ʚ Anécdotas de la vida ɞ

Venados ·

¿Por qué me pasó eso? ¿Por qué me ocurrió a mí? ¿Qué hice yo? Nunca le hice daño a nadie, entonces, ¿Por qué me lo hicieron a mí?

Cada noche sueño con aquella tragedia, es una tortura...

Tan solo íbamos caminando por el bosque, el sol había desaparecido hace unas horas, pero estábamos tranquilos, no escuchábamos a ningún depredador.

De golpe el silencio se rompió con el gruñido de una de esas bestias metálicas, ya los había visto antes. Varios humanos salieron de las entrañas de esas bestias, entre los brazos traían algo que llamaban ''escopeta''.

Mi hermana tan solo tenía cuatro años, pero corría como un guepardo.

Empezaron a llover flechas del cielo, era difícil esquivarlas, caían con fiereza sobre nosotros.

Yo seguía corriendo y corriendo, pero mi hermana se detuvo, no podía levantarse, no podía respirar, no podía seguir adelante. De su lomo brotaba un río carmesí, supe que ya no me podría acompañar.

Pero me negaba a abandonarla, no en ese momento.

Atacado por el miedo corrí hacia unos arbustos, las pisadas de los humanos se escuchaban cada vez con más claridad. ''¡Tenemos a un cervatillo!'' ''¿Dónde está el otro venado? ¿Lo habéis cazado también?'' decían esos humanos mientras admiraban el cadáver de mi hermana. No los entendía bien, pero pensaba que me estaban buscando.

Por suerte, lo único que consiguieron de mí esos sinvergüenza fueron mis astas.