Infernal [volumen 1: la creación]©

Prologo

La diferencia entre la teología y la ciencia es muy notoria, la parte científica siempre busca el lado lógico de las cosas, siempre tiene una explicación para lo más mínimo, el mejor ejemplo es la evolución, la ciencia buscó una explicación para la vida en el planeta, de allí se dio la conclusión de que los simios fueron evolucionando poco a poco, hasta de esa forma llegar al humano moderno. Lo teológico o la teología por otro lado siempre va a tener creencias en lo sobre natural, y con sobre natural no me refiero a un mal, si no a una fuerza que no se puede explicar o mejor dicho es más fuerte que cualquier cosa científica, la teología mantiene su creencia en aquellas fuerzas externas que siempre son un misterio, que aunque no se pueden ver tampoco se puede demostrar la forma en que sucedió, de allí son los milagros o quizás cosas que no se pueden demostrar como la existencia de un ser supremo.

(Ojo, no estoy queriendo decir que no existe ni que no tengo fe en ello, simplemente aclaro que no se ha podido demostrar que exista)

La vida al ser tan curiosa simplemente buscamos lo más mínimo para creer en ello. Los que creen en la evolución aun tendrán la duda: ¿Por qué llegaron esos organismos a la tierra?, por otro lado los que creen en la creación del hombre por parte de dios simplemente ignoran lo que oculta la misma iglesia.

El lado científico y teológico se combina al momento de la ley, cuando en el jurado aceptamos la existencia de dios, porque al momento de hacer un juramento lo hacemos, juramos por dios decir la verdad, y si mentimos sabemos que es pecado al violar uno de los diez mandamientos, pero es hora de aceptar también la existencia del diablo.

Hablemos de lo teológico esta vez, olvidemos lo científico y lo legal, hace mucho tiempo, pero mucho tiempo a tras, y con mucho les hablo de unos cien millones de años, o quizás mucho más atrás, solamente existía una fuerza suprema, una única figura de mando: dios. Los primeros seres creados por dios no fuimos los humanos, ni las plantas, ni mucho menos las bacterias, fueron los ángeles, creados por dios para cumplir su propósito (aunque muchos dicen que fueron creados al mismo tiempo), para seguir sus órdenes, fueron los ocho primeros entre todos: miguel, Gabriel, Uriel, Rafael, Chamuel, Jofiel, Zadquiel y Lucifer.

Miguel: el mayor de los hermanos, uno de los más fuertes de todos, solamente los puros de corazón son los que pueden resistir y portar la divinidad de su espíritu

Gabriel: uno de los mas rebeldes no contra su padre si no contra sus hermanos, no le gusta recibir órdenes, uno de los más fuertes del cielo.

Uriel: especialista en crear tormentas, destrucción, uno de los eslabones más fuertes y sin compasión al momento de luchar.

Chamuel: creativo y bondadoso con los seres humanos, quizás el más comprensivo de todos los hermanos

Jofiel: siempre apoyaba a su hermano Lucifer, pero nunca se rebelaba ante su padre, y aunque fuera el más cercano a su hermano nunca aprobó que se rebelara en su contra.

Zadquiel: amoroso y comprensivo, quizás el más parecido a su hermano Chamuel pero al mismo tiempo con un carácter único.

Lucifer: su nombre significa luz, el ángel más hermoso de todo el cielo, siendo también el más rebelde contra todos.

Todos eran hermanos, creados por un mismo dios, un mismo padre, pero luego dios haría algo diferente: crearía un paraíso, un paraíso que para muchos seria el verdadero infierno.

y uno de los hermanos... decidiría ser su adversario.