Mi plan acababa de comenzar, pensé y pensé durante horas cómo lo haría, qué haría, y esperé hasta la hora de la cena, cuando Fran vino otra vez
Fran dejó el plato, y rápidamente quiso salir, pero no le dejé
-¿Dónde vas tan rápido? - dije acercándome peligrosamente a él
-¿Qué intentas?
-Sabes que no puedes resistirte...- lo acorralé contra la pared y él se tensó
Nuestra distancia era mínima, hasta un punto en que oía sus propios latidos, que por cierto estaban acelerados, al igual que los míos
Entonces cogí su máscara y se la intenté quitar, pero él no se dejó
-Ya te he visto sin ella, ayer te la quitaste- dije volviendolo a intentar
-¿Qué?- dijo asustado y apartando mi mano de su cara-. Explícame qué pasó ayer.
Me senté en el colchón y él se puso a mi lado, y le conté exactamente lo que había pasado, no le iba a ocultar nada
-Así que..te besé, y además ahora ya sabes mi identidad.Mierda.- dijo pegándole un puñetazo al suelo
Le miré asustada cuando pegó un golpe al suelo, su fuerza era tal que hasta mi cuerpo tembló.Él estaba asustado, lo podía notar
-No necesitas ocultarte, confía en mí
-Pero no me puedo fiar...Puedo acabar en la cárcel
Sin que él se percatara, pude ver sus ojos vidriosos a través de la máscara
-Creo...que ha pasado algo más ¿estoy en lo cierto?
Él no respondía, yo sentía que debía ayudarle, lo noté tan frágil, como si en cualquier momento pudiera romperse a pedazos.Estaba empezando a mostrar como era realmente, sin capas de frialdad, y yo quería, sentía en un pequeño hueco de mi corazón, que debía ayudarle...
Se supone que mi plan tenía que ser claro y conciso, y no empezar a dejarme llevar por sentimientos, pero sin poder evitarlo, ese sentimiento de empatía me inundó el alma, y tenía que hacer algo para saber el motivo de su tristeza
-Oye, sé que seguramente no confies nada en mí, lo comprendo.Soy una desconocida a la que has secuestrado, pero no te hará daño desahogarte...
Se me quedó mirando fijamente, no sabía que decir.Supongo que no es algo fácil para él estar en un momento de debilidad frente a mí, cuando se supone que el secuestrador tiene que ser fuerte, controlador y dominante, pero en ese momento era como un niño al que sus padres han abandonado, sus ojos lo podían transmitir
-No puedo... Lo siento.
Tras sus palabras, se levantó y fue directo a la puerta, y salió cerrándola de un golpe
A este paso mi plan se quedaría en un simple pensamiento sin realizar.
Y no quería eso, quería ser capaz de ejercer en él el control suficiente para conseguir que me dejase escapar... Pero sin embargo, al verlo así de triste, fue como si una aguja se clavara en mi corazón
No hay más forma de explicarlo que vivirlo, y yo lo estaba viviendo, estaba empezando a sentir florecer los primeros sentimientos, aunque aún no era apenas consciente de ello.
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Sólo aquí
Romance"Que pasaría el resto de mi vida aquí sólo estando contigo" Alma es una chica de 16 años, acostumbrada a los lujos de una adolescente del siglo XXI . Le ocurre algo que dará un vuelco a su vida. Un día de camino al instituto, unos malhechores están...