El día oscuro pt II

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Y estos sin previo aviso se lanzaron contra ambos, tratando de acabar con ellos.

Selene pasaba su espada con gracia contra todos ellos mientras que Morfeo pasaba sus manos por los cuerpos de los espectros arrancándoles el aliento de la vida que la luna les había dado.

Selene había logrado hacerse camino hacia donde se suponía que estuviera la luna, pero ahora ya no estaba.

Esta extendió las manos pues, aunque no era visible la podía sentir.

-Despierta astro.-le ordeno.

-Si despiertas a nuestra madre entonces ya no existiremos más.-dijo uno mientras le quemaba la piel del brazo.

Selene apretó los dientes, pero no bajo los brazos.

-Despierta.-repitió.

Morfeo viendo la situación de Selene se acerco a ella con el rubí brillándole poderosamente.

-Aléjate.-le ordeno al espectro.

-Gracias.

Morfeo tomó la mano de la guardiana y extendió el su mano.

-Hazlo de nuevo.-le dijo a la musa.

-Yo Selene musa y guardiana con el poder de Oniros te ordeno que despiertes astro.-le dijo firme.

La luna hizo su aparición con gran estruendo y emanando una energía que aún Selene desconocía.

Selene y Morfeo salieron volando hacia el ultimo confín del bosque.

-Aún esta pervertida.-le dijo la Musa a Morfeo parándose mientras este hacia lo mismo.

Ahora era una gran rueda oscura que desconoció y desapareció a los espectros que había parido. El mundo se bañó en tinieblas.

-Nunca podrás domarme guardiana.-se burló la luna.-dame pues ahora tu vida, sacrifícate por tu deber y mostrare misericordia contra la vigilia.

Selene levanto los manos tratando de contenerla nuevamente, pero esta la echo nuevamente a la nieve.

Se sentía débil, era como si el astro ahora le estaba succionando la vitalidad.

Morfeo vio con angustia la dificultad con la que se trataba de reincorporar y fue a ayudarle.

-No me puedo mover.-dijo débil.-No creo que soporte.

-Reclamo tu vida, Selene.-le dijo el astro oscurecido.-es hora de que vuelvas a mi y solo a mi como hija mía. No voltearas tus ojos a nadie más.

Morfeo la miraba horrorizado por dentro, el resplandor se le estaba yendo y podía ver lo decaída que estaba. La estaba perdiendo. Y casi como una sentencia final a su vida ella le habló.

-¿Puedes cargarme y ponerme junto a ella?-le pidió débil.-¿Puedes hacer eso, amor mío?

Morfeo se agacho hacia donde estaba ella y la musa le acaricio la cara.

Al monarca se le salieron las lagrimas y juntó su cara con la de ella.

-No te puedo dejar ir.-dijo en un susurro mientras manchaba la cara de la musa con sus lágrimas por su cercanía.

-Hazlo.-dijo suave.

Morfeo alejó sus caras mirando al astro.

-He cumplido con mi parte del trato, la visión no se debería de cumplir.-dijo perdiendo la compostura.

La luna corrupta se hecho a reír.

-Tu no eres mi señor Oniromante y como tal no puedes mandar en mí.

Morfeo apretó los dientes por dentro debido al enojo para luego recobrarse arrogante.

-Bien.-dijo sin más.

Morfeo cargo a Selene y la puso en lo alto para que el astro la tomara.

El astro gustoso absorbió su energía y vio como Selene perdía la vida y se esfumaba de sus brazos para ser una con la luna.

Morfeo se puso de rodillas en el suelo viendo como la luna abrazaba de nuevo su naturaleza y todo volvía a la normalidad, sintió como la energía densa dejaba de emanar de ella, el día oscuro había pasado, sintió vida de nuevo y ya no tinieblas, sintió todo lo bueno, pero no lo podía acoger todo ya que su corazón se contraía en dolor.

El astro se encontraba en primer plano delante de él la cual era de color pálido de nuevo como el color de la nieve de su bosque que volvía a ser sana mientras que las grietas del suelo volvían a cerrarse.

Y a lo lejos como si de un espejismo se tratara vio a su hermano Destino como se acercaba hacia donde estaba él cargando el pesado libro al que estaba encadenado por toda la eternidad igual que el a los sueños.

-Todo ha vuelto a la normalidad.-dijo viendo las páginas de su libro.

The Ballad of the Moon  ☾ COMPLETA ☽Donde viven las historias. Descúbrelo ahora