Capitulo 7 - Capturados

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La batalla entre el ejército real y el ejército de la Resistencia que se estaba produciendo en el antiguo dominio de Valafar se estaba descontrolando debido a la repentina aparición de la misteriosa quimera en forma de mosca. La oscura neblina venenosa que la bestia estaba generando de su cuerpo se fue extendiendo gradualmente por todo el campo de batalla, lloviendo sobre los soldados que luchaban allí.

Aquellos que inhalaron o entraron en contacto con el veneno, al instante comenzaron a ahogarse, y luego la sangre brotó de cada agujero en sus cuerpos hasta que finalmente se desintegraron.

Los cuerpos desintegrados de aquellos que respiraron la sustancia tóxica, también se convirtieron en veneno mortal, contaminando el vasto campo de batalla a un ritmo alarmante. La mosca quimera solo tuvo que moverse y respirar para que el veneno se extendiera.

Si alguien atacara, su carne estallaría y la sangre salpicaría - la sangre en sí misma
también se convertiría en veneno. La mosca quimera estaba propagando su veneno mortal entre las tropas de ambos bandos, causando una destrucción masiva.

Mientras tanto, Sirzechs Gremory se llevó al shockeado  Shalba Beelzebub y entró en una de las bases de la primera línea del ejército real en el antiguo frente de Valafar, la base del ejército de Lucifuge.

Demonio 1: ¡es Sirzechs Gremory!

Demonio 2: ¿qué hacemos?

La llegada del as del ejército enemigo había conmocionado a las tropas del ejército
real, pero se mantuvieron firmes, incluso con lanzas apuntando hacia ellos. Con Shalba Beelzebub en sus brazos, las tropas estaban doblemente perplejas por esta
situación.

Shalba:...ya puedes bajarme Gremory - dijo tranquilo. A lo que el pelirrojo bajo al castaño.

Demonio 2: señor Beelzebub - dijo sorprendido.

Shalba: llevenos con Lord Lucifuge - dijo serio, mirando al soldado el cual se tensó.

El demonios los guio hacia donde se encontraba Lord Lucifuge. No sin antes esposar a Sirzechs haciendo que Shalba tuviera un tik en el ojo y en el trayecto los demonios susurraban varias cosas.

"¿Fue ese monstruo convocado por la Resistencia?" "¡Nunca he visto ni oído hablar de ese monstruo!" "Parece que lord Lucifuge salió para derribar a la bestia, pero..." "Sí, escuché que inhaló el veneno y se desmayó".

Sirzechs escuchó estas conversaciones mientras era escoltado por las tropas y obligado a pararse frente a la carpa donde estaba el comandante.

Demonio 2: ¡disculpe, mi Lord!, ¡he traído a lord Sirzechs y lord Shalba! - dijo con respeto, mientras llevaba a ambos demonios adentro.

Lord Lucifuge: ¡cough! ¡cough!

Grayfia: ¡Padre!

Shalba: Grayfia, era evidente que ella también llegaría a la base - dijo serio.

Uno de los soldados entró para explicar la situación. Poco después, Sirzechs escuchó
la voz de un hombre que decía: "Déjalos entrar". Sirzechs y Shalba fueron instruidos para entrar solos. Dentro había un hombre de cabello plateado y de aspecto viril que yacía en la cama con Grayfia a su lado. El hombre parecía tener un dolor severo, y justo al lado de su almohada, había una toalla manchada de sangre.

Sirzechs hizo contacto visual con Grayfia. Ambos expresaron expresiones bastantes complejas.

Shalba: Lord Lucifuge, veo que lo que decían los soldados era cierto, fue demasiado estúpido salir solo contra esa...cosa - dijo serio, mirando al hombre en cama.

Lord Lucifuge: jajaja ¡cough! me alegra saber que está bien su majestad - dijo sonriendo levemente, levantando solo su parte superior del cuerpo.

Shalba: si...

Reencarne en Shalba BeelzebubDonde viven las historias. Descúbrelo ahora