Capítulo 23

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El silencio era ensordecedor. Preguntas que nadie tenía respuestas para correr por la mente de todos, pero ninguna salió de los labios sombríos. Natsu estaba completamente inmóvil, lo único que le recordaba al resto del gremio que no era una de las estatuas el hecho de que conservaba su color.

Wendy dudó por un segundo, de pie a varios pies de distancia de Natsu, con los ojos saltando entre Natsu y sus compañeros de gremio convertidos en piedra, antes de dar un paso adelante. Al no ver ninguna reacción del Príncipe Dragón, se acercó, colocando una mano gentil sobre su hombro y sintió que se tensaba, los músculos se tensaron aún más cuando apartó los ojos de Mira. ''¿Estás bien?"

La ira estaba torciendo su rostro generalmente inexpresivo, lo que hizo que Wendy se estremeciera involuntariamente. Natsu parpadeó lentamente, obviamente sin esperar esa pregunta. Un ligero brillo acechaba debajo de su ojo rojo, algo que Wendy no notaría si no estuviera parada justo frente a él. " ¿ Estoy... bien ? "

Wendy asintió vacilante.

Natsu no respondió, quitando su mano de su hombro, sus ojos se movieron hacia el resto del gremio y los miembros se congelaron cuando la fría mirada se posó sobre ellos. Makarov pareció encontrar su voz, la conmoción se apartó y fue reemplazada por la ira. ''¿Que estas esperando? ¡Mudarse! ¡Tenemos que encontrarlos!”

Incluso mientras decía que se estaba moviendo hacia las puertas, otros miembros corrieron rápidamente por la puerta. Nadie quería quedarse cerca de un Natsu enojado. Angry Makarov los hizo correr mucho más rápido. La expresión tormentosa de Makarov se detuvo cuando su rostro chocó con una barrera, antes invisible. ''Que-?''

Runas de Freed

Makarov saltó ante la voz burlona y vacía. Natsu estaba a menos de un pie de distancia, con el rostro cuidadosamente en blanco. Makarov no se dejó engañar. No estaba seguro de haberlo visto nunca tan enojado. No, estaba seguro de que nunca lo había visto tan enojado. Natsu suspiró y apoyó la mano en las runas, haciendo que se encendieran de nuevo, sin dejarlo pasar tampoco.

Los de piedra y los mayores de 80 años no pueden pasar. Las puertas para ti están cerradas.

Natsu hizo una pausa, mirando las runas con breve interés antes de volver su mirada hacia Makarov. "¿Eres tan viejo?"

Makarov tembló, el párpado palpitó por un breve momento. ''¿Asi que?"

Natsu negó con la cabeza y volvió a mirar las runas antes de murmurar un encantamiento que Makarov escuchó muchas veces, hundiéndose en el suelo. Un fuerte crujido resonó en el pasillo y Natsu salió volando del agujero que se abrió a solo un pie del original, su ropa humeaba ligeramente mientras se levantaba y se quitaba el polvo, zarcillos negros de magia bailaban alrededor de sus pies, un gruñido escapaba de sus labios. . '' ¿Bloquear la dimensión también? ¿Bloqueando mi acceso al Vacío, Freed?" Natsu murmuró para sí mismo.

Makarov y Wendy lo miraron en estado de shock. "¿Por qué no puedes pasar?", Preguntó Wendy en estado de shock, volviéndose hacia las runas y extendiendo la mano vacilante, sin aliento cuando su propia mano se conectó con ellas.

"¡¿Qué está pasando?!", gritó, golpeando con el puño las runas de nuevo.

"No tienes más de ochenta años, ¿verdad?" Makarov miró a Natsu con curiosidad. Natsu puso los ojos en blanco. "Por supuesto que no. Tengo diecisiete".

Makarov parpadeó, casi sorprendido. A menudo olvidaba lo joven que era Natsu. Wendy miró a Natsu. '' Pero, ¿por qué no podemos pasar? Definitivamente no tengo más de 80 años y estoy absolutamente seguro de que no soy una estatua de piedra".

Natsu se encogió de hombros. "Yo... no estoy seguro" obviamente no estaba acostumbrado a no saber. "Yo..." hizo una pausa, vaciló en realidad y Wendy comenzó a sospechar. ''¿Qué?''

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