💎49

3.5K 361 40
                                    

Jimin no quería despedirse estaba triste pero debía ser de esa manera así que esa mañana de Sábado temprano se despidió de su madre con un gran abrazo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jimin no quería despedirse estaba triste pero debía ser de esa manera así que esa mañana de Sábado temprano se despidió de su madre con un gran abrazo.

     —Gracias Mami por venir a verme, me harás mucha falta de nuevo. —El castaño abrazó a su madre dando suaves caricias en su cabello.

     —En cuanto tenga descanso vendré de nuevo cariño por el momento espero que estén bien y por favor Yoongi cuídalo mucho. —Esto último lo dijo mirando a Yoongi que estaba apoyado en su auto.

     —Por supuesto que si, de eso no se preocupe puede estar tranquila. —Respondió acercándose y despidiendo a su suegra también con un abrazo y ella dejó un par de besos a ambos y se alejó.

El castañito se quedó ahí haciendo un puchero y Yoongi se acercó a él para abrazarlo.

     —Es muy agradable así tal y como la recordaba. —Yoongi lo jaló suavemente para hacerlo entrar en él automóvil.

     —¿Cuánto recuerdas de nosotros en el instituto Yoonie?

Esa pregunta al mayor lo tomó totalmente por sorpresa, ¿Cuánto recordaba? Muchas cosas en realidad, buenas y malas.

Lo que más le gustaba recordar con Jimin eran las veces que se escapaban del instituto para ir a la feria. Se saltaban la barda perimetral y se iban caminando hasta la feria y pasaban ahí toda la mañana antes de volver a sus casas.

Los abuelos de Yoongi no se enteraban de las travesuras de su nieto y la madre de Jimin menos pues desde esa época ya viajaba mucho por su trabajo. El par de veces que la vio ella acababa de volver de un viaje y los llevó a comer ahí fue donde la conoció y le pareció una buena madre para su amigo Jimin.

Otra cosa que recordaba muy bien y con mucho pesar fue el día que su padre llegó por él y se lo llevó a la fuerza de la casa de los abuelos sin posibilidad alguna de poder ver a Jimin por última vez y arreglar el desastre que había hecho con el castañito. Lo único que se le ocurrió fue escribir aquella carta dónde le decía aquellas cosas, quizá Jimin no se acordara de eso.

     —No mucho en realidad, sólo las veces que íbamos a la feria y ganaba enormes peluches para ti.

Jimin sonrió un poco, si que recordaba como Yoongi tenía esa habilidad en el tiro al blanco y siempre ganaba los peluches más grandes para él, tenía su propia colección en su cama Jimin solía dormir abrazado a ellos tontamente imaginando que eran Yoongi.

Suspiró con nostalgia, pero ahora estaba más feliz que nunca porque tenía al verdadero Yoongi a su lado para abrazarlo por las noches.

Yoongi miraba atentamente a Jimin mientras conducía de regreso y también sonrió con melancolía, porque recordó lo mal que la pasó cuando su padre lo llevó al día siguiente al aeropuerto para que se lo llevaran al extranjero donde sufrió por mucho tiempo extrañando a su pequeño amigo y con la culpa carcomiendole el alma y el dolor de no haber podido remediar aquel daño que le había causado. Sólo aquel papel que supuso que quizá Jimin nunca lo haya leído porque no le dio tiempo a entregarlo.

❀~✿ ❀𝕄𝕪 𝔾𝕒𝕟𝕘𝕤𝕥𝕖𝕣 𝕓𝕠𝕪𝕗𝕣𝕚𝕖𝕟𝕕 |𝒴𝑀|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora