Day 5| Storm/ Sunshine

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Caminando sólo en la lluvia.

La llamada que lo cambió todo fue la que determinó la decisión de Donovan de huir dejando a su familia atrás. Ya no le importaba, esa presión en su pecho desaparecería paulatinamente y aquella zozobra que lo inundaba con respecto a su futuro se terminaría por desvanecer.

Ya no importaba nada, solo buscar un lugar en el cual refugiarse de aquella tempestad física y emocional. La camisa no alcanzaba a protegerlo de la inclemencia de los vientos fuertes, y sus manos tanteaban la llave.

Llave que ya no tenía propósito, su hogar era centro de investigación de las agencias gubernamentales de Westalis, ya no podía volver. Demetrius se encargaba de rescatar algo de su nombre para variar, y su madre, con su padre quien sabe donde.

Estaba solo, o al menos ahora era consciente de esa soledad con las que siempre se las había apañado el sólo.

Un monto, miserable a comparación de los lujos que antes había tenido en su época de esplendor. En ese instante, seguir adelante parecía una mala broma, el honor de su familia, metida en asuntos turbios hasta el cuello, era equivalente a la blancura del carbón.

Fue cuando al dar una vuelta por una calle percibió una voz, un conjunto de voces para ser más precisos, llenos de alegría.

Lo último que deseaba ver era a la familia Forger, sobre todo a la persona que había salido lastimada en ese asunto.

Con una blusa que le llegaba hasta los codos, un vestido azul y un lazo rojo en su cuello. Anya Forger, simplemente deseaba desaparecer. Temía que aquel brillo que había percibido en su mirada los últimos meses antes de la verdadera lucha intelectual, hubiera desaparecido con tan tenebrosa revelación involucrada con su pasado, pero ese brillo seguía latente.

Ella debía ser a esas alturas la última persona de Ostania que no lo miraba con repulsión.

Ella pareció decirle un par de palabras a sus padres, y él aprovechó para escapar.

- Segundo!

Prefirió transitar por esas calles que desconocía. Todo por ir siempre con un chofer.

- Syon-boy! – exclama la chica al conseguir alcanzarlo, tiene el pelo mojado, el vestido empapado, y con ese brillo refulgurante en sus ojos, que conoce muy bien porque el mismo tiene ese brillo sólo para ella. Recuerda lo sucio que es su apellido y desvía la mirada.

Corre dándole la espalda.

- Damian! Por favor no me des la espalda!

Un callejón sin salida, maldice su nulo conocimiento de las calles de Berlint.

- Damian

- Anya.

Amobs se miran. Anya puede leer las mentes, Anya puede saber lo que piensa y lo que le atormenta, siempre fue un libro abierto para ella.

- No tienes nada que ver! – grita ella aún agitada por la carrera – No te odio! Mi familia nunca podrá! Eres inocente, ¡No mereces el desprecio que te dan!

La tormenta le da paso al sol.

La tormenta cesa, y cae una benévola llovizna, encima de los jóvenes atormentados, de dos mundos distintos, que por fin comenzarán de cero, por encima del historial de sus padres.

Por fin, juntos, comenzando a sanar.

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Dianemi Note

Este debe ser el día más corto de todos. Pero me doy por satisfecha, el resultado es de mi agrado, incluso tengo un pequeño comic entre borradores, que lo publicare (algún día) en Instagram.

Esta es la maratón.

Contrariamente iguales|Damianya week 2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora