Reencuentro

4.6K 387 96
                                    

Dos niños de 5 y 7 años jugaban por los pasillos de una gran mansión. Ella llevaba un vestido rojo y él un pequeño traje negro con corbata. Estaban en una fiesta que sus padres habían organizado, se habían aburrido pues eran los únicos niños en ella así que, sin que nadie los viera, salieron corriendo hacia la parte de atrás de la mansión.

—¡Espérame, Christopher!

—Entonces corre rápido, Rachel.

Pasaron un gran pasillo hasta que encontraron la puerta trasera, el niño, que era un poco más alto que la niña, la abrió. Salieron de la casa y fueron a sentarse cerca de la piscina.

—Eso está muuuuy aburrido. —dijo la ojiazul .

—Lo sé, los adultos son aburridos. —el chico se cruzó de brazos haciéndolo ver muy tierno.

—Y amargados.

Ambos asintieron.

La niña se quitó los zapatos para meter los pies al agua y suspiró triste, algo que él notó.

—¿Qué pasa?

—Escuché a mamá y a papá hablar en la mañana... creo que nos vamos a mudar. —murmuró triste.

—¿Qué? ¡No!

Rachel era la única amiga que tenía, a la única que aguantaba, en realidad. Cada vez que alguien se acercaba a él para intentar hablar, Christopher los ignoraba. Así que la idea de que ella se fuera, no le gustaba.

—Yo no quiero irme, yo estoy bien aquí. —hizo un puchero— A de más... si me voy, ¿a quien voy a molestar?

Christopher la miró molesto, ella siempre le jugaba bromas que sólo lo hacían enojar. Todavía no se le olvidaba la vez que le pintó las cejas con marcador verde permanente y tuvo que ir a la academia de ese modo porque no se quitaba.

—Si me voy, ¿me extrañarás?

—No te irás, no lo permitiré. Hablaré con mi papá para que te quedes aquí.

Él y el padre de Rachel eran mejores amigos, así que si le pedía que Rachel se quedara en Londres le diría que estaba bien ¿no?

—Eso espero... ¡Oye!

El niño de ojos grises salió corriendo y riendo cuando le jaló un mechón de cabello a la niña. Ella rió y lo persiguió por todo el patio trasero.

Hasta que sus madres los encontraron y los regañaron por haberse ido de la fiesta sin decirle a nadie.

•••

No habían logrado convencer a nadie.

Y había llegado el día en el que la familia James se iba de Londres.

Rachel había llorado mucho cuando se despidió de Christopher, él también se veía muy triste cuando le tuvo que decir adiós.

Te voy a extrañar. —le había dicho el pequeño Chris cuando la abrazó.

—Yo también a ti, tonto.

Su padre la cargó para subirla al auto que los llevaría al avión. Rachel lloraba en su hombro, y antes de que la subieran al auto, miró al niño y le dijo adiós con su manita.

Christopher subió a su habitación molesto. Su madre se quedó con él toda la noche, pues aunque no lloró como lo hizo su amiga, si la pasó mal.

•••

Años después...

Rachel se encontraba en un restaurante junto con su novio Bratt y su cuñada Sabrina. Ella no le caía bien, ella ni su madre, pero las ignoraba y las toleraba por su novio.

Habían ido a cenar pues su novio quería que conociera a su mejor amigo, esposo de su hermana. Rachel no lo conocía, ni su nombre sabía, pero debía ser otro idiota si aguantaba a Sabrina, ella pensaba.

El hombre no llegaba y ella ya se estaba desesperando, así que decidió que era hora de irse y...

—Lamento la demora.

Un hombre habló a sus espaldas, Sabrina sonrió al igual que Bratt quien se puso de pie para saludar a su amigo.

Cuando el hombre estuvo frente a ella, lo observó por unos segundos y abrió mucho los ojos. Él frunció el ceño al verla hasta que pudo reconocerla bien.

—Cariño, él es Chri... —Bratt no pudo terminar la oración.

—¿Christopher?

—Rachel. —sonrió.

Los hermanos Lewis se miraron extrañados cuando sus parejas se sonrieron.

Luego de eso... bueno, ya saben lo que sucede...

~~~

Fanfics Morgan James Donde viven las historias. Descúbrelo ahora