Deku villano.

Capítulo 33: El festival cultural.

—Falta poco para el festival y todavía tenemos mucho que perfeccionar. ¡Grupo, debemos esforzarnos!

—Ahora que es la representante es mucho más estricta que antes— dijo Sero.

—Si, pero es bueno verla tan animada— dijo Jiro.

—Oye, Yaoyorozu, tomemos un descanso. No es bueno sobre exigirse— sugirió Bakugou.

—Pero todo tiene que quedar listo para el festival.

—No te preocupes, todo saldrá bien. Regresemos a los dormitorios y descansemos, también podemos discutir sobre algunos detalles de la coreografía.

—¡Ya casi todo está listo! ¡No puedo esperar para que sea el festival!— dijo Mina.

—Nos hemos esforzando mucho, espero que todo salga bien— dijo Kaminari.

En una casa, una chica de pelo rojo estaba viendo videos de un criminal que empezaba a hacerse popular.

—¡Ahh, eres genial, Gentle! ¡Eres una estrella!

—La Brava, ¿has subido el video?

—Así es, Gentle. Borraron nuestra cuento otra vez, pero volví a subir todo los videos desde el primero.

—No esperaba menos de ti. ¿Estas lista para ir a la grabación de hoy? Pero solo después de tomar esta taza de té.

En la azotea de un edificio.

—La Brava, estos últimos días las visitas de los videos se han hecho cada vez menores. Y no solo se debe a que la gente no comprende mis ideales.

—No te preocupes, Gentle. Yo te ayudaré a que sigas creciendo.

—Gracias. Pero necesito hacer algo grande para que la gente empiece a mirarme, deben saber de lo que soy capaz. Así que prepárense, querida audiencia, porque dejare mi huella con este próximo acto.

Al terminar de grabar, los dos criminarles regresaron a la casa de Gentle. En donde se prepararían para infiltrarse en la UA. Y así, pasaría una semana en donde Gentle había estado trazando el plan a seguir.

(El plan de Gentle es el mismo, este video lo corta mucho para que no le tiren el video, pero si quieren verlo es del 4:08 a 5:27)

El del festival cultural, la agencia de Gunhead había recibido una llamada de la policía debido a que había un robo de un villano en un restaurante, que había tomado a los clientes como rehenes.

—¿Quién demonios iría a robar a un restaurante?

—No intentes comprender la mente de los villanos, solo te causará muchos problemas— respondió Gunhead a su subordinado.

Al llegar al restaurante, había varios policías que ya habían llegado y estaban alrededor del restaurante.

—Prepárense y recuerden tener cuidado, hay civiles adentro.

Las ventanas del restaurante estaban cerradas, imposibilitando que pudieran ver que era lo que pasaba adentro.

—¿Quién está al mando?— preguntó Gunhead.