Joaquín: Buenos días alumnos.
A: Buenos días maestro Bondoni. - Cantaron al unísono.
Joaquín: Hoy tengo muchas actividades por hacer, están preparados para una mañana de diversión y aprendizaje.
A: ¡SIIII!
Joaquín: Pues comencemos...
Leidy: Hey colega, ¿cómo estás?
Joaquín: Mejor, ¿quieres que te dé un aventón?
Leidy: Oh no hace falta, Ely pasará por mí. - Sonrío, al ver la cara divertida de Joaquín. - Es sólo una amiga, nos estamos conociendo en realidad.
Joaquín: Bueno, supongo que no serás más la maestra soltera codiciada para las madres y padres de familia. - Ambos sonrieron.
Leidy: Supongo que no. - Murmuró volteando por toda la oficina para asegurar que no hubiese nadie. - ¿Cómo están las cosas con Emilio? - La sonrisa de Joaquín se esfumó reemplazándola con una mueca y tristeza en sus ojos. - Supongo que nada bien.
Joaquín: Se ha ido hace 2 semanas y no hemos hablado desde entonces, jamás habíamos durado tanto enojados, siempre, uno de los dos dá el primer paso, pero ahora no ha sido así. - Se encogió de hombros, resignado. - Cómo sea.
Leidy: Siento escuchar eso hermano.
Joaquín: No te preocupes, no quiero arruinar tu cita con mis problemas amorosos.
Leidy: Hey, estoy aquí para lo que sea ¿de acuerdo?
Joaquín: Gracias. - La abrazó.
Leidy: Debo irme, nos vemos el lunes, cuídate.
Sábado por la tarde y Joaquín estaba echado en su sofá con palomitas en su regazo, un refresco con mucha azúcar y dulces tirados a su alrededor, estaba sintiendo una pequeña depresión por la situación de Emilio, pero no iba a marcar, ésta vez dejaría que su orgullo ganara, porque sabía que él no era el problema sino Emilio.
Estaba buscando una película hasta que encontro "10 cosas que odio de tí" ese autor le hacía recordar a su prometido, el cabello castaño y ondulado, ojos ardientes y esa actitud de hombre malo, pero Emilio era sin duda alguna más dulce, con un beso hacía olvidar en dónde estaba parado, inclusive olvidaba el tiempo, sintiendo sólo sus húmedos y cálidos labios volaba, extrañaba esa sensación, hace mucho tiempo que no lo sentía. Reaccionó al sentir las lágrimas cayendo con lentitud, iba a llamarlo, que más daba su orgullo, necesitaba tener paz interior y sabía que hablando con él todo estaría bien.
Buscó su celular y lo encontró debajo de una bolsa vacía de papas fritas. Suspiró y marcó rápidamente el número de Emilio.
Un timbre...
Dos timbres...
Después, descolgaron del otro lado.
Escuchaba su respiración, suponía que el rizado no quería hablar con él después de no haberse despedido, quedándose encerrado en la oficina sin ni siquiera decir "adiós".
Emilio: Joaco ¿estás ahí? - Volvió a la realidad. Había olvidado hablar.
Joaquín: Hola. - Dijo tímido, no sabiendo que decir. - ¿Cómo estás?
Emilio: Pues, estoy... triste. - Murmuró, a Joaquín se le partió el corazón.
Joaquín: Supongo que estoy de la misma manera, no puedo soportar estar así, por eso te marqué.
Emilio: Iba a hacerlo también, sólo que no estaba seguro si tú contestarías en realidad.
Joaquín: Lo lamento.
Emilio: Yo lo siento. - Dijo rápidamente. - Soy un tonto por haberme ido de esa manera, ni siquiera hablamos y yo me sentía tan mal que dudaba de ir a ese viaje, pero ya sabes, perdón Joaco.
Joaquín no dijo nada estaba disfrutando de la voz de su novio, esa voz que no había escuchado durante 2 semanas, anhelaba tenerlo en sus brazos y darle besos hasta el último punto de su cuerpo.
Joaquín: Te amo, nunca lo olvides.
Emilio: Y yo te amo a tí cariño.
Se había quedado dormido escuchando cómo Emilio le cantaba, que malditamente cursi es eso, sonrió, bueno ahora estaban bien, a pesar de todo, sentía que las cosas con Emilio ya iban a mejorar. Buscó su celular y vió la hora, 10:30 de la noche, era demasiado temprano, pero sería mejor ir a la cama, pues mañana debía terminar todos sus pendientes de la escuela, tomó la manta y se fué hacía su habitación.
No sabía cómo sentirse, era una situación extraña la que estaba pasando, tenía más días malos que buenos desde hace tiempo, debía cambiar de actitud, ver a su novio y aprovechar ese tiempo para amarlo y cuándo se tenía que ir, apoyarlo en todo momento, pero no era fácil, estaba tan acostumbrado a él, a sus atención, a su amor, sus besos y abrazos, que separarse de la idea de novio 24/7 era difícil, no sabía si resistiría alguna otra decepción, confiaba en que Emilio aprendería de sus errores.
Seguimos..........
Nos vemos AlbertXioW.
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Dreamer // Adaptación Emiliaco
FanficEmilio es un exitoso YouTuber. Y Joaquín sólo quiere apoyarlo aunque por dentro se esté quebrando. Ésta historia está basada en la manera de trabajo de "Luisito Comunica". Adaptación Autorizada. Todos los créditos son de la Autora original @Cinmcc...