violines y suspiros

cap 6 - La nota

De camino a casa, Brendan no deja de ver la nota que le había dado la niña:

-En la posada... - Brendan solo sabía de una posada en el pueblo, estaba algo lejos. Pero eso no iba a impedir que viera otra vez al violinista.

-Ya llegué...-Dijo Brendan mientras dejaba su mochila en la mesa, Y su madre se acercaba para darle un beso en la mejilla:

-Hola Brendan, ¿Cómo te fue en tu paseo por el pueblo?- (esa fue la excusa que Brendan le dio a su madre para poder ir al pueblo).

-Oh, de hecho, me fue bastante bien.- dijo Brendan mientras dentro del bolsillo de su chaquetón pasaba los dedos quisquillosamente por la nota de la niña.

- Qué bueno. ¿Y pudiste conseguir el pan?

Brendan se avía olvidado totalmente de ello.

-Lo siento, lo olvidé. Pero mañana te lo conseguiré.

Su madre estaba sacando platos de la alacena, cuando de repente giro la cabeza, con una expresión de asombro hacia Brendan, y le pregunto:

-¿Mañana saldrás de nuevo?

Brendan apreto con su mano la nota dentro del bolso de su pantalon- amm. Sí, es que mañana tengo algo que hacer en la tarde...

La señora Johnson revolvió algo en una olla, y después dijo:

-Está bien. Puedes salir mañana, ¡solo!... ¡Si esta vez traes el pan sin falta!

La madre de Brendan le apunto con el cucharón un poco amenazador. Brendan solo asintió.

La señora Johnson apago el fuego de la estufa y se dirigió al pie de las escaleras.

-¡Adara, Aurora! ¡La cena está lista!

De las escaleras baja corriendo la hermana menor de Brendan, acompañada por otra niña que nunca avía visto. Las dos se sientan en la mesa, una al lado de la otra;

-Aurora, él es mi hermano: Brendan. Brendan, ella es mi amiga: Aurora.- Dijo Adara un poco sonrojada.

-¿Él es el hermano lindo, o el que dices que es un ogro de pantano?

Brendan y Adara sueltan una carcajada.

-No. Él es el lindo.

- ha, ha, ha ok. Es un placer Brendan.

Después de cenar, la amiga de Adara se fue a casa acompañada por su madre.

Y no paso mucho rato para que el señor Johnson y su hijo llegaran a casa, después de una jornada de trabajo.

La señora Johnson les sirvió de cenar a su esposo y a su hijo. Y después de que terminaron, la madre de Brendan empezó a subir las escaleras con sus hijos, pero se detuvo cuando el señor Johnson le hablo.

-Kimberly.- normalmente el padre de Brendan no le hablaba por su nombre a su esposa, a excepción de cuando estaba por decirle algo sumamente serio, o de gran importancia.- necesito hablar de algo contigo.

Los hermanos se echaron una mirada de intriga entre ellos.

-Claro...- la señora Johnson igual estaba algo perpleja- vayan subiendo niños, en seguida subimos.

Llegaron al cubículo que había enfrente de los cuartos y Cian se arrimó rápidamente hacia la pared:

-¿Y ahora que crees que estás haciendo?- le reprocho Adara en un susurro.

-shhh. Ustedes vayan a la cama, yo me quedaré a escuchar.- dijo con brusquedad este Cian.

Adara puso los ojos en blanco y se fue. Brendan siguió a su hermana.

Después de un rato, Cian entra al cuarto con una mirada perdida en el rostro.

-¿y bien?...-dijo Adara con poco interés, pero Cian no dijo nada, solo se sentó en su cama y vio hacia el piso. Pensativo.

-¿Cian?...- pregunto Brendan algo preocupado desde su cama.

Cian volteo a ver a su hermano con una expresión de tristeza. Y dijo:

-Descansen.

Y se recostó sin decir nada más.

Al siguiente día, Brendan se despertó muy temprano. Estaba bastante emocionado.

Apenas abrió los ojos, lo primero que vio fue la ventana de su cuarto; por fuera se podían observar nubes de un color azul gris.-"parece que pronto nevara..."- de pronto escucha un crujido detrás de él. Y cuando giro la cabeza, se encontró con Cian, quien se estaba preparando para ir a trabajar. Cian no veía a los ojos de Brendan.-Buenos días, Cian.- Cian solo tomo un chaquetón, y antes de salir del cuarto... Miro a su hermano, apenado.