cama mirando el techo-
Está bien. Ten cuidado -le dije- quiero verla cuando la encuentres
Esta bien -asintió para luego quedarse asintiendo con la cabeza durante un rato mirándome-
¿Estás bien? -le pregunté-
Eso te lo tendría que preguntar yo -me dijo a lo que suspiré rodando los ojos-
Estoy bien, Pat -le dije apoyando mi frente en el cristal haciendo que él haga lo mismo- pronto esto terminará. Volverá a ser como antes
Cuídate -dijo separándose para luego mirar a Rasmus- y más te vale que la estés cuidando bien aquí dentro
Sí -asintió él-
Nos vemos -le dije a Patrick apagando el altavoz-
Nos vemos, Lyd -dijo para luego apagarlo e irse. Me quedé viendo cómo se iba para luego acostarme al lado de Rasmus-
¿Todo bien? -me preguntó poniéndose de lado para verme. Giré mi cabeza para verle y asentí- sabes que me puedes contar lo que quieras
Lo sé. Estoy bien. Solo pensando -asentí-
¿En qué? -sonrió Rasmus poniendo su mano encima de la mía-
En lo afortunada de haberos encontrado -asentí. Él beso mi frente y me abrazó hacia sí mismo-
Yo también -asintió. Levanté mi cabeza y dejé un pequeño beso en sus labios- otro
¿Otro? -pregunté a lo que él asintió haciendo que le dé otro beso-
¿Otro? -preguntó a lo que yo le besé y así nos pegamos un rato hasta que ella apareció de nuevo. Me levanté de la cama y fui hacia la puerta-
Sin mi hermano, no puedo sobrevivir -dijo ella-
¿Y qué quieres que yo haga? -pregunté confusa mientras Rasmus se levantaba e iba a mi lado-
Quiero que me matéis -dijo la rubia-
¿Por qué quieres morir? -dijo Rasmus. A lo que tuve un mal deja vu-
Estoy enferma. Tengo un problema inmunológico -dijo ella para luego quitarse la mascarilla-
Es mejor que te vayas -le dijo Rasmus-
No hasta que me enseñes como mataste a mi hermano -dijo ella- haz lo mismo conmigo
Niña, no abras la puerta -le dije al ver que lo estaba haciendo-
Para. ¡Que no la abras! ¡Quieta! -le dijo Rasmus- ¡Para, joder, para! ¡No sabes lo que puede pasar!
Hazme lo que le hiciste a mi hermano -siguió ella entrando a la habitación mientras que veía las líneas negras en el pecho y cuello de Rasmus- no quiero estar sola
Mira que te gusta molestar -le dije pero ella seguía hasta que Rasmus sacó el virus haciendo que al fin se fuera- Rasmus, tranquilo, ya está. Sh... No pasa nada...
Lydia -me llamó mientras poco a poco la oscuridad de iba. Entrelacé nuestras manos para luego abrazarle. Segundos después ya estaba más tranquilo mientras ella nos seguía mirando-