06.

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—Jeon si— interrumpió acercándose un poco más —No quieras tapar el sol con un dedo... Soy mucho mejor que el y lo sabes, jamás te hize daño como amigos en esos tiempos. Ahora que volví y sabiendo que estas vivo, lucharé por tenerte a mi lado.

Esas palabras hicieron que Jimin se desconectara de todo. Había comido tan solo un poco de aquella comida preparada por su chef personal y encerio que amaba esa comida pero después de esa plática con Jay su mente trabajaba pensando una solución. Sabía que si le contaba a su esposo lo sucedido hiba a querer matar a Jay pero no quería eso. Tampoco quería ocultarles las cosas porque juraron no mentirse, porque odiaba mentir y odiaba no sabes que hacer.

Jungkook pudo notar lo tan distraído que estaba su esposo pero prefería preguntarle que le sucedía cuando aquellas visitas se fueran. Su mirada aún no la quitaba de Jay porque vio como se comía con la mirada a su Jimin. No saber que pasaba con Jimin y la mirada de Jay lo estaban consumiendo, necesitaba respuestas ya.

De improvisto tomó la mano de Jimin para llevárselo arriba basta llegar a su habitación. Cerro la puerta con seguro mirando la cara de confusión de Jimin por lo cual se acercó a el tomando su cadera apegandolo a el.

—Ahora mismo me dirás que te sucede... Jay no para de verte siendo tan hijo de puta— su voz sonaba molesta pero grabe —Es tan descarado que te mira con lujuria.

Jimin permaneció callado, sabía que su esposo estaba molesto y lo pronto que diría empeoraría todo.

—Dime la verdad Jimin— pidió desesperado.

—¡Jay sigue enamorado de mi y luchará para tenerme a su maldito lado!— grito frustrado al ya no poder seguir ocultando ese enojo.

Jeon soltó la cadera de Jimin sentándose en la cama asimilando lo dicho e intentando no salir de la habitación para matar aquel tipo.

—¿Solo dijo eso?.

—Si— respondió sentándose aún lado del mayor.

—Hijo de puta— hizo su cabello para atrás frustrado más enojado.

—Jungkook, déjalo ¿si?... No quiero peleas, apenas estamos entrando en el negocio como para estar peliando.

—¡Pero ese maldito!.

—Ey, no hagas nada— se sienta en los muslos de Jungkook poniendo sus manos en su cuello —Cariño, déjalo pasar hasta poder tener tiempo de pensar ¿ok?.

—Diablos, como me encantaria follarte en ese mismo instante para que todos en esta puta mansión escuchen como te hago gemir— suspiro cansado.

—¿Y por qué no?— sonrió coqueto.

Jungkook pudo sentir como su mal humor se había ido con aquellas palabras de su esposo. Deseaba mostrar cuanto placer le daba a su esposo para que así todos escuchen aquellos gemidos que eran solamente para el y nadie más haría sentir lo que hace sentir a su pequeño.

—No lo pienses tanto cariño— se acercó a su oído —Follame duro hasta hacerme temblar.

Jeon sonrió de lado tomando a Jimin para acostarlo empezando a besar sus labios con Pasión, metiendo su lengua haciendo más intenso el beso. Quito los pantalones de Jimin con desesperación al igual que los suyos. Se quitaron todas las prendas que faltaban tocándose.

—Entra ya~

Jungkook preparó a Jimin para empezar a penetrarlo lentamente hasta esperar el momento de poder hacer sus movimientos a otro nivel. Ya acostumbrando el dolor empezó a moverse lento pero duro sintiendo como su pequeño enterraba sus uñas en su espalda mientras besaba los jugosos labios del menor. Jimin podía sentirse en el cielo mientras era besado y masturbado. Ser follado de esa manera lo hacía ver estrellas.

INESPERADAMENTE CRUEL 2 ➷KOOKMIN➹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora