El Psiquiatra

El Exterior

Jhon

Tiene mucho tiempo que observo a Alice desde la cámara, encerrada en estas cuatro paredes, esto comienza a hacerse tedioso y aburrido, no creo que ella sea capaz de hacerse daño a sí misma, ni aún, siendo Celin, no considero que sea peligrosa para ella.
El problema de no saber que tan emocionalmente estable sea, es que si la llevo a "la plataforma" para que pueda ver, su tan anhelado, exterior, no podré saber cómo reaccionará, o ante qué circunstancias reaccionaría de una forma peligrosa. Comienzo a analizar la situación y considero que no es mala idea, aún es temprano,  son las cinco diez, así que los riesgos también disminuyen, de todas formas, no podría huir tan fácilmente de éste lugar.
Enciendo el altavoz
-Alice, te propongo llevarte a "la plataforma", sólo si prometes no hacer nada allá arriba-
-si,  está bien, pero ¿qué es "la plataforma"?- no puedo creer, a ésta chica no le explicó nadie las reglas ni todas las áreas existentes, eso si da lastima.
-mira,  Alice, la plataforma es básicamente la recepción de los enfermos mentales, es decir, un patio de juegos si habláramos de niños pequeños-
-si,  ya entendí, me portaré bien, solo llévame a ver el exterior- es como llevar a una niña de seis años a conocer por primera vez el mar.

Apenas abro la puerta de seguridad y sale Alice con una enorme sonrisa
-vamos, que estás esperando, el tiempo lo vale todo- esas se convertían en sabias palabras al decirlas una persona a la que se le priva de su libertad y que tiene mucho tiempo libre.
Llegamos a la plataforma, ¿apenas las cinco y cuarto?... a veces es como si el tiempo se detuviera, hay una constante lluvia fuera del recinto, Alice sale disparada y se queda viendo lo que hay al rededor del edificio. La expresión de su rostro refleja felicidad y nostalgia.
Pobre chica, es tan solo una victima más de esto.

(Alice)

Es increíble, Jhon me dejó salir a la plataforma a ver el exterior, es hermoso, todo esta mojado, en una esquina del edificio de al lado se puede ver un delgado hilo de agua cayendo desde el tejado, todo me parece hermoso a pesar de ser un día nublado.

Sigo contemplando la hermosa vista cuándo... ¿¡Lily!?... Sí es Lily y detrás de ella, Aitor... Esto no está bien, tengo que salir a ayudarla.
Veo que Jhon se distrae, y en un instante estoy corriendo hacia ella lo más rápido que puedo sin importar el frío y la lluvia de aquí afuera.

-¡Lily!- ella me escucha y levanta la mirada
-¿¡Alice eres tú!?- no puedo, creerlo no me reconoció antes
-¡cállate estúpida niña!- logro llegar a ella muy a tiempo para detener la mano de Aitor y evitar que le pegue a mi hermana una vez más
-no le volverás a poner una sola mano encima a Lily-
-¿y qué es lo que harás Alice?- dice en un tono cínico
-esto...- golpeo su cara con mi puño, lo golpee con toda mi ira ocasionando que él callera al suelo mojado, por lo menos logré que soltara a mi hermana
-gracias Alice, que gusto volver a verte- Lily me está abrazando muy fuerte, veo que Aitor está recobrando la fuerza y las alarmas de fondo comienzan a escucharse cada vez más fuertes
-ahora no es un buen momento Lily...- ella me mira soltando mi cintura -tememos que salir ya de aquí- la tomo de la mano y comenzamos a correr hacia el bosque que nos rodeaba
-¿ahora qué haremos Alice?- volteo hacia atrás y alcanzo a ver a los guardias con sus dardos tranquilizantes rodeando el área
-mierda- susurro
-¿qué?- comienza a dolerme horrible la cabeza
-tú sigue corriendo Lily, cuando ya estés muy lejos trepa un árbol y que no te encuentren,  yo los distraeré- creo que Celin quiere cuidar a Lily, pero puede ser peligrosa, debo resistir hasta que Lily se aleje o por lo menos a que los guardias estén más cerca... Demonios
Suelto a Lily con lágrimas en los ojos, le doy un beso en la frente y le pido que se cuide, después de eso ella se fue corriendo hasta desaparecer de mi campo visual, me tiro al suelo de rodillas y pierdo el control
-hola Celin- susurro antes de perder mi esencia