INESPERADAMENTE CRUEL 2 ➷KOOKMIN➹

05.

Jeon al terminar aquella llamada ordenó regresar a la mansión sin dar explicación alguna. Los escoltas rápido subieron a las camionetas dando en marcha con rapidez hasta poder llegar a la mansión.

Gracias a Hoseok llegaron rápido haciendo que Jungkook bajara cargando su arma haciendo que todos hicieran lo mismo. Jeon subió con rapidez hasta llegar al piso de arriba buscando a Jimin lo antes posible.

—¡No!, ¡Basta!.. ¡Sueltame!..

Esos gritos hicieron alarmar a Jeon llegando a la Oficina escuchando más fuerte los gritos de desesperación de Jimin. Entró viendo lo que tanto miedo le daba. Jimin estaba siendo tocado por uno de sus escoltas.

—Basta— pidió sollosando.

Sin esperar ser visto apuntó al principal dejándolo sin vida asustando a los otros dos que soltaron a Jimin poniéndose pálidos. Hoseok apuntó a uno mientras otro escolta apuntaba al otro tomandolos para sacarlos de ahí. Jimin se hizo bolita debajo del escritorio por lo cual Jungkook se acercó viéndolo indefenso.

—Jimin— tocó su espalda.

Jimin brincó —¡No!, ¡ya no!, ¡no me toques!— pedía haciendose más bolita esperando que dejaran de tocarlo.

Jeon entendió que no podía tocarlo hasta lograr calmarlo. Se sentía tan mal ver como su esposo estaba teniendo miedo. No le gustaba verlo en ese Estado y aquel hombre esta muerto como para torturarlo.

—Señor— llamó Hoseok desde la puerta —El escolta Suho sigue Vivó.

—¿Encerio?.

—Si, pediré que lo mantengan con vida si así lo desea.

—Hazlo.

Hoseok se fue dejando sólo a Jeon con su esposo. Jimin no quería tener a nadie sercas, no quería que nadie lo tocará ni lo llamaran porque sentía estar muerto, sentía estar en el peor lugar de la vida. Jungkook empezaba a cristalizarle sus ojos aguantando las ganas de llorar solamente para no mostrar lo tan afectado que estaba.

—Amor— intento llamar de nuevo.

—Aléjate, no me mires— sollozaba aún más fuerte.

—Amor, soy Jungkook. Soy tu esposo amor... Minnie soy tu kookie— su voz se cortaba.

—¿Kookie?— poco a poco fue levantando su mirada viendo a su esposo incado frente a el —¿Mi esposo Jeon Jungkook?.

—Si mi amor, soy yo— sonrió sintiendo sus lágrimas caer.

—Jungkook... — sollozo aún más fuerte apegandose a el sintiendo como era abrazado.

Jeon apegaba más al menor escuchando llorar a su esposo, sentía como Jimin lo tomaba fuertemente de su camisa.

—Ya paso amor, todo estará bien pequeño. Estoy aquí Minnie— acariciaba el cabello gris de su esposo —Tranquilo pequeño.

Escuchar la voz de su esposo empezaba a tranquilizarlo. Ya no sentía miedo solo seguridad, no quería despegarse por ningún momento del mayor porque amaba demaciado esa tranquilidad que sentía en ese momento.

—¿Mejor?.

Asintió.

—Vamos a la habitación— pidió ayudando a levantarlo mientras lo vestía.

Jimin se dejaba vestir mirando aquellos ojos rojos por las lágrimas que había sacado su peli negro.

—No llores cariño— tomó la mejilla de Jeon limpiando sus lágrimas.

—No puedo, deje que te hicieran daño— otras lágrimas calleron.

—No Jungkook— limpiaba aún más esas lágrimas —Solo me tocó pero no me violó. Llegaste justo antes que eso pasará.