Preso de tus deseos [KOOKMIN]

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Al despertar, sus fuertes brazos rodeaban su cuerpo, Jimin sonrió y acarició su pecho, acercó su nariz a su cuello y pasó la lengua haciéndole estremecer, por impulso había hecho eso sintiendo algo en su interior, ese calor que empezaba a invadirlo lentamente ante el aroma de Jungkook.

poco después sus labios se movían en una lucha por dominar al otro, pero ninguno parecía poder ganar, Jimin terminó ahorcadas sobre Jungkook y sus caderas empezaron a moverse sobre su miembro; los labios de Jungkook recorrían nuevamente su cuello y Jimin empezaba a temblar ante la sensación de peligro, su excitación iba subiendo de nivel al igual que la de Jungkook, Jimin apreso nuevamente sus labios en un beso lleno de deseo y lujuria.

sin aliento se separaron para contemplarse el uno al otro, Jimin acarició su abdomen buscando el broche para deshacerse de el y luego bajo su cierre acariciando su vientre para luego descender a su falo, una vez expuesto lo tomó con sus labios saboreando el glande lentamente; su lengua se paseaba por toda la extensión, haciéndole que gimiera fuerte por lo bien que le hacía sentir.

Sus manos acariciaban cada cuadrito de su abdomen haciendo a su piel erizar, Jungkook lo tomó de sus cabellos para marcar un ritmo el cual le hacía ver el cielo al sentir su miembro tan profundo, el majestuoso falo erguido brillaba hermoso por el presemen y Jimin no pudo contenerse ante la tentación, se deshizo de su ropa y lo introdujo de golpe en él; una lágrima corrió por su mejilla y lentamente empezó a moverse, dando órdenes para que él le tomará como sabía hacerlo, quería nuevamente su marca en su cuello, la pedía con desesperación, su excitación era tan fuerte en ese momento su cerebro hizo corto, pidiendo algo que seguramente le llevaría a la muerte.

Jungkook arremetía su punto dulce con fuerza empezando a morder su labio inferior, Jimin al ver la sangre de él, la bebió y eso incrementó su libido hasta las nubes y empezó a gemir cada vez más fuerte.

_<< tómame soy tuyo>> ¡aaah!- gimió al sentir el golpe en su punto dulce.

Jungkook se resistía a la orden de Jimin sabía que era peligroso para él y marcarle nuevamente lo pondría en riesgo de muerte, Jimin bombardeaba con sus deseos a Jungkook, haciendo que él empezara a golpear más fuerte su punto dulce; en la búsqueda de su orgasmo, no había podido resistir más y no tuvo más opción que obedecer, ahora se preparaba para hincar sus colmillos en su suave cuello como él se lo estaba pidiendo.

Mientras tanto, Jungkook observaba a Jimin en su cama gimiendo, él estaba teniendo un sueño húmedo pero las órdenes que daba en su sueño lo alcanzaron y estaban afectando su juicio, él trato de resistirse a ellas.

Se levantó rápidamente de la cama para intentar huir, pero al instante quedó paralizado por una extraña fuerza que le hizo regresar a su lado; Nuevamente trató de alejarse para protegerlo, pero su control terminó por doblegarlo.

Jungkook rápidamente arrancó sus ropas dejándole desnudo, se deshizo también de sus ropas, alineó su miembro con su entrada y lo penetró de una estocada, empezando a moverse rápido y profundo como se lo estaba pidiendo; Jungkook mordió su labio y le dio de beber su sangre mientras arremetía su punto dulce.

Mientras tanto en el sueño Jimin estaba por llegar al orgasmos, seguía pidiendo mas y mas hasta que sus ojos se tornaron en blanco y llegó al orgasmo, su respiración era lenta y poco a poco se quedó dormido en sus sueños.

el haberse dormido en su sueño era la salida de el, lentamente abrió los ojos sintiendo de golpe las caricias en su interior logrando que se excitara aun mas de lo que estaba por el sueño, ido en las sensaciones, no paraba de gemir complacido por el despertar tan delicioso que estaba teniendo era igual al de su sueño, hasta que la mordida en su cuello hizo que el dolor le invadiera.

Jimin quiso gritar para que él se detuviera, pero la fuerte ola de excitación que provocaba su mordida, le dejo sin poder emitir sonido alguno, Jungkook estaba penetrándolo y bebiendo de él, tal y como se lo había pedido, mientras tanto Jimin empezaba a sentirse muy mareado y a punto de llegar al orgasmo, segundos después sus ojos se tornaron en blanco para después correrse.

Jungkook se detuvo cuando llegó a su orgasmo, lamio la herida y está cicatrizó poco después, Jimin estaba siendo golpeado por su orgasmo, pero se mantenía aun excitado por su mordida y poco después se desmayó en sus brazos; Jungkook asustado por lo débil que se veía, trato de reanimarlo sin éxito, fue en ese momento que en su desesperación tomó la decisión de darle de su sangre; mordió su muñeca y acercó su muñeca a su boca y le dio de beber su sangre, Jimin abrió sus ojos y éstos se tornaron de color turquesa por un segundo, rápidamente tomó su muñeca y empezó a succionar con fuerza.

Dos lunas más aparecieron en su espalda, una por la mordida y otra por beber de su sangre, Jimin dejó libre a Jungkook cuando se sintió saciado y nuevamente se quedó dormido, Jungkook sintió latir su corazón, este latía nuevamente como cuando lo hizo suyo por primera vez, lo tomó entre sus brazos y acarició sus labios, su rostro y su cuerpo; Jimin parecía haberse recuperado gracias a su sangre, él hermoso color de sus mejillas estaba ahí nuevamente y su pulso se había normalizado.

Jungkook sonrió al verle dormir como un bebé, tomó lentamente sus labios y él despertó, excitado nuevamente, solo bastó una mirada para que Jungkook hiciera lo que pedía, él abrió sus piernas para él y Jungkook nuevamente se hundió en él, acariciando su interior, sintiendo como el vibraba en sus brazos por la excitación y una vez más Jungkook había quedado preso de sus deseos, prisión a la cual caería una y otra vez sin resistirse.

Jungkook tomaba los labios regordetes y los saboreaba como si fueran caramelos, ahogando los gemidos de Jimin hasta que finalmente llegaron al orgasmo nuevamente, Jungkook se corrió al mismo tiempo que él, invadiendo con su esencia el interior; algo empezó a cambiar en Jimin y la mirada color turquesa estaba ahí mientras los espasmos de su reciente orgasmo movían su cuerpo, poco después el color turquesa desapareció de su mirada y ahora dormía profundamente.