Amistades Bajo Fuego y Magia

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Otro día temprano en la mañana en la casa búho, Luz estaba narrando a King su libro favorito una vez mas, La buena bruja Azura -"Azura" dijo Hecate, "Nuestros caminos se han cruzado solo en la batalla, pero hoy estoy delante de ti buscando un aliado"- Luz dramatizo toda la escena para suspirar al final ilusionada.

-Luz, estas suspirando de nuevo- King ya aceptaba cualquier cosa rara de la padawan con la excusa de que seguro es algo Jedi o de la fuerza.

-No puedo evitarlo. Azura es capaz de hacerse amigas de todos, incluso de su mayor rival, Desearia tener ese tipo de poder.

-Un rival esta destinado a ser aniquilado, no a ser nuestro amigo. Ahora sigue leyendo, he sido absorbido por tu horrible fandom.

-Muy bien "de repente la puerta se abrió"- justo al decir eso Hooty abrió la puerta con una irritante imitación de un timbre para llamar la atención de los 2 unicos presentes en la sala.

-El libro cobro vida ¡quémalo!

Luz decidio echar un vistazo a quien había llegado solo para encontrar una canasta a la entrada de la puerta. La cual tomo para llevarlo junto a su maestra que estaba en la cocina -Eda, llego un paquete, parece una canasta de regalo.

-De seguro es una ofrenda. Ah ser la bruja más poderosa en las islas hirvientes tiene sus ventajas.

King por su parte se ponía un mantel para alimentarse de lo que sea que haya dentro de la canasta, al destaparla se veía a un bebe de algún demonio durmiendo plácidamente -mmm. Carne fresca.

-No, no me comeré eso- Luz se alejó lo más posible de la mesa disgustada solo por la idea.

-Brujas que comen bebes, es tan 1693, ¿qué es esto?- Eda miraba la canasta extrañada, no era la de comerse a otras criaturas... no si no le habían hecho algo antes.

-Hay una nota- King tomo la nota para leerla -"cuida de mi bebe hasta la mañana, Yi Yi"

-Nop, los bebes son horribles, no hare eso.

-"Serás recompensada generosamente, muchos, muchos, muchos besos y abrazos Reina murciélago"

-¿Reina murciélago?- la atención de Eda se disparó de golpe como una alarma -¿Recompensa?- una alarma de fortuna que solo se intensifico cuando King saco de la canasta unas cuantas monedas de oro.

-¿Quién es la reina murciélago?- Luz se acercó con curiosidad ante el repentino cambio de humor de Eda a la idea de cuidar bebes.

-Es la demonio más adinerada de las islas hirvientes. Haz un trato con ella y tendrás fortuna para toda la vida. Asi que ¿mantenemos a esta cosa con vida por unas horas y nos pagan? Pff fácil- la sobre confianza de Eda era palpable sin saber qué clase de oscuridad podía surgir de su decisión.

-Nuestra mayor aventura hasta ahora. Aprender sobre el amor y la vida a través de los ojos de un niño- sin duda Luz veía una gran oportunidad de aprendizaje en esto, el regalo de la fuerza a una joven vida era algo digno de apreciar a sus ojos.

-Tu no. Tienes que devolver los libros que saque de la biblioteca- Eda hizo un círculo mágico que hizo que todos los libros mencionados aparecieran, Luz apenas pudo agarrarlos para empezar a marchar desilusionada a cumplir su mandado -No quiero que ella se quede con una parte del botín- murmuro Eda a su cómplice peludo.

-Bien pensado.

-Ahora démosle un vistazo a este pequeño encanto- Eda destapo al bebe murciélago solo para que este pegara un grito bestial que hizo que la casa misma se moviera -pensándolo bien, tal vez si necesitemos tu ayuda.

Magia ArcaicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora